domingo, noviembre 30, 2008
La Secta de la Nueva Era - (New Age)
¿QUÉ ES EL MOVIMIENTO DE LA NUEVA ERA?
El término "Nueva Era" evoca imágenes de cristales de cuarzo, alimentos naturistas, meditación y aun de la famosa actriz Shirley MacLaine y Walter Mercado. ¿Pero exactamente de qué se trata este movimiento y cómo afecta a los cristianos?
El querer explicar el Movimiento de la Nueva Era no es una tarea fácil, simplemente porque se compone de personas que provienen de una extensa variedad de creencias y tradiciones religiosas independientes. Sin embargo, estos individuos comparten visiones y valores comunes que les permite colaborar entre ellos a fin de moldear a la sociedad de acuerdo a sus expectativas, de como debería ser el mundo. Ellos han hecho algunas incursiones importantes en los campos de la educación, los negocios, la salud pública y en menor grado dentro de la política y la ciencia. Los valores de la Nueva Era provienen básicamente del misticismo oriental, especialmente la creencia que todos ser es parte de un todo y que este todo es Dios. Esto es conocido teológicamente como monismo panteístico. Los miembros de la Nueva Era están comprometidos con la visión de un período venidero de paz universal y revelación que ellos llaman "la Era de Acuario," donde la población mundial estará compuesta esencialmente de los creyentes de la Nueva Era.
Como una fuerza social creciente y una tendencia cultural, el movimiento de la Nueva Era presenta un desafío no solamente al humanismo secular, pero en mayor grado a la fe Cristiana. En efecto el movimiento de la Nueva Era puede ser considerado un resurgimiento del paganismo que promueve una gran variedad de creencias y prácticas ocultistas incluyendo la reencarnación, los trances espiritistas y todas las formas de adivinación.
Sin embargo, la Biblia en Deuteronomio 18:9-12 nos explica claramente que Dios detesta y condena tales prácticas. A pesar de estas advertencias muchos seguidores de la Nueva Era continúan combinando el mensaje de las Escrituras con la filosofía de la Nueva Era. Como miembros del cuerpo de Cristo, debemos estar concientes del peligro que representa este movimiento. También debemos de estar listos para responder a las mentiras de la Nueva Era con la verdad de la Palabra de Dios.