domingo, junio 30, 2013

Fundamentos del Feng Shui




El Tao son las conexiones.
El Ying y el Yang: es el equilibrio entre los opuestos.
El Chi es la energia y las percepciones.
Los cinco elementos: son los materiales, las formas y las actividades.
El Ba-Gua: son las direcciones.


El tao constituye un proceso y un principio que vincula al hombre con el universo. los chinos tienen un dicho "todo está de acuerdo con el tao". El tao es el camino, la senda.
Allí donde miremos podremos observar signos de cambio: las estaciones del año, el vecindario, nuestro cuerpo, nuestro estado de animo o nuestras emociones. Por consiguiente nuestro entorno no sólo está vivo e interrelacionado con el espacio físico en el que está ubicado sino que además se halla sometido a constantes cambios.
Yin y Yang: son dos fuerzas primordiales que gobiernan el universo. se trata de dos opuestos que se complementan y juntos constituyen todos los aspectos de la vida y la materia.

Yin: tierra, sombra, oscuridad, es pasivo, etc.
Estar, dormitorio, baño, templos, hospitales, etc.

Yang: cielo, luz, actividad, cálido, duro.
Cocina, escritorio, estadio, discoteca, teatro, oficina, etc.

Pero cuando se juntan son la armonía, que es el tao.

Dependen el uno del otro, sin calor no hay frío, sin nuevo no hay viejo, etc.
El yin existe dentro del yang y viceversa.
Las formas, los materiales y los colores de los objetos que cada uno coloca en su casa hacen que la energía chi sea más yin o más yang.
El chi se encuentra en el cuerpo humano, en las plantas o en las construcciones, pero una parte de él fluye constantemente desde y hacia otras fuentes de energía. La energía chi personal de cada uno siempre está combinada con la energía chi del entorno.
La energía chi que uno recibe del medio ambiente influye sobre el estado de animo, las emociones, la energía física y circunstancialmente sobre la salud. La energía chi se desplaza por el medio ambiente a través del viento, del agua, de la energía solar, de la luz y del sonido.
Algunos sitios dan la sensación de ser radiantes y alegres, otros parecen fríos, húmedos. Todas estas son características del chi de la casa.
El buen fluir del chi en una vivienda mejora el chi de los ocupantes. Por ejemplo, si tres o más puertas se encuentran alineadas una tras otra, expulsarán el chi con mayor facilidad pero si colocamos un carillón de viento estratégicamente colgado moderará el flujo de energía chi.
Por otra parte es preciso cuidarse del chi opresivo y encerrado de un pasillo oscuro y angosto porque puede inhibir las posibilidades de sus moradores de hallar éxito en la vida y en le trabajo. El uso adecuado de luces y espejos despejará simbólicamente el espacio.

Energía chi desfavorable

Algunas situaciones producen tipos indeseables de chi, causan problemas a sus ocupantes y hasta enfermedades físicas o mentales. Por ejemplo, el chi caótico reinante en un armario ropero abarrotado y en desorden se transmite a toda la casa y puede provocar vibraciones negativas en todo el lugar.

• El chi negativo: algunas construcciones y materiales de decoración ejercen un efecto negativo sobre la energía chi: las fibras sintéticas, los materiales para construcción sintéticos, la iluminación artificial y el aire acondicionado. Todas estas cosas suman chi artificial que influye en forma negativa sobre el chi de sus ocupantes.

• Chi estancado: la energía que se desplaza con lentitud y la estancada se originan en los rincones oscuros, en las habitaciones desordenadas y con humedad.

• Chi de flujo rápido: la energía chi que se desplaza con rapidez en línea recta puede desestabilizar el flujo de un edificio entero, por lo que deben evitarse los pasillos largos, los senderos rectos o varios objetos ubicados en línea recta.
La energía chi de flujo rápido dirigida hacia una persona, puede quitarle parte de su propia energía chi, provocando que se sienta insegura o baja presión