jueves, abril 14, 2022

La Regla Secreta del Temple

A vosotros Hermanos os es dado conocer los secretos del Reino de Dios, felices nuestros ojos y nuestros oídos que ven y escuchan. Sabed que reyes, papas, obispos, abates y maestres han deseado ver y escuchar lo que vosotros escucháis y veis, pero ellos no lo han visto y no lo han escuchado y no lo conocerán jamás.
(De la Regla Secreta del Temple)

Este primer número monográfico del Boletín Temple representa un auténtico hito divulgativo, no sólo porque difunde datos inéditos, sino porque pone al alcance del gran público de habla hispana el que sería texto de la conocida como Regla secreta del Temple: el Libro del Bautismo de Fuego.

A través de esta Regla, o Estatutos de Roncelinus, muchos creerán adentrarse en el aspecto esotérico templario definitivo, aquél que quizá condujo a la Orden a su perdición... Otros, por el contrario, creerán hallarse ante una vulgar trama o impostura...

En cualquier caso, nosotros como estudiosos hemos procurado elaborar un análisis lo más riguroso posible, alejado de ideas preconcebidas, de apasionamientos y de intereses creados...; fieles, en la medida de nuestras posibilidades y conocimientos, a la Historia veraz y a la Tradición, dejando en el aire las dudas existentes en torno a la legitimidad e interpretación doctrinal de los diferentes documentos estudiados.

En Internet es la primera vez que se publican los Estatutos de Roncelinus, y si claramente podemos afirmar, sin pecar de inmodestia, que el presente trabajo de investigación es de lo más completo que se ha difundido hasta la fecha, también debemos aclarar que, deliberadamente se han omitido, o mejor se han dejado en el tintero, determinadas cuestiones que en su momento servirán para que se pueda seguir profundizando en la comprensión de ese enigma histórico que es el Temple.

El monográfico lo componen los siguientes capítulos:

I- RONCELIN VERSUS RUNCIMAN: EL SECRETO ULTERIOR DEL TEMPLE 
Por Fernando Arroyo

A raíz de la muerte en el mes de noviembre de 2000 del insigne historiador medievalista británico Sir Steven Runciman, una serie de datos salen a la luz para dejar al descubierto una oscura trama silenciada durante varios años. De confirmarse la hipótesis que aquí se desarrolla, no sólo habría de reescribirse la historia más oficialista de la Orden del Temple, sino también una parte de la propia historia medieval. Lo que antes eran rumores producidos por ciertas filtraciones de las que ya se hizo eco en su momento la prensa del Reino Unido, ahora son algo más que evidencias...

II- MAESTRE RONCELIN DU FOS
Trad. Dr. Carlos Raitzin

Recopilación prolija de datos en torno a la figura de Roncelin du Fos, quien habría de ser Maestre secreto de la Orden del Temple. Particular agradecimiento se le debe al autor francés Jean-Luc Alias, editor de la revista Templarium (www.multimania.com/cehpot)

III- LOS ESTATUTOS SECRETOS DE RONCELINUS Trad. Dr. Carlos Raitzin

Traducción de la copia en francés de los Estatutos procedentes de la biblioteca del Conde Menno van Limburg-Stirum, Caballero Templario del más alto Grado de la filiación alemana de Von Hund.

IV- EN TORNO AL ESOTERISMO TEMPLARIO Por Dr. Carlos Raitzin

Artículo en el que se ahonda en varios de los aspectos más relevantes y a la par desconocidos del esoterismo templario, permitiéndonos una aproximación al conocimiento de la filiación templaria laica de los Fedeli d´Amore y de su principal figura: Dante Alighieri. Se realiza también un análisis de la documentada obra del Dr. Hans Prutz "Geheimlehre und Geheimstatuten des Tempelherrenordens", relacionada directamente con los Estatutos Secretos o "Libro del Bautismo de Fuego", y de otras cuestiones relacionadas con el esoterismo templario.

I RONCELIN VERSUS RUNCIMAN

EL SECRETO ULTERIOR DEL TEMPLE
Fernando Arroyo

James Cochran Stevenson Runciman, más conocido como Sir Steven Runciman, nació el 7 de julio de 1903 en Northumberland, Inglaterra, y falleció el 1 de noviembre de 2000 a los 97 años de edad, siendo enterrado cerca de Lockerbie, Escocia.

Sir Steven Runciman fue uno de los más prestigiosos medievalistas británicos, presidente de la Society for the Promotion of Byzantine Studies desde el año de su fundación en 1983, y profesor de Arte e Historia de Bizancio en Estambul, Turquía.

Uno de los mayores expertos del mundo en la historia del Imperio Bizantino y de las Cruzadas, entre sus obras más destacables con relación a ambos temas cabe citar los tres volúmenes escritos entre 1951 y 1954 de "A History of the Crusades" y "The Fall of Constantinople, 1453", ambas publicadas por la Cambridge University Press.

Segundo hijo del primer Vizconde de Doxford, Walter Runciman, descendiente del pintor escocés de mediados del siglo XVIII Alexander Runciman, Sir Steven, gran viajero que llegó a residir y trabajar en ciudades como Atenas, Sofía, El Cairo, Jerusalén o Estambul, y que incluso llegó a convertirse en Derviche honorario en Siria, siempre supo que sus raíces estaban en las brumosas tierras de Escocia, donde se estableció definitivamente en 1966.

Parece ser que un año después, en enero de 1967, Runciman habría recibido el encargo de encabezar un equipo multidisciplinar que llevase a cabo una investigación exhaustiva sobre “El Libro del Bautismo de Fuego” o “Estatutos secretos dictados para los hermanos por Roncelinus” (conocidos como la “Regla Secreta del Temple”), que fueron descubiertos en 1794, entre los fondos de la Biblioteca Corsino de los Archivos Vaticanos, por el obispo de Copenhague Friedrich Münter.

A pesar de no ser uno de los grandes expertos en templarismo, o cuando menos no formar parte de esa “nómina” de historiadores especialmente interesados en el tema, seguramente Runciman fue elegido para coordinar esta investigación precisamente por eso: por su independencia, por su relativo “desapasionamiento” hacia la historia templaria como fenómeno de trascendental relevancia por sí mismo, amén de por su probada solvencia como investigador y su reputadísima rigurosidad académica. El documento a investigar fue redactado a finales del siglo XIII por un tal Roncelinus (nombre asociado a Roncelin de Fos), personaje un tanto “evanescente” como muy acertadamente lo califica el historiador y documentalista español Justo A. Navarro, cuyo único dato documentado por él conocido “es el que le menciona como Maestre de la Comandancia (término más ajustado que encomienda) de Tortosa, en Siria, el 17 de junio de 1242, en la que se le cita como parte presente en una concordia arbitral entre el Temple y el Hospital, aunque el Libro de Artefeuil (tomo III, pág. 250), dice que fue recibido en la Orden en 1267 por el caballero Jean de Pellissier. También se le supone "desaparecido" hacia 1280-1290, en la Casa del Temple de Santa Eulalia de Cernon, es decir sobrepasados los 75 años de edad si es que es cierto que nació hacia 1205 en Bormes-les-Mimosas”.

Según el investigador francés Patrick E. Braccó, para más señas miembro de la Ordo Supremus Militaris Templi Hierosolymitani (OSMTH), los Estatutos de Roncelinus "están teñidos de catarismo y de paganismo, y en ellos vuelven a encontrarse indicaciones que demostrarían que los templarios habrían tenido una gnosis secreta". Por su parte, el escritor e investigador soriano Ángel Almazán, en su artículo “De Numancia a Montsegur” (Revista de Soria, nº 6, Otoño de 1994), nos dice en referencia a los Estatutos: “Allí se habla de la alquimia y de Abraxas, un eón gnóstico que reaparece en nuestro siglo en la novela "Demian" de Hermann Hesse y, poco antes, en los "Siete Sermones a los Muertos" escrito por Carl Gustav Jung, el último de los grandes gnósticos”. Y añade: “En los Archivos Nacionales franceses se encuentra guardado un sello del Temple requisado al ser abolida la Orden. Se halla colocado en una carta escrita por Andrés de Coulours, preceptor del Temple y residente en la encomienda de Coulours, en el bosque de Othe. El sello tiene unas palabras: "Secretum Templi". En el centro hay un extraño personaje con pies que parecen cabezas de serpiente, siendo la suya similar a la de un gallo visto de perfil. Esta figura era muy usual, a principios de la era cristiana, entre los gnósticos en unos talismanes llamados "abraxas". También se perciben en este sello diversas runas”. Con respecto a este último apunte, conviene señalar que el Dr. Raitzin indicó en su momento algo que en verdad resulta evidente, esto es que tales signos interpretados como runas son en realidad letras griegas. Y si bien esto es indiscutible, también lo son las posteriores puntualizaciones hechas al respecto por el propio Almazán: que el griego primitivo deriva del fenicio, y éste, efectivamente, contiene signos que son muy similares a las runas.

Por otra parte, existen otros documentos templarios reservados para una jerarquía iniciática que avalan dicho esoterismo, como los estudiados por Gérard Sebanesco, según Serge Hutin: "On devait découvrir au XVII siècle en Allemagne deux documents remontant au Moyen Age, qui se révélèrent être bel et bien deux règles secrètes complétant, pour les seuls Chevaliers qui atteignaient le vrai Cercle Intérieur de l´Ordre, la Règle ecclésiastique courante: ces documents trouvés à Hambourg sont la `Regle des Frères Elus´ et la `Règle des Frères Consolés´" (*)

Volviendo a la cuestión que nos ocupa, parece ser que la financiación del estudio de 1967 corrió a cargo de dos órdenes neo templarias (en un principio se pensó que una de ellas era la liderada por el conde italiano Rocco Zingaro di San Ferdinando, cosa que parece descartable por el año del encargo), sabiéndose de las buenas relaciones que una de ellas mantenía con ¡el Vaticano!. Precisamente, esta aparente incongruencia es la que nos hizo pensar en el grupo de San Ferdinando, pues resulta de dominio público que en la década de los noventa la Orden del Temple, supuestamente representada por el conde italiano, fue “simbólicamente perdonada” por el Patriarca latino de Jerusalén Monseñor Michel Shabbah, en una ceremonia revestida de gran boato y emotividad. Este dato, aunque cierto, no significa que el “Temple de San Ferdinando” lograse, como es de suponer, el mismo gesto por parte del Papa. Hay fuentes solventes que señalan que la investigación referida no habría sido financiada por el Vaticano, sino por seglares adscritos a diversas corrientes de investigación templaria. De cualquier forma, todo hace pensar, y así lo señalan evidencias notorias, que una de las organizaciones neo templarias que habría encargado el estudio de los Estatutos fue la Nueva Observancia Templaria. Esta orden, que nada tiene que ver con la Estricta Observancia Templaria de Von Hund, se fundó en el año 1963 (sospechosamente sólo cuatro años antes del “Caso Runciman”), lo que nos induce a pensar si su propia creación no sería una especie de “tapadera” auspiciada por alguna de esas manos invisibles vaticanas (probablemente jesuíticas) que sirven para mover ciertos hilos en los asuntos “delicados”... Sea como fuere, y según testimonio de los propios dirigentes de esta orden, mantienen buenas relaciones con el Vaticano.

La Nueva Observancia Templaria tiene su sede en Francia, concretamente se sabe que en 1998 tenía una dirección postal en Saint-Laurent-du-Var.

A pesar de la supuesta buena relación entre ambas instituciones (que sepamos no corroborada por ninguna instancia eclesiástica), no deja de resultar curiosa y significativa la participación de grupos neo templarios en una investigación de las características que nos ocupa, por cuanto la misma se encargó sobre los Estatutos que obran en poder del Vaticano, lo que hace pensar si la propia Santa Sede no estuviese detrás del asunto. De ser así, ya se plantea un primer interrogante con relación a un hecho sumamente extraño: ¿qué papel jugarían dos órdenes neo templarias en una investigación vaticana?...

En el curso de las investigaciones históricas (el análisis del documento pronto arrojó el resultado de ser auténtico), se habría encontrado una carta no criptografiada y fechada en 1266, en la que el gran Maestre oficial de la Orden, a la sazón Thomas Bérard (Amaury de la Roche según algunos historiadores) se dirigía a un tal Roncelin de Fos como “VENERABLE MAESTRE ULTERIOR Y SUPREMO”

"Ulterior” significa literalmente “que está más allá”, y “supremo” está claro lo que significa, por lo que debemos concluir que resulta ésta una extraña forma de dirigirse al Maestre de una Comandancia por parte del Maestre de la Orden...

Ya en el hecho de que los historiadores no se pongan de acuerdo en a quién correspondió el maestrazgo (Bérard o De la Roche) en la época en que está fechada la carta, y las propias dudas existentes sobre la verdadera identidad de Roncelin, hacen que el enigma en torno al asunto se acreciente.

La carta en cuestión informa de la caída de Saphet y la muerte de todos los hermanos que defendían la fortaleza, y dado su carácter de simple parte de guerra, carente de informaciones confidenciales o connotaciones comprometedoras (salvo el extraño tratamiento que recibe Roncelin de Fos por parte del Maestre oficial de la Orden), es por lo que tal vez se cometió el desliz de no haber sido encriptada.

Saphet se encuentra al norte del mar de Galilea. Fue destruida en 1219 y reconstruida bajo el Maestrazgo de Armand de Pèrigord con el apoyo de Benedicto, obispo de Marsella. En 1266 fue arrebatada a la Orden por el sultán mameluco Baybars, quien hizo matar a todos los defensores; hechos que, de forma apesadumbrada, se relatan en la misiva que nos ocupa. También cabe pensar, ¿por qué no?, que este estado de profundo abatimiento del Maestre de la Orden le hiciese cometer la torpeza de no criptografiar una carta que debiera haber permanecido por siempre oculta a ojos de los profanos... ¿Qué culpas remorderían la conciencia de quien, teniendo tanto que perder, perdió hasta la discreción debida (o “de vida”)?... Esta pregunta se la hace el que suscribe, a tenor de los términos en que se expresa el afligido Maestre, pero otros interrogantes, seguramente menos subjetivos, se desprenden de todo esto:
- ¿Fueron deslices como el referido (no encriptar ciertas misivas) la verdadera causa de la caída de la Orden?
- ¿Apareció también esta carta manuscrita (y puede que otras que compondrían eso que se ha dado en llamar "Le Cartulaire Secret", así como los propios Estatutos de Roncelinus) en los Archivos Vaticanos, como parte del material incautado durante el proceso inquisitorial?

Ciertamente, resulta difícil concebir que semejante error se produjese, y más complicado aún resulta entender que las implicaciones que se derivan de la carta secreta entren en contradicción con la propia Regla Secreta del Temple como se ha llegado a sostener, pues, efectivamente, los Estatutos en su artículo XX dicen:
“Está rigurosamente prohibido de elegir como Gran Maestre a un Consolado. Los otros puestos y cargos principales de la Orden están reservados a los Elegidos y a los Consolados”.

Sin embargo, resulta evidente que tal contradicción no existe, pues si bien la Regla indica claramente que está prohibido elegir como Gran Maestre a un Consolado (el Consolado es aquel que “está liberado del yugo que los hijos de Babilonia han establecido sobre la base de los falsos dogmas”... Art. VI), no parece indicar, de forma explícita ni implícita, que no pueda ser un Elegido (miembros del círculo interior). De hecho, conviene recordar que en las mazmorras de la torre de Chinón, donde estuvieron apresados los altos cargos de la Orden del Temple, entre ellos el Maestre Jacques de Molay, se hallaron graffitis grabados por la propia cúpula templaria en las paredes de las celdas. Estos graffitis están plenos de un inequívoco simbolismo esotérico, hasta el punto de que su significado oculto trató de ser dilucidado por el alquimista Eugène Canseliet, discípulo de Fulcanelli (si no el propio Fulcanelli en persona). Esto evidencia que, efectivamente, los máximos dignatarios de la Orden tenían pleno conocimiento del saber trascendente y esotérico templario, lo cual no significa que tuviesen que ocupar rangos equivalentes dentro las diferentes estructuras orgánicas de la Orden. Concebir esto así, resulta mucho más lógico y admisible que no la hipótesis de un círculo interior funcionando en secreto y a espaldas de la jefatura exotérica u oficial, aunque sí del resto de la estructura mayoritaria (eminentemente la militar) de la Orden.

Independientemente de las prudenciales dudas sobre la veracidad o exactitud que la información aquí expuesta plantea, más que contradicciones lo que genera son nuevos interrogantes que ahondan aún más en las ya de por sí enormes incógnitas existentes en torno al misterio templario.

Ya en su momento se produjeron filtraciones desde la liga Anglo-Helénica que el mismo Runciman presidiera. En concreto un miembro de esta liga, amigo y estrecho colaborador de Sir Steven, que había tomado parte en el equipo de investigación de 1967, hizo algunos comentarios imprudentes en una de las reuniones que se llevaron a cabo en la torre fronteriza de Elshieshields, en Dumfrieshire, Escocia. Los comentarios hacían referencia a un acta notarial firmada por los cinco integrantes del grupo, comprometiéndose a no difundir públicamente los resultados de la investigación. El informe final debía ser entregado directamente a los representantes neo templarios que promovieron la operación, los cuales se habrían garantizado la fidelidad pagando cuantiosos honorarios.

Ahora, muerto Runciman, el tema parece aflorar y los cabos sueltos son demasiados como para desdeñarlos sin más. Tan sólo, y en ello se encuentran actualmente varios investigadores, resulta preceptivo: primero, hallar esos cabos sueltos; y segundo, atarlos. Las pistas son claras y notorias, aunque hasta el momento esquivas:
- El acta notarial firmada por el equipo de Runciman. Ella demostraría fehacientemente que el estudio se llevó a cabo y, lo que es más importante, evidenciaría el compromiso de no difundir los resultados públicamente.
- La carta manuscrita enviada por el Maestre del Temple a Roncelin de Fos en 1266. De demostrarse su existencia y autenticidad el secreto ulterior del Temple quedaría al descubierto, con lo que habría que reescribir no sólo la historia de la Orden, sino parte de la propia historia medieval...
- Los cuatro integrantes restantes del equipo de investigación de Runciman, incluido el filtrador de la información, pues aunque resulta improbable, tal vez alguno de ellos aún viva. Cabe pensar que todos, o cuando menos la mayoría, fuesen integrantes de la liga Anglo-Helénica.
- Las órdenes neo templarias que financiaron el proyecto. Descartada la liderada por San Ferdinando, todas las evidencias apuntan hacia un grupo que mantiene presumibles buenas relaciones con el Vaticano, en este caso reconocidas por los propios dirigentes de la orden, y su más que sospechosa fundación cuatro años antes del “Caso Runciman”: la Nueva Observancia Templaria. La otra orden, o bien es inexistente (una mera puesta en escena para el despiste) o, por el contrario, habría sido la verdadera impulsora de la investigación, valiéndose para ello de las supuestas buenas relaciones referidas para acceder a ciertos archivos vaticanos.
- El informe Runciman. El resultado del estudio encargado se plasmó en un informe, cuyo original se habría entregado a quienes lo pagaron: las órdenes neotemplarias... Esperemos que, en última instancia, realmente no fuese la propia Sede Pontificia, o la Societas Iesus...

Dado que está totalmente descartado que la copia estudiada de los Estatutos de Roncelin en 1967 fuese la que se conserva en Hamburgo, los responsables de la Biblioteca Corsino de Roma tendrían que ser la fuente primaria a la que acudir en busca de pistas, debiendo ser conscientes, eso sí, de que “con la Iglesia hemos topado”... Afortunadamente, lo que no parece probable es que el honorable e insigne Runciman haya conseguido llevarse su secreto, el secreto ulterior del Temple, a la tumba...

(*) Se deberían descubrir en el siglo XVII en Alemania dos documentos que se remontaban a la Edad Media, que demostraban ser de hecho dos reglas secretas suplementarias, redactadas solo para los Caballeros que alcanzaron el verdadero Círculo Interior de la Orden, y que suplementaban la regla eclesiástica corriente: estos documentos encontrados en Hamburgo son los "La Regla de los hermanos Elegidos" y la "Regla de los hermanos Consolados"

ARMAS DE RONCELIN DU FOS

II

MAESTRE RONCELIN DU FOS
Dr. Carlos Raitzin

Con alta probabilidad Maestre Roncelin nació en Marsella donde residía su padre Roger du Fos. Era vástago de una poderosa familia, la de los señores de Fos, con fama de belicosos, rebeldes y renuentes a todo vasallaje, amos del pequeño puerto de Fos-sur-Mer. A la muerte de su tío Bertrand su padre se instaló en Hyéres donde aquel vivía solo. La familia prestaba particular atención al Temple, el que poseía encomiendas en Provence. Su pariente Hugues de Fos había sido Maestre precisamente allí.

Eran los Fos propietarios de tierras al este de la embocadura del Rhône (la mitad oriental de la diócesis de Toulon) y obtenían grandes utilidades de la comercialización de la sal.

Roncelin era el hijo menor y, de acuerdo a las costumbres de la época, estaba destinado al clero. Joven ingresa a la Orden del Temple. Muchos fueron sus viajes y pronto alcanza altas dignidades. Así es que lo encontramos mencionado como Maestre de la casa de Tortose en Siria donde, el 17 de junio de 1242, se halla presente en un arbitraje entre el Temple y el Hospital.

Una tragedia espantosa había ocurrido en la adolescencia de Maestre Roncelin y lo marcó profundamente para toda la vida. En Béziers, no lejos de Fos, 100.000 cátaros habían sido masacrados el 22 de julio de 1209 por el ejército de Simón de Monfort. La orden de este es conocida “Matadlos a todos, Dios reconocerá a los suyos”. El joven vizconde Roncelin contaba a la sazón unos quince años y comenzó a detestar a la tan intolerante iglesia católica por esta carnicería. Esto lo motiva para ayudar a los cátaros en carácter de vasallo del rey de Aragón en la batalla de Muret en 1213. Sin duda este espíritu belicoso y anti eclesiástico era el signo de su familia que no se sometía a nadie y que, cuando no había enemigo a la vista, luchaban entre ellos.

Roncelin nació y vivió en el medio de los Templarios pero paralelamente a su labor en la estructura visible de la Orden participó en en el trabajo del Templi Secretum. Nos ilustran al respecto los interrogatorios a los Caballeros durante el infame proceso, interrogatorios llevados a cabo por gente hábil y astuta, interesada en descubrir que ideas circulaban en el Temple. Pues la cuestión residía en saber si los Caballeros habían adoptado el gnosticismo, maniqueísmo o el catarismo y el grado de su adhesión a doctrinas dualistas sostenedoras de la existencia de dos divinidades: el Bien y el Mal. Incluso preocupaba la cuestión de si se habían convertido al Islam. Pero, por sobre todo y lo primero en importancia, era establecer si los Templarios consideraban a Jesús como un falso profeta, como un criminal común crucificado por sus delitos. Si esto era así los Templarios estaban crucificando a Jesucristo por segunda vez como declaró absurdamente el rey Philippe le Bel.

Los Inquisidores conocían muy bien este enigma. Cien años antes algunos cátaros conocidos como los Perfectos ya sabían de esta versión de Jesucristo. Todo esto era conocido por los altos dignatarios de la Iglesia y guardado celosamente en los archivos vaticanos. Quienes quisieron difundirla, cátaros y judíos entre otros, fueron perseguidos y muchas veces exterminados y sus documentos destruidos. Pero, antes de su destrucción, los cátaros informaron al Temple, el que debió padecer a su turno tortura y muerte. Durante los interrogatorios en el proceso al Temple algunos prisioneros evidenciaron que poseían conocimiento al respecto. El problema es sin duda el detectar sus fuentes de información ya esta proviniera de manuscritos hallados en Tierra Santa, ya fuera comunicación de sabios Iniciados árabes o cabalistas judíos o bien que proviniera de los Perfectos cátaros. El hecho reside que el Jesús histórico difiere considerablemente de la leyenda que la Iglesia Católica impone a sus fieles. Lo más probable es que tales secretos fueran perfectamente conocidos por los Maestros de la Orden Secreta (Templi Secretum) en los más altos niveles de la Orden. Que tal organización oculta existía no cabe la menor duda. Poseemos testimonios de antaño al respecto. En Inglaterra durante el proceso a la Orden, los Caballeros William of Poklington, Stephen of Stapplebrugge y John Stoke declararon paladinamente: "En el Temple hay dos clase de recepción. La primera supone el ingreso a la Orden y transcurre sin nada especial en las ceremonias. La segunda tiene lugar años más tarde, a veces muchos. Está reservada a unos pocos y es muy secreta". "Todo esto era y sigue siendo rigurosamente exacto. Uno de los dignatarios de la Orden, Geoffrey de Gonneville, Gran Preceptor de Aquitania y Poitou, declaró en el proceso: "Muchos suponen sin saber que las ceremonias secretas son algo malo y contrario a Dios, introducido por el Maestre Ronscelin du Fos. El hizo modificaciones en los Estatutos de la Orden", aclarando acto seguido que todo cuanto se hacía era bueno, noble y reservado a las almas más puras, lo que también es absolutamente exacto. En la Orden primitiva, sin embargo, el Gran Maestre no podía acceder a los niveles y Grados más altos pues él debía ser ante todo un guerrero y no un esoterista. Vemos que el Temple no era ni es lo que suponen muchos imbéciles confundidos que se dicen templarios y que reducen su vida espiritual a misa y comunión todos los domingos.

Precisamente fue al parecer Roncelin du Fos quien introdujo la denegación de Jesús como Profeta. Mucho sabía él de la verdadera historia de los orígenes del cristianismo. Su tesis era la negación de la divinidad de Jesús y un retorno al Dios Único común a cristianos, judíos y musulmanes. Así surge dentro del Temple una estructura o jerarquía oculta cuyos miembros no eran conocidos por la mayoría de los Hermanos. Hay quienes sostienen que de ahí surgió el uso de rechazar la cruz. Quienes se negaban a hacerlo eran enviados a luchar y morir en Tierra Santa, los que acataban permanecían en Europa a fín de ser gradualmente introducidos en los conocimientos esotéricos. El objetivo último era el ideal sinárquico de conquistar el mundo entero para el nuevo ideal. Al saberse esto por infidencia de algún Caballero constituyó un nuevo y poderoso motivo para que Philippe le Bel y su aliado Clemente V quisieran destruir la Orden del Temple. Pero había otros rencores y otras causas, entre ellos la cuantiosa deuda del rey con el tesoro de la Orden. Y así naufragó el proyecto que hubiera conducido a una Europa unida y a una religión común para todos.

Pasemos a la época en que Roncelin du Fos se desempeñó como Maestre de la Orden en Provence de 1248 a 1250. Durante este período el debió manejar muchos asuntos, especialmente cuando fue enviado a España por Guillaume de Sonnac en remplazo de Fr+ Pelage enviado a Damieta.

Se afirma que en Mallorca él asistió a la ruptura de Provence con Aragón y que se alió con Guillaume de Sonnac.

De 1252 a 1256, como Maestre de Inglaterra debió resolver diferentes litigios en ese país. De retorno en Francia y de nuevo Maestre de las casas en Provence de 1260 a 1278, llevó a cabo su tarea con eficacia acordando derechos en diversas comunas de Occitania, recibiendo muchos legados para la Orden y atrayendo a esta muchos nuevos Hermanos Caballeros.

En 1272 logra persuadir u obligar al obispo de Avignon, donde Maestre Roncelin residía habitualmente entonces, a construir la capilla de la casa del Temple en esa ciudad. Muchos manuscritos citan su presencia para esa época en multitud de lugares: en Inglaterra, en España, en Tierra Santa y en las ciudades siguientes: Port-SainteMarie (Le); Marestaing; Larramet; Martel; Carnac; Loupiac; La Selve; La Clau; Carcassès; Jalez; Puy-en-Velay; Arles; Fos; Valence; Lus; Toulouse; Tortose (Terre Sainte) ; Orange; Saint-Gilles; Richerenches; Montpellier; Roaix; San Juan deAcre (Tierra Santa); Lacapelle-Livron; Drulhe; Avignon; Vaour; Montricoux; La Ville-Dieu-duTemple; Gap et Embrun; Marseille; Sainte-Eulalie-de-Cernon. Estos múltiples viajes nos hablan de la importancia y rango que había alcanzado Maestre Roncelin dentro de la Orden del Temple.

Es interesante señalar que existe un manuscrito sobre la genealogía de los Señores de Fos en el que se menciona que Roncelin de Fos desposó a Mabile d’Agoult. Esto fue sin duda una contravención a la Regla del Temple. De ese matrimonio nacieron cuatro hijos: Rogeiret, Rossolin, Rossolinette y Consoline.

En 1278 hallamos a Roncelin en la casa de Sainte-Eulalie de Cernon. Es muy probablemente en esta comandería de Larzac, país de su gran antepasado Arnaud de Bedos, que Maestre Roncelin falleció cuando tenía alrededor de ochenta años de edad. Y se llevó con él secretos no develados.

Las dos funciones de Roncelin de Fos, alto dignatario de la Orden del Temple y Maestre de la Orden Secreta nos recuerdan a las dos caras del Baphomet. Y cabe preguntarse respecto de la relación de este último con la “ciudad de los sacerdotes druidas” o Bethphagé, mencionada en la carta no. XII de San Bernardo de Clairvaux a Hugues de Payns. Esto tiene relación con el Bautismo del que se denomina Hombre Primordial entre los celtas, lo que corresponde a quien no ha iniciado un camino iniciático. Y es tradición de que San Bernardo fue iniciado en su juventud por los druidas, iniciación que a su vez transmitió a los Caballeros fundadores del Temple.

En 1240 el copista Robert de Samfort, Procurador del Temple en Inglaterra, redacta sobre pergamino una parte de la famosa regla secreta de la Orden, si bien hay autores que afirman que la primera parte fue escrita por Mathieu de Tramlay.

Hacia fines del siglo XVIII, Münther, obispo de Copenhague, descubrió en los archivos del Vaticano el manuscrito en cuestión conteniendo los estatutos secretos del Temple. Existen al parecer dos copias, una en el Vaticano y otra en Hamburgo.

SELLO DE RONCELIN DU FOS

Utilizado en el sur de Francia en la segunda mitad del siglo XIII el Agnus Dei, sello de Roncelin du Fos, a la sazón Maestre del Temple en Provence. El asta sostenida por el cordero lleva la cruz paté. (Archivos departamentales de Bouches du Rhône, Marsella).

EN TORNO AL ESOTERISMO TEMPLARIO
Fr+ Carlos Raitzin

1- INTRODUCCION

El presente artículo se ocupa de diversos puntos del esoterismo templario con referencia especial a los Estatutos Secretos de la Orden del Temple o "Libro del Bautismo de Fuego". La autenticidad de este documento no es cosa unánimemente aceptada ni mucho menos. En definitiva, que la cuestión es comprender de donde sale cada cosa en esos Estatutos y que quiere realmente decir. Logrado esto la autenticidad surge como muy evidente. Es lo que intentaremos al menos esbozar aquí.

Un estudio serio y coherente del esoterismo templario exige para ser fructífero amplitud de criterio y diversidad de líneas de avance. De no encararse de este modo nos encontraremos inevitablemente con callejones sin salida y preguntas sin respuesta. Tales situaciones frecuentes han dado lugar muchas veces en el pasado a soluciones de tipo conjetural que tienen excusa pues la complejidad del problema del esoterismo templario es muy grande. Remitimos a nuestros trabajos en este sitio web "La Orden del Temple ayer y hoy" y "Dante Alighieri y la filiación templaria de los Fedeli d'Amore" para evitar en lo posible innecesarias duplicaciones al respecto.

Es indudable que en el Temple dejaron su huella multitud de corrientes espirituales de las más diversas: druidas, cátaros, drusos, alquimistas, iniciados del Islam, cabalistas, gnósticos y masones. Esto para no mencionar sino a lo más evidente pero, desde luego, tal diversidad de contenidos complica y mucho el hallar un hilo conductor. Es común la idea de que en la Orden existía un sincretismo que acumulaba ideas muy heterogéneas que se iban incorporando al Temple por los más distintos caminos. Pero la realidad es que, como destaca Guénon, los antiguos iniciados sabían apreciar muy bien la unidad doctrinal subyacente tras una aparente diversidad de formas externas. Es por ello que por ejemplo Dante emplea un lenguaje a menudo tomado del cristianismo y otras veces de la antigüedad greco-romana y no hace esto llevado por un sincretismo superficial. De hecho, y como señala Guénon, "la metafísica pura no es ni pagana ni cristiana, es universal. Los misterios antiguos no eran paganismo pero se superponían a este". Es necesario comprender, y esto es lo que le cuesta mucho a algunos, que la vía iniciática se halla por arriba de toda forma religiosa exotérica. Esto es lo que le permite desarrollarse adoptando como ropaje exterior cualquiera de esas formas o ninguna.

Mencionaremos a continuación las líneas de estudio que aquí trataremos brevemente y a las que cabe calificar de no convencionales. Todas ellas prometen aportes de mucho interés y nada impide volver en el futuro sobre este tema para darles el desarrollo más extenso y cuidadoso que merecen. De hecho nos hallamos ante una verdadera labor detectivesca donde habrá que rescatar piezas de evidencia casi siempre de manera muy indirecta, buscando indicios significativos y destacando paralelismos o analogías evidentes entre líneas iniciáticas tradicionales en apariencia muy distantes tanto en el tiempo como en el espacio. Este hecho ya ha sido subrayado múltiples veces por Guénon y sus continuadores y permite, una vez más, poner de manifiesto la unidad esencial subyacente en todas las formas tradicionales auténticas.

En primer lugar tenemos a los Fedelli d'Amore, filiación laica del Temple que ha merecido extensos estudios de muy distinguidos especialistas tales como René Guénon, Luigi Valli, A. Ricolfi, Arturo Reghini, Aroux, Rossetti y otros. Esta parece ser una de las vías más promisorias de estudio y coloca a Dante Alighieri como figura clave en el centro mismo del problema. Y ahí viene en nuestra ayuda la obra colosal del erudito español Miguel Asín Palacios "La Escatología Musulmana en la Divina Comedia" reeditada por Hiperión, Madrid, 1984. De interés puede resultar también el pequeño libro de R. H. Shamsuddín Elía "Dante y el Islam", Buenos Aires, 1998. Una de las claves principales la proporciona el mismo Dante cuando recoge ideas de fuentes iniciáticas islámicas aún cuando se cuida muy bien de mencionar explícitamente esas fuentes. Cosa que sorprende pues no menciona nunca ni al Profeta Mahoma ni al célebre Iniciado español murciano Mohyiddin ibn'Arabi (el más grande de los Maestros espirituales del Islam y de quien Dante mucho toma) pero no tiene en cambio reparos en citar a Avicena y a Averroes.

Por último debemos mencionar, ya en relación directa con los Estatutos Secretos o "Libro del Bautismo de Fuego" a la documentada obra del Dr. Hans Prutz "Geheimlehre und Geheimstatuten des Tempelherrenordens". Sin embargo esta peca de cierta rigidez, siendo una típica producción de un Gelehrte que lo desconoce todo o casi respecto de la Tradición Esotérica. Esto hace que, al aferrarse únicamente a las pocas pruebas asibles y tangibles sobre la tradición interna del Temple de que él disponía, llegue este autor a conclusiones puramente negativas sobre la autenticidad del texto que nos ocupa. Ejemplo de esto que decimos es que prácticamente niega la existencia histórica del Maestre Roncelin de Fos por no disponer él de mayores datos al respecto. Pero Prutz acepta en su totalidad las actas del proceso como algo fidedigno y de ahi concluye, a nuestro juicio inválidamente, la no autenticidad del "Libro del Bautismo de Fuego".

La obra de Prutz contiene sin embargo datos del más alto interés en cuanto que el Estatuto Secreto que nos ocupa existía sin duda alguna. Todo se reduce a establecer si el conocido y reproducido aquí es el auténtico. Prutz presenta una serie de evidencias al respecto de tal existencia. De particular importancia es la cita de Michelet concerniente al testimonio del Caballero Gervais de Beauvais quien afirmó haber visto en poder de uno de los superiores de la Orden junto a los estatutos comunes y conocidos de 1128 otro libro con estatutos que este mantenía muy oculto y del que afirmó que "por ningún precio se lo enseñaría a nadie". También cita Michelet (vide Prutz, loc. cit.) al Caballero Bertrand de Marignac quien se sentía obligado "post multas promissiones de statutis et secretis ordinis observandis ab eo factas". El Gran Maestre Templario Thomas Berard (o Berault) ( su desempeño fué en los años 1256-73 según fuentes de la Orden del Temple de Jerusalén, según Prutz en 1265-72) mandó quemar muchas copias de los Estatutos Secretos, manteniendo unas pocas en manos de los más leales y encumbrados Caballeros del Temple.

2- DANTE Y EL ESOTERISMO TEMPLARIO

De la filiación templaria laica de los Fedeli d'Amore nos hemos ocupado extensamente en otro artículo que figura en este sitio web y no repetiremos sino en mínima medida lo dicho allí. La clave es ahora Dante Alighieri, figura principalísimo de los Fedeli d'Amore, tanto con sus palabras como con sus silencios y de eso pasaremos a ocuparnos. Como bien dice Georg Rabuse en su libro "Der kosmiche Aufbau des Jenseitsreiche Dantes": "La Divina Comedia más de seiscientos años después de la muerte de Dante es un libro cerrado con siete sellos". De la fidelidad al Temple de Dante no cabe duda razonable alguna. Es San Bernardo mismo a quien él elige para que lo guie en la última etapa de su ascenso a Dios. Es a París a donde Dante corre cuando se inicia el inicuo juicio a los Hermanos Caballeros.

Una cuestión largamente debatida es el significado simbólico del VELTRO (lebrel) mencionado por Dante. René Guénon analiza este problema en su libro "L'ésoterisme de Dante". Pero en suma lo reduce a juegos verbales que toma de otros autores sin aportar una solución definitiva a este problema. Mucho más convincente nos resulta el aporte de Giovanni Papini quien identifica el VELTRO con el "VangELo eTeRnO" (Evangelio Eterno) mencionado también en "El Libro del Bautismo de Fuego" o Estatutos Secretos del Temple (Papini "Dante vivo", Apolo, Barcelona, 1949). En realidad, como el mismo Papini señala, existen centenares de escritos sobre este problema esencial para la comprensión del Dante. Papini estima que puede tratarse de una alusión a las doctrinas de Joaquín de Fiore. Estas doctrinas aludían a la próxima venida del Espíritu Santo y su reinado y eran conocidas en tiempos de Dante precisamente con el nombre de VANGELO ETERNO. Esto culminaría con la más completa reforma de la corrupta Iglesia Católica. Dante sentía gran admiración por de Fiore y lo coloca en el Paraíso en la Divina Comedia a pesar de las distintas condenas eclesiásticas que cayeron sobre sus obras. Es muy recomendable leer el detallado análisis de Papini y comparar sus conclusiones con los puntos de vista sostenidos por los Fedeli d'Amore (vease al respecto en este sitio web nuestro trabajo ya citado). La síntesis final sería la de una muy necesaria reforma completa de la corrupta Iglesia Católica. Esta idea era muy cara a Dante y no cabe negarlo. En Paraiso, XXVII, 22 yy ss., hace exclamar a San Pedro estas palabras que eximen de todo comentario: "Quelli ch'usurpa in terra il luogo mio, il luogo mio, il luogo mio, che vaca nella presenza del Figliuol di Dio, fatt'ha del cimitero mia cloaca dal sangue e della puzza; onde'l perverso che cadde di qua su, là giú si placa".

("Aquél que en tierra me ha usurpado el sitio mío, el sitio mío, el sitio mío, que ahora está vacante en la presencia del divino Hijo, en mi sepulcro ha hecho una cloaca de sangre y pestilencia, en que el perverso que desde aquí cayó se aplaca"). Y esto se sitúa muy cerca de los motivos que impulsaban hacia la universalidad y unidad soñada por los Iniciados Templarios en materia religiosa. Sin embargo las doctrinas de de Fiore solo hacen a la religiosidad exotérica y a lo temporal. No tienen en si nada de iniciáticas y es por ello que cabe perfectamente conjeturar que se trata en realidad de otra doctrina de igual nombre a la que la mencionada le puede servir como velo de ocultamiento. Esta doctrina necesariamente no puede ser otra que la de la Fede Santa o Fedeli d'Amore emanada directamente del Temple. En efecto no se le conocen a Dante otras adhesiones o filiaciones esotéricas que ésta la que, como es sabido, se convirtió en núcleo de la flor y nata tanto de la literatura italiana como de otros campos del pensamiento.

La cuestión ya planteada antes es ardua: ¿Porqué Dante cita una y otra vez al Profeta Mahoma y a los Maestros Espirituales del Islam sin mencionar sus nombres? ¿Qué promesa o juramento iniciático le impedía hacer tal mención de no haber otro motivo? Buena pregunta que sólo podemos intentar responder teniendo en cuenta la pertenencia de Dante a la Fede Santa o Fedeli d'Amore y el muy estrecho paralelismo de usos y la vinculación estrecha de los Caballeros Templarios con algunas agrupaciones del Islam, en especial ejemplo los guerreros santos del Islam haschischin o "asesinos" ismailitas. La similitud entre el Temple y estos últimos va por cierto mucho más allá del blanco y el rojo usados en las vestimentas de ambas Ordenes por Caballeros y Rafiks (equivalente de aquellos entre los haschischin). Lo notable es el paralelismo estructural entre Temple y haschischin que obliga a pensar que Hugues de Payns se inspiró directamente en estos últimos al crear el Temple. El mismo número de grados en las estructuras respectivas acentúan esta similitud. Siguiendo a HammerPurgstall, David Annan (en Norman Mackenzie "Sociedades Secretas", Alianza, Madrid, 1973) y C. E. Nowell (además de un resumen de J.F. Ferro) podemos presentar el siguiente cuadro donde la analogía se hace evidente. Resulta claro que ambas ordenes estuvieron en contacto en Siria antes de 1128.

TEMPLARIOS HASCHISCHIN
Gran Maestre
Sheikh-al-Djebal ("Señor de la Montaña)

Grandes Priores
Day-al-Kebris ("Grandes Emisarios")

Priores
Days, nuncios religiosos y emisarios políticos

Caballeros (militares)
Rafiks ("Compañeros")

Escuderos
Fidayis ("Devotos")

Pajes y criados
Lassiks ("asilados", legos y sirvientes)

Aspirantes
Creyentes (pueblo)

Pero, desde luego, esto corresponde a la estructura externa o formal. Avanzando un paso más tenemos el simbolismo de "los colores de la sangre y la pureza" blanco y rojo. Roja la cruz en el manto blanco en el Temple, blanca la túnica con faja o cinturón y gorro rojos en los haschischin.

Notablemente blanco y rojo son también los colores tanto de "Conduiramour" como de Beatriz, siendo la primera para Parsifal lo que es Beatriz para el Dante. Naturalmente hay que remitir aquí a la obra de Wolfram von Eschenbach... y recordar que la Tradición Iniciática es una y universal. Sin poder extendernos aquí demasiado al respecto diremos que la opinión de los estudiosos del tema es que la doctrina de los más altos iniciados entre los haschischin era que las formas religiosas exteriores carecían en realidad de importancia (vease la obra bien conocida de Probst-Biraben). Desde luego, todos los verdaderos iniciados en todos los tiempos y lugares han sostenido y sostienen exactamente lo mismo. Lo esencial era y es la doctrina esotérica y se podía adoptar una forma religiosa exterior distinta sin variar en absoluto este punto. Incluso reprocharon los haschischin a los Templarios sostener la errónea y perniciosa concepción trinitaria de Dios que alejaba del Dios Uno. En suma, que la clave del VELTRO o VangELo eTeRnO Templario hay que buscarlo en las doctrinas iniciáticas del Islam y en su conexión con los contenidos velados de la "Divina comedia". Ya lo dice el mismo Dante:
"O voi ch'avete li'ntelleti sani, mirate la dottrina che s'asconde sotto 'l velame de li versi strani".
(Inferno, IX, 61-63).

("Oh, vosotros que tenéis la mente sana, mirad la doctrina que se esconde bajo el velo de los versos extraños").

Y todo indicaría que dentro de la Divina Comedia hay otro texto escondido de acuerdo a cierta clave. La cuestión es hallar esta clave.

Esta línea de pensamiento es la que ha inspirado a Arthur Schult en su obra "Dantes Divina Commedia als Zeugnis der Tempelritter-Esoterik". Este autor se centra en la Divina Comedia y "La Vita Nuova" para hallar claves del esoterismo templario pero su conocimiento de las doctrinas tradicionales es bastante superficial y a menudo resulta declamatorio en sus expresiones. De todos modos aporta más de una idea e información interesante y que vale la pena analizar.

Y de ello surge de inmediato la cuestión de si la alquimia en el Temple designaba en realidad un proceso interior que nada tenía que ver con la transmutación de metales. Tal como están las cosas esto aparece como lo más probable a pesar de las apariencias. En el Abraxas (o Abrax), deidad de origen gnóstico ilustrado más abajo claramente se distinguen las tres letras griegas I,A,O (Omega w). Son las tres letras claves en la disciplina espiritual recibida por von Sebottendorf de los masones turcos. En los Estatutos Secretos que conocemos se mencionan además los talismanes. Cabe bien conjeturar si no serían en realidad gemas del tipo de las gnósticas recordatorias de la disciplina en cuestión.

ABRAXAS ( o ABRAX)

Vale la pena decir algo más al respecto. René Guénon en "Aperçus sur l’Ésotérisme chrétien", 1977, p. 65 y 81, menciona repetidamente que Francesco da Barberino en su “Tractatus Amoris” se hizo representar él mismo en actitud de adoración frente a la letra I. No olvidemos que da Barberino fue miembro iniciado de los “Fedeli d’Amore” al igual que Dante, Bocaccio y otros grandes de la época (Véase en el sitio web www.spicasc.net nuestro artículo “Dante Alighieri y la filiación templaria de los Fedeli d’Amore”).

Precisamente es Dante quién menciona en la “Divina Comedia”, Paraíso, XXVI, 133, que la letra I fué el primer nombre de Dios.

“Pria ch’io scendessi all’infernale ambascia,
I s’appellava in terra il Sommo Bene
Onde vien le letizia che mi fascia.”
(“Antes de descender al duro infierno, I se llamaba en tierra el Bien Supremo fuente del éxtasis que me envuelve”)

Siguiendo el punto de vista de Schult que encontramos en Dante estas alusiones a disciplinas espirituales hoy perdidas u olvidadas en Occidente pero que aparecen en la famosa obra de von Sebottendorf (la que puede consultarse en este sitio web). De destacar esto se ha ocupado Guénon, loc.cit. y remitimos además a nuestro Postfacio a la obra de von Sebottendorf en este sitio web. No nos olvidemos que esta disciplina se refiere directamente a las sílabas místicas intraducibles que aparecen al comienzo de los capítulos del Al-Koran y que fueron transmitidas según la tradición islámica por el Profeta Mahoma a sus seguidores más íntimos y cercanos.

Es difícil creer que esto sea solo una coincidencia o hallar siquiera un conato de explicación diferente al propuesto aquí...y así se aclararía completamente su mención en los Estatutos Secretos. Se trataría con la más alta probabilidad de otra alusión velada, esta vez referente a una disciplina de alquimia interior similar a la que describe von Sebottendorf.

La cuestión ya largamente conocida y discutida de si Dante halló una fuente de inspiración en la escatología musulmana resulta aquí de interés secundario. Es menester remitir al lector que se interese a la obra colosal de Asín Palacios, la que contiene abundante bibliografía. El tema que si nos concierne es todo aquello que hace a contenidos doctrinales velados en las obras dantescas, provengan estos ya del Islam ya de otras fuentes. Y es aquí donde queda la mayor parte de la tarea por realizar, nada simple por cierto. Nos proponemos retornar a este asunto en futuros trabajos.

Este número monográfico del Boletín Temple se publicó el día 3 de enero de 2001 (año Templi 883), lo cual supuso que por primera vez en Internet se difundiese la Regla Secreta del Temple.