viernes, mayo 06, 2022

Los Elementales de la Naturaleza

M. Yeo Wams Om

He aquí un nuevo aporte a las consciencias revolucionarias, quienes pretenden, sin ignorar nuestro entorno “objetivo”, remontarse hacia esas esferas superiores,

en donde se respira otra atmósfera llena de pureza, inocencia, belleza verdadera, lejos de la racionalidad y ceguera intelectual en la que se debate el animal racional con sus incontables males y bienes....

Estos seres que pueblan el COSMOS VITAL (LA CUARTA DIMENSIÓN), son conocidos como SIRENAS, NEREIDAS, TRITONES, GNOMOS, TROLLS, DUENDES, HADAS, SALAMANDRAS, SÍLFIDES, etc.

El que todos vosotros puedan tener esa inquietud de conocer a esos seres de leyenda, es lo que me impulso a ofrecer este pequeño trabajo, para que por lo menos –si fuera el caso- vislumbren esas REALIDADES que PALPITAN en las DIMENSIONES SUPERIORES DE LA NATURALEZA.

Espero que este “librito”, os sirva en ese propósito, y también como un aliciente para buscar esa PERFECCIÓN, viviendo los CINCO VALORES de la TRANSFORMACIÓN ÍNTIMA, en la PRAXIS, no en la teoría. Solamente así podremos acercarnos a esas criaturas que “nos esperan con los brazos abiertos”.
José Luis Rodríguez S. - Oruro, octubre de 1.999

En ese cosmos de la CUARTA DIMENSION es donde encontramos unas existencias maravillosas, formidables, dirán que estamos hablando de cosas increíbles. Todos y cada uno de ustedes, es posible que hayan escuchado el hecho de que existen DUENDES, y si saben algo de minería, saben de la leyenda del Tío, en lugares como Potosí y Oruro. Algunos han leído algunos cuentos infantiles que hablan de los GNOMOS, DE LAS ONDINAS, DE LAS NEREIDAS, DE LAS HADAS, DE LOS PIGMEOS, DE LOS ENANITOS, etc.

Otros han debido leer o escuchar cuentos de los hermanos GRIMM, los que relatan ciertos episodios muy bonitos, muy simbólicos si se quiere, significativos propiamente en los que se dan a conocer las existencias de esas criaturas completamente inocentes y que llegan en sí a conquistar las consciencias infantiles de los niños.

Por algo diría el señor Jesús: “Aquel que no es como un niño inocente, no entrará al reino de los cielos”, ese reino de los cielos, ese Edén, está poblado de criaturas altamente inocentes, puras y virginales, esas criaturas son conocidas en la literatura de los diferentes países bajo diferentes nombres, propiamente esas criaturas son los exponentes o representantes de los elementos que existen en la naturaleza...

Todos ustedes, conocen perfectamente que los elementos fundamentales de la naturaleza son: el aire, el agua, la tierra, y el fuego, pero existe un quinto elemento que es el éter.

Esos cuatro elementos fundamentales enunciados en principio son propiamente de este mundo tridimensional de: largo, ancho y alto. Los cuerpos físicos de estas criaturas INOCENTES que habitan la CUARTA DIMENSION, es decir en el COSMOS VITAL, los elementales o sea esas criaturas que viven en cuerpo de elemental, tienen sus manifestaciones físicas.

Alguna vez, ustedes, han podido escuchar narraciones de algún vecino, o tal vez de sus propios hermanitos o hijos, en el sentido de que vieron ellos como jugaban los niños completamente solos, pero, sin embargo cuando se les preguntaba dónde estuviste o qué estuviste haciendo, los niños respondían que jugaban con sus amiguitos. Esos amiguitos que han sido calificados de imaginarios por los papás, por los médicos y por los estudiosos de las diferentes tendencias psicológicas, no son una fantasía ni ninguna imaginación de los niños, son una terrible realidad.

No narraré lo que dicen los diferentes autores y escritores sobre este tema, voy a relatar algo de mi propia experiencia, de mi propia vida.

Cuando niño, más o menos cinco años, antes de poder dirigirme a la escuela, yo jugaba con unos amigos, pero no eran los amigos del barrio, sino que eran unos amiguitos que venían de por ahí y de por allá, traviesos como yo, sin ningún problema, niños inocentes también, con los cuales hacíamos nuestras travesuras y la pasábamos muy bien y en un momento dado de esos, el menos pensado, ellos sin despedirse siquiera, se perdían. Era el momento en que aparecían la madre o el padre físicos.

Y, ¿Con quién jugabas? ¿Por qué estabas gritando tanto? ¿Por qué gritabas? Yo le decía: Mami, estaba jugando con mis amiguitos. ¿Amiguitos? Ah, sí tus amiguitos, claro...

Posteriormente, otro incidente semejante. Sí, son mis amiguitos que vienen a jugar conmigo, traen una y otra cosa, y me piden y yo les doy, etc. Y les ofrezco esto, y también me dan, y me regalan eso, y me trajeron fruta y cierto néctar, y cierto jugo, en fin. Mmmmmm. ¿Sí?, sí.

Cierta tarde, tuve una experiencia magnífica, un juego maravilloso con esos amiguitos de la cuarta dimensión. Iba corriendo a avisarles a mis papás porque era algo maravilloso, y escuche que comentaban: “Caramba, pobre de nuestro hijo. Tiene mucha imaginación, no se que le está pasando, y sigue con su conversación, y nos anda contando cosas que no corresponden a la realidad, será mejor llevarlo a lo del médico. Tal vez convendría consultar a un psicólogo”.

Hablaban de médico, y yo temía a los médicos porque me recordaba perfectamente de una inyección que colocaban, y que era muy dolorosa. Empezó a afectarme desde niño en ese entonces, y no quería saber nada de médicos. Si les digo a mis papás esto, me van a llevar a lo del médico y otra inyección. ¡No! No les dije ni una palabra, nunca más volví a repetirles nada en torno a mis experiencias un tanto extrañas. Ellos se quedaron contentos y dijeron: “Esta vez nuestro hijo parece que está reaccionando, está recuperándose, ya está sanando, esa fantasía que tenía ya se le está borrando...”.

Sin embargo, yo seguía viviendo el mundo infantil de fantasías..., pero de realidad. Y, es de la misma manera que los niños reaccionan cuando dicen algo a los papás. Y, los padres dicen: “Sí, mi hijito, sí”. Y, otros dicen: “Mira, deja de inventar macanas si no quieres que te castigue”.

Y, la amenaza viene inmediatamente, o a veces el golpe, el latigazo, y se les dice a los niños: “No inventes zonzeras”. Entonces, el niño prefiere callar, y después ante el temor de verse apaleado, callado brutalmente, castigado por el amante papá y por la amante mamá, prefiere incluso ignorar a sus amiguitos de la Cuarta Dimensión, y estos ya no se le presentan al niño, y así pierden realmente una magnífica oportunidad de entrar en contacto con esas grandes criaturas inocentes de la cuarta dimensión.

Esas criaturas que ya tienen su cuerpo físico expuesto a los elementos de la naturaleza. El elemento fuego que ustedes pueden apreciar aquí en las velitas, por ejemplo, es el cuerpo físico de una criatura inocente, cuyo nombre ocultista y plenamente estudiado, es la SALAMANDRA. Y, este nombre se debe precisamente a los grandes sabios ocultistas de la Edad Media, entre los cuales merece destacarse el insigne PARACELSO.

Las Salamandras, son los elementales del FUEGO, y se trasladan de un lugar a otro utilizando precisamente su vehículo de expresión que es el fuego, y cuando este deja de existir, se trasladan por medio del calor. Los días calurosos, los veranos sofocantes por ejemplo, son días en los cuales los elementales del fuego o sea las criaturas ígneas que viven en la cuarta dimensión y que corresponden a este elemento ígneo, realizan grandes excursiones, inmensos viajes de una latitud a otra del globo terráqueo, utilizando las ondas de calor.

Las salamandras, no son criaturas que realmente puedan quemar, lo que quema de esa criatura, es nuestro temor al fuego.

Ustedes han podido ver, tal vez, en televisión o en cine, o leer alguna revista cómo personas bajo ciertos estados muy especiales, psicológicamente predispuesto, logran caminar sin sufrir ninguna quemadura sobre brazas de fuego, sobre carbón al rojo vivo.

¿Quema el fuego? O, ¿Es simplemente una actitud mental?

Los elementales del AGUA, también existen, y son conocidos como NEREIDAS u ONDINAS.

En las Nereidas u Ondinas, existe una magnífica belleza, realmente diríamos que personifican, elementalmente a las futuras mujeres que tendrán cuerpos físicos en este mundo tridimensional, y ahí también encontramos a los TRITONES, que son criaturas inocentes, y que en futuras oportunidades tendrán el cuerpo físico del varón.

Esas criaturas o elementales del agua, tienen una belleza magnífica. Ustedes han podido ver tal vez en algunas revistas, un tanto fantásticas o simplemente historietas, como se les representa a las SIRENAS o a los TRITONES, como mitad peces y mitad humanos, esa es una concepción de mentes, propiamente, muy calenturientas.

Esas criaturas elementales nada tienen que ver, absolutamente con esas formaciones lógicas de mitad pez y mitad humano.

También voy a referirles una pequeña experiencia. Ustedes por lo menos han oído hablar de la ciudad de Potosí, y de que más o menos a unos 25 kilómetros, existen unos balnearios: TARAPAYA, MIRAFLORES. Son bastante conocidos en esa región. Ahí, esa famosa laguna de Tarapaya, pude precisamente conocer por primera vez a una de esas NEREIDAS, u ONDINAS o SIRENAS.

Me encontraba ahí sentado, al pie de un trampolín, junto a la orilla de la laguna y ví que en el centro de la laguna había un movimiento muy singular, pensé que se trataba de un remolino, esa laguna es famosa por sus remolinos. Tomé precaución, y vi que el movimiento no correspondía a un remolino sino a alguien que nadaba velozmente hacia la otra orilla.

Llegó rápidamente a la otra orilla y con un salto propio de delfín, se paró en la orilla, sobre la hierba. Pude apreciar claramente una magnífica deidad, una linda o una mujer inocente, plena y totalmente desnuda, cuyos cabellos le llegaban hasta las piernas, y una piel bellamente azulada. Levantó los brazos como saludando al sol, luego se sacudió tal cual hacen los perritos cuando se les echa agua o les sacan del agua, y después dio un salto e ingreso nuevamente a la laguna, nadó velozmente hacia el centro y se perdió.

Esta vista de la Nereida propiamente, fue comunicada inmediatamente a los amigos que participaban conmigo de ese día de campo; es obvio, me dijeron: “Ah, tus cosas, tus ideas, deja de molestar...”.

Así pues, los elementales del agua, poseen cuerpos materiales, y no son híbridos, no tienen mitad pescado y mitad humano. Son eminentemente humanos, pero en un estado inocente, virginal.

Todos y cada uno de nosotros podemos acercarnos a esas criaturas, realmente podemos. Esas criaturas inocentes de la naturaleza nos esperan y nos reciben con los brazos abiertos; pero, ¿qué es lo que espanta a las salamandras?, es nuestro orgullo estúpido, son nuestros arranques de ira, de rabia, nuestras bajas pasiones. Eso es lo que espanta o daña realmente a las salamandras, es por eso que no nos podemos acercar a ellas, y tampoco a las ondinas, a las nereidas o sirenas.

Todos los varones, ¿Qué pensarían, o qué sentirían? Ellas son tan bellas, tan inocentes, tan puras, que como es natural, ese animal racional varón, pensaría inmediatamente en poseerlas, en destrozar su virginidad, en gozar de la pasión animal, en eso pensarían.

¿Qué pensarían esas mujeres, también animales racionales, cuando verían a un varón de esa naturaleza, divino, puro, también virginal, inocente?, ya quisieran seducirlo inmediatamente.

Para acercarnos a esas criaturas, se necesita dominar al Ego, DOMINAR LA PASIÓN ANIMAL, devorar el fuego de nuestra lujuria, porque esas vibraciones lujuriosas, nuestras lascivas vibraciones les hacen daño, las molestan, las enferman. Es por eso que no podemos acercarnos así como a cualquiera, pero, quienes pueden llegar a dominar sus pasiones van a tener un paraíso abierto ante si y van a poder conversar libres, alegres y felices con esas criaturas elementales.

Seguimos hablando de otros elementales. Esos “gnomitos” que aparecen en los cuentos de “Blanca Nieves y los Siete Enanitos”, son toda una realidad viviente; es obvio que no en este mundo tridimensional; pero, sin embargo, se los ha visto en este mundo tridimensional.

Esos enanitos, en su generalidad, en los dibujos se los pinta a la usanza de la Edad Media y del Renacimiento, pero en nuestro medio, se acomodan prácticamente a la moda imperante.

Precisamente, también en Potosí, pero ya más abajo, en la piscina de Miraflores, fue donde pude encontrarme por primera vez, hace tiempo ya, con un Gnomito, pero a la usanza y a la vestimenta campesina.

La experiencia, o el encuentro fue de la siguiente manera: Era más o menos las cinco de la mañana, fuimos de excursión entre amigos, y era mi turno de hacer guardia, y de hacer el desayuno. Puse el agua al fuego, me senté cerca del mismo y encendí un cigarrillo. Fumaba tranquilamente a modo de calentarme, y ahí de improviso apareció una criatura muy simpática, muy bella de unos 60 centímetros más o menos caminando tranquilamente. Era un chiquito, pero con cara y rostro de adulto, con un ch´ulo (gorra indígena), con su chuspita (especie de bolsa), con su pantalón de bayeta, con su poncho, tal cual es un campesino del altiplano, con sus abarquitas, y no tenía ninguna deformidad, era plenamente bello y masticaba coca. Yo lo veía prácticamente asombrado, porque era la primera vez que veía yo a un indiecito de esa naturaleza, esbelto, con cara de adulto.

Yo estaba sentado sobre una piedra, y tenía el cigarrillo en la mano, la incomodidad de la piedra hizo que moviese un poquito, ese poco movimiento que realice, fue suficiente para que esa criatura me mirase con una serenidad, pero, que asombraba y se perdió.

Conté esto a los amigos, es obvio, tampoco creyeron. Ya me creían más o menos deschavetado, como algunos pueden creer en la actualidad. Posteriormente, ya cuando ingrese a la Rosacruz, pude encontrarme con ese Gnomito, al igual que con la Nereida y conversar...

Esos gnomitos, realmente existen. Los mineros les llaman: “El Tío”, precisamente esos gnomos, SON LOS GUARDIANES DE LA RIQUEZA MINERAL, que se halla en el subsuelo y saben - algunos mineros – congraciarse con ellos, y ellos o el “Tío” o los gnomos guardianes, conforme a Ley y MERECIMIENTOS, les dan algunos yacimientos o algunas vetas, y de ninguna manera esos gnomitos son “diablos”.

Eso que se llama animal racional, no tiene ni la más remota idea de lo que es el DIABLO, solamente le teme.

Los elementales del AIRE, son conocidos como SILFOS o SÍLFIDES. En los momentos que hay bastante viento, precisamente, ellos son los elementales del aire y se mueven a través del viento, son también invisibles a nuestros sentidos ordinarios, pero también podemos percibirlos y verlos, a veces forman ingentes cantidades de legiones de elementales que les gusta volar, volar y volar.

Son criaturas eminentemente bellas, vaporosas, sublimes, también inocentes y virginales.

En una ocasión, ya dentro de la ROSACRUZ, tuve la oportunidad de ser llevado por los aires con el mismo cuerpo físico, por esas criaturas elementales. De tal manera que pude conocerlos y también conversar de tú a tú ahí en esa CUARTA DIMENSION.

Esto que estamos hablando, es obvio, resulta ser increíble, cosa de niños, o simplemente de la imaginación propiamente de orates. Para poder criticar alguna concepción filosófica, psicológica, religiosa, etc., es necesario antes haber investigado. Disculpen que les trate en esta forma. Si ustedes, en este momento critican mis expresiones y tienen sus juicios, absolutamente, carecen de valor alguno. No sirven. Porque ninguno de ustedes ha investigado esa cuarta dimensión, por tanto sus juicios no tienen ningún valor.

Si ustedes hubiesen investigado esa dimensión entonces sí sus criticas tendrían todo un peso y valdría realmente oro muy fino, pero como no han investigado, no lo han experimentado, nunca se han ocupado de ello, entonces no pueden decir nada al respecto.

Es por eso, que las expresiones vertidas sean simplemente tomadas como una posibilidad. Todo es posible en este mundo, eso lo dice el más acérrimo materialista, y el más fantástico científico.

¿Por qué hablamos de estas criaturas? Porque tienen que ver con nosotros mismos. Nosotros en un pasado muy lejano, hace millones de años, cuando teníamos nuestro Budhata, esa consciencia plena y totalmente despierta, pura, virginal e inocente, fuimos elementales de la naturaleza. Unos fuimos elementales del fuego, otros del aire, otros del agua, otros de la tierra, eran también elementales.

Es un estado evolutivo, lo que les ha llevado a este estado humanoide y precisamente han llegado a ser humanoide porque presentada la oportunidad de elevarse de ese estado de inocencia hasta la virtud, prefirieron animalizarse, prefirieron el de la degeneración, el del vicio, o del “pecado”, y ahí los tenemos: ANIMALES RACIONALES...

Eso está trascrito en los libros sagrados, en una forma simbólica. ADÁN y EVA, no fueron un hombre y una mujer tan solamente, como estúpidamente nos quieren hacer creer los “sabios” de la iglesia católica. Adán, fueron una humanidad de varones, varón y varona, de seres hermafroditas.

Eva, fue también una humanidad que vino como consecuencia de la DIVISIÓN DE LOS SEXOS. Cualquiera que haya estudiado realmente el Génesis, podrá darse cuenta cabal, siquiera lógicamente que en el principio, creó Dios al hombre: VARON Y VARONA, y les dijo: CRECED Y MULTIPLICAOS, y posteriormente de esa sentencia, recién creó Dios a Adán y después de esa división de sexos, ambos, Adán y Eva, esas humanidades inocentes, virginales, paradisíacas, reitero INOCENTES, tenían que elevarse hacia un estado de VIRTUD, y para poder elevarse a la virtud, había que ser probado con FUEGO, con las tentaciones, lamentablemente esas grandes humanidades de antaño, se dejaron seducir por la “serpiente del deseo”, de la lujuria, del vicio, y prefirieron la degeneración a la virtud, y como producto de esa degeneración, aquí tenemos a esto que se llama “humanidad”.

Entonces, formamos todos nosotros, en un pasado muy lejano, esos seres divinales e inocentes de elementales. Y, ahora los elementales que podríamos percibirlos en el fuego, en el aire, en la tierra, en el agua, en ese estado virginal e inocente, en un futuro muy lejano, también tendrán la opción y la oportunidad de tener cuerpos físicos humanos y tendrán también ante sí la disyuntiva de elegir entre la virtud y el vicio.

Bien, pero sigamos con la cuarta dimensión, ahí en esa cuarta coordenada, existen unos templos maravillosos, realmente formidables, son templos construidos en ORO e incrustados de piedras preciosas de la mejor pureza que se pueda imaginar.

En esos templos ofician los Genios Rectores de los elementales de la naturaleza, existen templos del fuego, del aire, de la tierra, y sus genios rectores o sus dirigentes, si se quiere llamar mejor, ofician con RITOS ELEMENTALES muy sagrados para todas esas criaturas ígneas, acuosas, aéreas o sólidas de la naturaleza, y también existen otros templos, templos hechos de piedra, realmente, pero majestuosos, y también con muros y pilares de oro, plata, joyas preciosas. Son los TEMPLOS DE LA ORDEN ROSA CRUZ, los TEMPLOS DE LA LOGIA BLANCA.

Allí en esa cuarta dimensión, es donde ofician realmente los Grandes Maestros de la ROSA CRUZ, los grandes Iniciados.

En este mundo tridimensional, en este mundo físico no existe en todo el mundo(1981), estoy hablando en términos muy claros, precisos y concisos, en todo el mundo NO EXISTE UN TEMPLO DE LA ORDEN ROSACRUZ, el primer templo a construirse de la Orden Rosa Cruz, será aquí, en el territorio llamado BOLIVIA, y con muchas posibilidades en Cochabamba. En esa cuarta dimensión están los templos de la Orden Rosa Cruz.

Si cualquiera de ustedes, cualquier persona quisiera visitar esos templos de la LOGIA BLANCA, lo que tiene que hacer en principio, es vivir realmente ese magnífico DECÁLOGO, enseñado por MOISÉS (Ese Gran Maestro Rosa Cruz), vivir los DIEZ MANDAMIENTOS en la Praxis, no en la teoría, o vivir el Decálogo del Señor BUDA, si uno es budista.

Todos pueden darse el lujo de pretender vivir los Diez Mandamientos, sin embargo, los ignoran, NO SABEN lo que SON los diez mandamientos. Esas religionzuelas y sus fundadores, esos magníficos negociantes, esos señores ejecutivos de púrpura y seda han adulterado a diestra y siniestra ese magnífico libro que se denomina ahora, la BIBLIA. Lo han ADULTERADO a su manera, tratando de que ese libro llene sus fines altamente financieros, económicos.

Uno de los mandamientos que ha sufrido una adulteración cínica, es precisamente el sexto.

Cualquiera de ustedes que ha leído una de las biblias antiguas, encontrará que ahí se encuentra trascrita la siguiente sentencia: “NO FORNICARÁS”. Sin embargo, en las biblias ya “modernas” se dice: “No Adulterarás”, precisamente con ese CINISMO, con ese descaro, propio del animal racional, del gusano intelectual, se adultera colocándose la palabra “No adulterarás”.

Y, así, el decálogo ha sido adulterado como todos los textos de la biblia, unos más otros menos.

Pero, es necesario VIVIR, ese DECÁLOGO. Solamente así podremos acercarnos a los elementales de la naturaleza, y podremos penetrar en esas dimensiones superiores, y podremos ingresar con este mismo cuerpo, cuerpo de carne y hueso a la cuarta dimensión, y participar de esos magníficos rituales celebrados por los Genios Elementales o por los grandes Maestros de la Logia Blanca.

¿Imposible? Cada uno, realmente, tiene algo de consciencia, y que le hace ver que su estado de degeneración es tal, y podrá decir: “Yo soy un tipo tal, que imposible que pueda llegar a vivir tal cosa, si es que existe...”.

¡TODO ES POSIBLE!

Si quiere cada uno de nosotros regenerarse, se abrirá ante sí ESE COSMOS MARAVILLOSO de la CUARTA DIMENSION, de la QUINTA, de la SEXTA, y de la SÉPTIMA, de la OCTAVA y NOVENA DIMENSION.

¿Cómo empezar a REGENERARSE, para tener esa dicha? VIVIENDO EL DECÁLOGO. Pero, ¿Cómo, si no conocemos realmente el VERDADERO DECÁLOGO? El intelecto no conoce ni puede reconocer realmente el Decálogo ni la Biblia. Eso que es la razón, el intelecto, NO PUEDE ESTUDIAR eso que son los VEDAS, lo único que hace el intelecto, lo único que hace la razón en torno a los libros Sagrados, es LEERLOS E INTERPRETARLOS a su VICIOSA MANERA, de acuerdo a SUS INTERESES, y a sus CONVENIENCIAS, y después enseñarlos como si fuera una gran verdad. Así surgen las grandes creencias, los grandes embustes.

Todo el “budismo” y todo el “cristianismo”, realmente, es un gran embuste, porque es explicado intelectualmente NO consciencialmente.

Si se quiere tener consciencia de lo que realmente es el CRISTIANISMO EN SI, lo que son los VEDAS, lo que es el BUDISMO, etc., hay que DESPERTAR CONCIENCIA EN CADA UNO DE NOSOTROS, despertarla y desarrollarla, dejar a un lado el ego, las pasiones, los intereses, los deseos mezquinos y vivir PLENOS DE AMOR, despertando consciencia, todas aquellas enseñanzas contenidas en los LIBROS SAGRADOS, no será una teoría o un dogma, sino una VERDAD, una terrible REALIDAD.

Esas realidades sólo pueden ser concebidas con el despertar de la consciencia. Si hay consciencia dormida, solamente hay razón e intelecto, pero nada de realidad, nada de verdad.

Las CONCIENCIAS DORMIDAS, sólo son ADORNOS muy bonitos, muy apreciados, pero muy ocultos en el interior de eso que es el ego, de la LEGIÓN, y solamente mostramos ante los demás una terrible máscara de la ignorancia racional, de la ignorancia intelectual.

Uno de los más grandes intelectuales dijo: “Yo sólo sé que nada sé”, y cuando llegó a ese estado, es cuando empezó él a conocerse a sí mismo. Un gran sabio de la antigüedad conoció su ignorancia, porque era altamente racional, descubierto ese conocimiento en sí mismo, de su propia entidad, de su propia ignorancia, él empezó recién a conocer la realidad, a aprender.

Todos nosotros nos creemos más o menos sabios, más o menos ilustrados, ninguno de nosotros va a aceptar que es un ignorante o un analfabeto, ninguno va a aceptar así por así que es una cotorra, que repite lo que han dicho otras cotorras u otros loritos u otros papagayos o lo que han escrito en libros.

Todos nos vamos a creer dueños del conocimiento, de la sabiduría, pero somos eso, aunque nos duela reconocerlo: REPETIDORES, GRABADORAS, LOROS, y a veces repetimos todavía muy mal.

Alguien dice: “Yo creo en Dios...”. ¿Quién le ha dicho que debe CREER en Dios? Un ateo de esos, y lo peor es que a ese ateo lo consideran Obispo o Hijo de Dios, etc., y la repetición continúa, los dogmas se expanden, y no hay nada de realidad.

Hagamos de esas dimensiones una realidad objetiva, real. Es obvio, los racionales, los intelectuales, nos califican de SUBJETIVISTAS.

Lo objetivo para la bestia intelectual es simplemente madera, piedra, vidrio, carne, placer, dinero, etc. Eso es lo Objetivo, pero precisamente eso que nos ha dado racionalidad, es COMPLETAMENTE SUBJETIVO.

De aquí a unos 50 años, vayamos, esa belleza de las muchachas, que es muy “objetiva”, ¿A dónde va a ir a parar? A una vejez repugnante.

Esa virilidad tan gallinescamente mostrada por los varones, de aquí a unos 50 años ¿Dónde irá a parar? A un cesto conteniendo limones exprimidos.

Eso es lo subjetivo, o ¿No es así? , o ¿Eso es objetivo?. Su dinero de cualquiera de los presentes, supongamos que es un millonario, de aquí a un tiempo por el simple proceso económico de las devaluaciones, inflaciones, deflaciones, etc., ¿Cuánto va a valer?. No valdrá nada.

Entonces, eso es “objetivo”? Alguien dirá que sí todavía, pero eso es algo muy subjetivo.

Estos edificios, vayamos a unos más grandes como los de New York, son algo o bastante sólidos, muy objetivos, pero basta un simple terremoto, por supuesto fuerte, para reducirlos a polvareda. ¿Objetivo? ¿Permanente? ¿Real? Es víctima del tiempo, y esos GNOMOS, esas ONDINAS, esas NEREIDAS, esas SIRENAS, esos ELEMENTALES a los que hacemos referencia VIVEN EN EL TIEMPO, y NO SON algo que puedan destruir un terremoto, o el tiempo, o una deflación monetaria, o unos años de existencia. SON UNA REALIDAD. ¡ESO ES OBJETIVO!

Si hay críticas en torno a nuestras exposiciones, porque somos demasiado “subjetivistas”, aceptamos la crítica, siempre y cuando vengan de personas que han experimentado nuestro “subjetivismo”.

La opinión de un crítico, dice un autor, carece de valor si tiene desconocimiento de causa, y todo aquel que afirma algo que no le consta, esta en el camino del manicomio.

Esos ELEMENTALES, a los que hemos hecho referencia, tienen mucho que ver con nosotros mismos, pues todo aquel aspirante a la INICIACIÓN ROSACRUZ, todo aquel que quisiera llegar a UN ROSACRUZ, que quisiera pertenecer un día al SAGRADO COLEGIO DE INICIADOS DE LA GRAN LOGIA BLANCA, tiene que pasar por muy diversas y difíciles pruebas. Pruebas presentadas, a veces, por los GENIOS ELEMENTALES DE LA NATURALEZA. Esos elementales NOS PRUEBAN.

Los elementales del FUEGO, nos prueban, tienen mucho que hacer con los aspirantes, Iniciados, y Maestros. ¿Cómo? El elemento fuego nos prueba y nos pule, y nos purifica, precisamente, cuando trabajamos con la lujuria, contra las bajas pasiones; y podemos llegar a dominar el elemento fuego, cuando dominamos nuestra propia lujuria, nuestra propia lascivia, entonces podemos hacernos AMOS del elemento fuego, mientras tanto somos solo ESCLAVOS.

Y, así, existen diversos valores en los diferentes elementos. Venciendo las diferentes pruebas que nos ofrecen estos elementales, es como podemos ascender por esa MÍSTICA ESCALA DE JACOB, y llegar a la INICIACIÓN, al MAGISTERIO, y a la PERFECCION.

Esta exposición, tiene precisamente ese objetivo.

Sin embargo, quienes no comulguen con nosotros y que estas exposiciones no las tomen siquiera como posibilidad, es obvio, dejarán de leer estas líneas y desecharán este pequeño libro.

Eso es lo que queremos, que no pierdan su tiempo, que vivan su mundo “objetivo”. Pero, aquellos que quieran perseverar aún, y que quisieran interiormente más de lo que realmente es el cosmos que nos rodea, van a continuar, ellos son demasiado grandes como para dejarse colar por un simple cedazo.

Queremos llegar a esas consciencias, a esas conciencias adormecidas e infantiles, dormidas. Es por eso, que hablamos de esos elementales. En cambio, el ego, ese robusto y maduro ego, objetivo y realista, pragmático y muy intelectual, no acepta ni de pasada siquiera, a esas existencias elementales.

Es preferible decir: No joroben, no quiero que me hablen de esas cosas de niños, esto es para niños, etc.

Pero, es para ese niño adormecido, que se halla en cada uno de los CORAZONES de cada uno de ustedes.

Queremos despertar a ese NIÑO, de esa PUREZA, de ese LIMPIEZA BUDHÁTICA, AUGÚSTICA. De esa CONCIENCIA, de eso que es el ALMA en ustedes, de ese EMBRIÓN DE ALMA. Queremos ese despertar, por eso hablamos con esa sencillez, de esos elementales, de esa inocencia.

Estos elementales han sido percibidos en diversidad de oportunidades, por el ojo físico. No son seres fantasmales, no son etéricos, vaporosos. No son inmateriales o a-materiales. SON MATERIALES. Por eso han sido percibidos por la retina física.

Si hubiesen sido algo que no tiene materia, no hubiesen sido percibidos por la retina física en ninguna oportunidad.

La diferencia, en cuanto a materia se refiere, es que sus vibraciones elementales, SON MÁS FINAS, MÁS SUTILES que la de los animales racionales. Son menos groseros, menos materiales, son más ESPIRITUALES, son más SANAS, más LIMPIAS. No son enfermizas, no son degeneradas. Esa es la diferencia.

A mayor grado de degeneración, mayor solidez, mayor negatividad consciencial, y mayor “objetividad” racional.

Los elementales NO TIENEN RAZON, en ellos no existe el batallar de los opuestos, o de las antítesis, en ellos existe un fluir puro y sereno del pensamiento.

En el animal racional -hombre-, todo es complicación, todo es blanco y negro, rojo o azul. Todo es bueno o malo. Alto o bajo. Todo es tesis y antítesis. Todo es muy lógico.

Los elementales, esas criaturas inocentes de la naturaleza, son SUPRALÓGICAS, si se quiere A-LÓGICOS o ILÓGICOS. Ellos no se complican con las antítesis o con la dialéctica. Ellos viven espontáneamente, libremente, sin acondicionamientos. Ellos no viven en moldes, no viven embotellados, no viven enjaulados. VIVEN LIBRES.

Una de las jaulas que tiene que romper la criatura llamada humana, es la jaula de la razón, la jaula del intelecto, y tiene que aprender a vivir en libertad. Libre de razonamientos, libre de intelectualidad.

Solamente así va a poder reconquistar esa pureza original. Pretender conquistar el paraíso terrenal o el EDÉN, la INOCENCIA PERDIDA, por medio o por el uso de la razón, es algo realmente ILÓGICO, y es algo completamente imposible.

A la inocencia, o a la virtud, solamente se llega con la CONSCIENCIA DESPIERTA, sin el uso estúpido de eso que se denomina razón.

SINTESIS DE LA SABIDURIA ROSACRUZ

VIDA.- Cuidar la simiente DIVINA, cual si fuese ORO LÍQUIDO, y sublimarlo, transmutarlo mediante el ARCANO SOLAR, o sea por la COMUNIÓN ÍNTIMA de VARON Y MUJER sin expectación del espasmo, y el orgasmo, durante el RITO SEXUAL.

MUERTE.- Descubrir mediante el AUTO-RECUERDO y la AUTOOBSERVACIÓN ÍNTIMA, los elementos subjetivos que constituyen los yoes. Realizar un estudio profundo hasta lograr la comprensión total de cada uno de los yoes, y ANIQUILARLOS con el ígneo poder de KUNDALINI.

AMOR.- Amar a la humanidad, darle lo más preciado que poseemos, eso que es lo invalorable, lo que constituye la ENSEÑANZA ROSACRUZ.

LIBERTAD.- Práctica constante de la división de la atención CONSCIENTE en: Individualidad, Actividad y Ubicación.

SABIDURÍA.- Dejar que el PADRE INTERNO, cumpla con su MAGNA OBRA, poniendo de nuestra parte, tan sólo nuestro granito de arena o de mostaza que es nuestra vida entera.