sábado, noviembre 29, 2008
Eneagrama: Un Método de Crecimiento Espirtual??
Irma Fernández de Castañeda
Hace tiempo, cayó en mis manos un volante, en el cual se me garantizaba que tomando un curso de “Desarrollo Humano” para “conocerse a sí mismo” podría yo adquirir un perfecto “balance e integridad personal”. Muy tentador alcanzar ese balance e integridad por lo que durante toda mi vida he luchado, y que no siempre he tenido éxito.
Este curso, según el volante publicitario, marcaría mi vida. Quedó en mi cabeza dando vueltas esa idea, ¿cómo en tres días (9 horas) podría yo lograr un crecimiento espiritual? Si durante muchos años me he dedicado a este crecimiento espiritual, tanta oración, formación, vida sacramental, y aún sigo sintiendo que avanzo lentamente. ¡Qué bueno haber encontrado una solución instantánea a mis inquietudes!.
Pronto surgió una ráfaga de luz en mi mente. ¿Dónde entra Dios en este curso? ¿si es un curso de crecimiento espiritual, como es que no se menciona la oración, la Eucaristía, la Meditación, mi relación personal con Dios?
El Eneagrama, que se presenta como un “método de crecimiento espiritual” para “conocerse a uno mismo”, según los arquetipos de la personalidad, fue popularizado en el occidente por Georges Ivanovich Gurdjieff (1870-1949) y por su discípulo Pier D. Ouspensky, y en los años 60 por Oscar Ichazo.
Desde muy joven, el armenio Gurdjieff, buscaba afanosamente el conocimiento esotérico, el ocultismo, la comunicación con los muertos, la magia, las sociedades secretas.
Así mismo, enseñaba que el eneagrama es un símbolo universal del Cosmos basado en leyes matemáticas: “todo conocimiento puede ser incluido en el eneagrama y con ayuda de este puede ser interpretado”.
Posteriormente, Oscar Ichazo, llamado padre del moderno eneagrama, fundador del Arica Institute, en Nueva York (1971), que ayudó mucho a su difusión, en alguna ocasión comentó: “En el eneagrama, no hay lugar para Jesús, lo dije a unos sacerdotes y deberían haber estado atentos, porque no hay ningún Jesús que encontrar aquí” (cfr Tori De Angelis “Jesus was a 2” en Common Boundary, vol. 13, No.5, 1955, 55-59).
Fue Ichazo el que introdujo en el eneagrama la correlación de sus nueve puntos con nueve tipos de personalidad. Cada persona nacería como “esencia pura”, pero para sobrevivir se encuentra forzada a desarrollar una personalidad que será su ego. Entre los 4 y los 6 años, escoge uno de los nueve patrones básicos de pensamiento que está conectado con un patrón de comportamiento. Esta personalidad escogida es la causa de la infelicidad. Entonces para ser feliz, la persona debe regresar a su esencia, compensado por su “fijación del ego”. Esto se logra cultivando el patrón de pensamiento y comportamiento opuesto y complementario al suyo. Debe hacer ejercicios especiales como meditación con la posición de las manos al estilo budista (mudras).
Como nada de esto tiene fundamento en la razón, Ichazo dijo haber descubierto los tipos de personalidad del eneagrama durante uno de sus éxtasis y bajo la influencia de un ángel.
Otros promotores del eneagrama han adoptado teorías psicológicas de Freud y Jung queriendo darle credibilidad.
Esquema del Eneagrama
El eneagrama es uno de los símbolos más populares del New Age, lo presenta como clave universal de las ciencias y de la sicología. Se trata de una estrella abierta de nueve puntas, que representan los nueve tipos de personalidad, sus orígenes, su relación con los demás, sus motivaciones, sus temores. Ayuda a comprender las actitudes y comportamientos de las personas con las que nos relacionamos. Dicen que el sistema conduce a la autorrealización y la liberación del autoencarcelamiento psicológico.
Estas ideas New Age y el Eneagrama han tenido mucha aceptación entre católicos, desde que en el año 1971 el chileno Claudio Naranjo, ayudante y discípulo de Oscar Ichazo, organizó un seminario en el Esalen Institute, para una comunidad religiosa e introducir el uso del Eneagrama. Asistieron la medium Helen Palmer y el padre Roberto Ochs, que serían los principales difusores. Poco después, el padre Ochs fue a Chicago y enseñó el eneagrama en una comunidad religiosa, durante los cuales también se introdujo el yoga y la meditación oriental.
Discípulos del padre Ochs son el P. Patrick O´Leary, difusor internacional del eneagrama entre los religiosos, con seminarios sobre dirección espiritual, y el P. Mitchell Pacwa, que tiempo después corrigió y hoy es un gran experto en New Age, denuncia sus peligros. El padre Pacwa recuerda: “Fue como una plaga. En los talleres de eneagrama nos animaban a usar drogas alucinógenas para adquirir los estados alterados de conciencia que después aprendíamos a alcanzar por nosotros mismos sin el uso de drogas. Esta pseudo espiritualidad enseña que lo que ves en un estado de conciencia alterada es la realidad…para los consejeros pastorales el eneagrama no es ni teológicamente correcto, ni psicológicamente efectivo”. (Crisis, septiembre 1997, 19).
Sin embargo los cursos de eneagrama se imparten en lugares oficialmente católicos. Los promotores del eneagrama “católico”, no hablan de los aspectos ocultos y esotéricos del eneagrama porque quieren presentarlo compatible con la fe católica, y por eso mezclan sus teorías con las ideas de los místicos católicos, como Santa Teresa y San Juan de la Cruz (Mitchell Pacwa, S.J. Catholics and the New Age Servant Publications, Ann Arbor, Michigan 1992, 111).
El padre Pacwa nos dice que el Eneagrama no puede ser purificado de sus ocultas raíces paganas y de pronto hacerse compatible con la espiritualidad cristiana. Mezclar estas prácticas con el cristianismo, es comparable a la Santería donde el vudú es combinado con el catolicismo. El P. Pacwa en su libro “Catholics an the New Age” denuncia el eneagrama como infiltración gnóstico-esotérica entre los fieles y religiosos católicos y advierte de sus catastróficos resultados: “Ningún sacerdote de mi clase que aprendió las enseñanzas del eneagrama, excepto yo, sigue siendo sacerdote, todos lo han dejado”.
Quién me iba a decir que la curiosidad sobre un curso me llevaría a descubrir tantas verdades del Eneagrama. Pero seguían surgiendo preguntas, sobre todo yo quería entender porqué es que tan fácilmente se difunde entre las personas que buscan mejorar su espiritualidad, sus relaciones familiares, su vida personal. He llegado a entender que una religión puede ser combatida de dos formas. Una a través de la confrontación directa y crítica de sus dogmas, de su autoridad, utilizando los medios de comunicación para tratar de quebrar su prestigio, decretando leyes contra la educación religiosa o la profesión pública de la fe. La otra es mas sutil, más indirecta, más disfrazada, más al estilo New Age, actúa arteramente lastimando en ocasiones de manera irreversible la psicología y la espiritualidad de la persona.
La psicología y “espiritualidad” del New Age han penetrado en algunos ambientes “progresistas” de la Iglesia, sobre todo entre religiosos y religiosas. Esta “espiritualidad” relativista, donde la única autoridad es UNO MISMO Y LO QUE UNO SIENTE, no puede tolerar que haya dogmas, autoridad en la Iglesia, humildad, caridad y unidad.
El eneagrama, la psicología transpersonal y muchas otras formas de New Age habrían pasado sin mayores efectos entre los católicos, si los religiosos y religiosas no los hubieran difundido, lo cuál implica una grave responsabilidad. Aunque digan que ayudan mucho a la vida espiritual, esas teorías destruyen la psicología de las personas, los valores de la sociedad y de la Iglesia, la unidad familiar, el respeto a la vida, y el don más grande que podemos poseer: la fe.
¿Qué podemos hacer los católicos ante esta moderna “espiritualidad?
• Formarnos. Conocer bien lo que la Iglesia nos enseña para saber distinguir bien lo que es conforme a la sana doctrina católica y lo que es contrario a ella. Contamos con una incalculable riqueza en las Sagradas Escrituras, el Catecismo de la Iglesia Católica y los documentos pontificios.
• Informarnos de lo que acontece en el mundo en que vivimos, dentro de esa gran pluralidad de ideologías, teorías, doctrinas que a diario se nos presentan para que no nos tome desprevenidos, o por causa de una muy atractiva “moda”, vayamos a salir lastimados en nuestros valores y en nuestra fe.
• Difundir. Dar a conocer a nuestros hijos, o a nuestros alumnos los peligros que pueden encerrar esta gran ola de “Nuevos Movimientos Ideológicos y Religiosos” que han nutrido sus filas principalmente de católicos inseguros, que andan en busca de respuestas y de soluciones para sus muy particulares problemáticas, pero olvidando que es Jesucristo quien nos revela la verdad sobre el hombre y nos da la gracia para ser plenamente humanos. Sólo Él es el Camino, la Verdad y la Vida.
• Defender el legado de Cristo. Su Iglesia está en nuestras manos. Es a nosotros como bautizados a quienes corresponde defender y valorar, así como salvaguardar íntegro el depósito de la fe, para mantener la unidad y extender su Reino en la Tierra.
La relación íntima y personal que podemos tener con Dios Nuestro Padre, la oración, la sobreabundancia de gracias que recibimos en la Eucaristía, los méritos que obtenemos en cada Misa, la constante guía del Espíritu Santo en nuestra vida, la solidez de nuestra doctrina Católica, la amorosa protección de nuestra amada Madre la Santísima Virgen María, no la puede suplir NUNCA, ningún Eneagrama, ninguna ideología por muy atractiva que parezca, ninguna psicología transpersonal, ningún curso de desarrollo humano vacío de Dios.