jueves, noviembre 13, 2008
Ouija, la tabla de los mil fraudes
Por Moises Garrido
"Hay que reconocer que ningún fenómeno se presta más que el espiritista a la duda y al fraude", César Lombroso, 1836-1909.
Cuando hablamos del lado fraudulento de los fenómenos paranormales siempre nos viene a la mente toda esa legión de estafadores psíquicos, falsos profetas, futurólogos charlatanes, etc. Ardua labor tiene la Parapsicología para librarse de una vez por todas de esos indeseables intrusos que oscurecen la imagen sería de la investigación de los fenómenos anómalos. (1)
Aún más complicado resulta descubrir los fraudes inconscientes, distinguir lo paranormal de lo patológico y lo auténtico de lo pantomímico. Miles de personas, aparentemente honestas, sin ánimo de notoriedad, sin afán de lucro, y sin ningún tipo de interés, aseguran haber vivido un episodio de carácter paranormal. Si no encontramos ningún indicio aparente de fraude ¿cómo podemos dudar de sus testimonios?... Aún así, un porcentaje de esta gente mienten: son los pseudólogos fantásticos (también conocidos como mentirosos patológicos). La moderna Sicopatología tiene mucho que decir sobre estos individuos y los trastornos ficticios y de simulación que padecen. (2)
La oui-ja, aquí y ahora
Hoy día, los parapsicólogos más críticos atribuyen el movimiento del vaso, en las sesiones de "oui-ja", a automatismos musculares inconscientes: "Son movimientos automáticos, inconscientes, realizados por las personas que colocan los dedos sobre el vaso. Lo que el inconsciente piensa, sabe, imagina, supone, inventa... o adivina parapsicológicamente, lo manifiesta por movimientos inconscientes" (González Quevedo, 1977). Otros parapsicólogos, aún más racionalistas, consideran que el vaso es movido deliberadamente por alguien: "El fenómeno de la 'oui-ja' en su versión de vasografía nunca ha existido, y el movimiento de la copa es una impostura de algún bromista" (Jordán Peña, 1991). (3)
¿Explican ambas tesis definitivamente todos los casos de práctica vasográfica?... No es justo generalizar, pues como bien apunta el Prof. Germán de Argumosa, "así como de un hecho verificado no podemos afirmar a priori que todos los demás sean auténticos, resulta igualmente anticientífico asegurar que todo es fraudulento porque se hayan comprobado lamentables casos falsos".
Si bien la "hipótesis espiritista" -es decir, que un espíritu desencarnado es quien causa el desplazamiento del vaso hacia las letras para componer un mensaje- puede parecernos, a estas alturas, tremendamente inverosímil (ya, en 1956, el eminente parapsicólogo René Sudre señalaba que "el análisis psicológico de la teoría espiritista, referido a los hechos en los que se funda, contribuiría a evidenciar su gran debilidad, que linda a veces con lo absurdo"), no podemos negar la posibilidad de que -ocasionalmente o no- el vaso se mueva por una acción telecinética conjunta de los participantes (fenómeno polipsíquico), como propone la Parapsicología Animista. El ambiente, la concentración, el estado de ánimo, el deseo compartido de que se mueva el vaso, etc., pueden servir como factores desencadenantes de un nivel mental propicio que ocasione, por vía psicocinética, el desplazamiento del vaso.
Los mensajes recibidos, dicen los parapsicólogos animistas, procederían de la mente inconsciente de los participantes; de hecho, se ha descubierto una sospechosa relación entre la mentalidad de éstos y la información obtenida a través de la "oui-ja" (nivel cultural, calidad gramatical, conocimientos...).
Algunas escuelas psicológicas también comparten la idea de que, a través de este sistema de canalización -como en otros (4)- se manifiestan los contenidos de la parte inconsciente de nuestra psique (5). Los que participan en esas sesiones espiritistas creen, erróneamente, que la información procede de una fuente exógena... Cierto es que -como argumentan los defensores de la hipótesis espiritista- hay ocasiones en que esos mensajes transmiten información desconocida por los participantes, tanto a nivel consciente como inconsciente, e incluso también se pueden dar predicciones sobre hechos futuros que, aunque no siempre, al cabo del tiempo se cumplen... ¿Es la prueba que evidencia el contacto entre nuestro mundo físico y un "más allá"?... Pensamos que no. Los participantes, bajo ese estado especial al que aludimos anteriormente, podrían obtener información por vía extrasensorial y establecer no sólo una conexión telepática entre ellos, sino con otras mentes inconscientes y ajenas (6).
Oui-Ja: Un acceso al mundo paranormal
Realizada la anterior y necesaria aclaración, quisiera confesar a nuestros queridos lectores que la "oui-ja" fue mi bautismo de fuego en estos temas. Esta práctica "espiritista" me fue abriendo las puertas, a principio de los años ochenta, del ignoto y apasionante mundo de los fenómenos paranormales. Participé en numerosísimas sesiones vasográficas, y aún conservo con cariño buena parte de las comunicaciones transcritas en folios. Recuerdo -y reconozco- que varios compañeros de BUP estábamos obsesionados con el tablero "oui-ja" que, por aquel entonces, considerábamos -ingenuamente- un medio para conectar con "entidades extrahumanas". En aquellas frecuentes reuniones en torno a las letras y al vaso, "contactamos" con personajes tan variopintos como Satanás, San Pedro, Larra o Carlomagno... Tampoco faltó la época en que se "colaron", a través de la sutil frontera que marca la "oui-ja" y la predisposición mental de los reunidos, seres que decían proceder de lejanos planetas...
Con el tiempo, y conforme fui investigando y documentándome a fondo sobre los temas paranormales, terminé convenciéndome de la posibilidad de que la mente humana, y no "entes espirituales", podría estar detrás de los contactos vasográficos. Todo ello, sumado al aburrimiento y apatía que ya me producían las continuas sesiones, hicieron que la "oui-ja", para un servidor, quedase olvidada y hoy no sea más que un nostálgico recuerdo del pasado. Mi particular búsqueda del misterio tendría trazados nuevos caminos mucho más fructíferos...
Aún con la tesis defendida líneas atrás -es decir, que realmente no conectemos con entidades extrahumanas sino con nuestra mente inconsciente- el riesgo sigue siendo el mismo, y todas las advertencias contra este tipo de prácticas son insuficientes. La obsesión y la sugestión son los principales ejes que convierten a la "oui-ja" en un peligroso juego... (7)
Ejemplo de un fraude ¿inconsciente?
Centrándonos nuevamente en el tema de este trabajo, los fraudes en la "oui-ja", podría citar muchos casos en los que he estado presente, pero creo que uno que recuerdo especialmente nos bastará para que el lector, cuando vuelva a participar en una sesión de este tipo, abra bien los ojos, porque no sólo hay "espíritus burlones"...
Corría finales de 1991 cuando un amigo me insistió reiteradamente que asistiese con él a una sesión de "oui-ja" que un grupo de personas celebraban todos los viernes en Moguer (Huelva). Le confesé que ya hacía tiempo que dejé de participar en tales prácticas y que no tenía mucho interés en ir, pero él se empeñó en que fuera como experto en estos temas para conocer mi veredicto sobre aquellas comunicaciones que él consideraba sorprendentes. Me habló de la seriedad de los participantes, del tono elevado de los mensajes recibidos y de la armonía espiritual con la que se envolvían dichas reuniones... En fin, no quise ser grosero y acepté; a fin de cuentas ¿qué podía perder?...
El punto de encuentro era un bonito chalet enclavado en las inmediaciones de la conocida localidad onubense, cuna del insigne escritor Juan Ramón Jiménez. Allí nos recibieron amablemente varios matrimonios de edades comprendidas entre los 40 y 60 años. La exquisitez y elegancia de estas personas eran fiel reflejo de la buena posición socio-económica que gozaban. "¿Qué ganarán haciendo la "oui-ja" un viernes por la noche?", me pregunté, pero no tardé en darme cuenta de que me hallaba entre personas bastante crédulas en el contacto con el mundo de los espíritus...
Noté que tenían mucho interés en conocerme. Ya mi amigo les había hablado largo y tendido de mí y de mi dedicación a la investigación y divulgación de los temas paracientíficos; además, les había facilitado varios trabajos míos publicados en diversos medios escritos. Percibí claramente que deseaban que yo saliera convencido y complacido de aquella sesión de espiritismo.
Antes de comenzar, algunos de los participantes - otros se sentaron a pocos metros de la mesa donde iba a tener lugar la sesión - entrelazaron sus manos y con los ojos cerrados rezaron al unísono para alejar las posibles "interferencias diabólicas" y, así, atraer la presencia de "seres de luz". A raíz seguido, me brindaron poder participar con ellos colocando mi dedo índice sobre la base de la copa invertida, pero cortésmente me excusé diciendo que yo estaba allí gustosamente en calidad de invitado y que mi deseo era que aquella sesión se desarrollase como cualquier otro viernes, participando sólo los que hasta ahora venían haciéndolo, así que prefería, si no les importaban, estar simplemente como observador. Mi decisión fue aceptada sin titubeos...
Todo dispuesto, y tras unos breves minutos de concentración por parte de los que apoyaban levemente sus dedos sobre la copa, ésta comenzó a deslizarse lentamente por el tablero... Las letras no se encontraban ordenadas alfabéticamente, sino que estaban dispuestas aleatoriamente. No recuerdo en estos momentos el nombre con el que se identificó la supuesta "entidad" manifestada, pero sí que provocó cierta alegría entre los componentes de la reunión.
Yo, a escasa distancia de la mesa, me dedicaba a observar con detenimiento la presión de las yemas de los dedos en el borde de la copa, los movimientos y velocidad de ésta, etc. Ya, la copa se desplazaba con suma agilidad deletreando mensajes de claro contenido mesiánico que, en voz alta, iba transmitiendo una de las señoras (a la que llamaremos Amalia) que tenía puesto su dedo en la copa. Otra persona, de entre los allí presentes, tenía como misión ir transcribiendo aquellos mensajes en una libreta.
Me llamó la atención que la señora Amalia transmitiera verbalmente con tanta facilidad las palabras y las frases, sabido es que resulta sumamente difícil que, mientras la copa se dirige a cada letra a cierta velocidad, nuestra mente pueda ir formando, en ese mismo instante, la frase correspondiente. Todo lo más es ir diciendo en voz alta las letras indicadas por el vaso y luego, una vez transcritas, leer las palabras o la frase que se haya podido formar. Podría ser sencillo en una breve respuesta, de una sola palabra por ejemplo o cuando el vaso se desplaza lentamente, pero ¿se imaginan que tras formularse una pregunta la copa señale velozmente 30 letras? ¿Cómo podemos ir separando y construyendo las palabras y las frases con tanta rapidez?... Imposible, salvo que la respuesta ¡ya la tenga preparada mentalmente un participante!... ¿Quién?: Obviamente aquel que va nombrando las palabras en voz alta. Primer sospechoso que tenemos: la señora Amalia...
A la caza...
Centré mi atención en ella, y fui descubriendo como a veces incluso se le escapaba anticipadamente de su boca las palabras o la frase ¡aún faltando por señalar la copa varias letras! ¿Premonición, quizás?...
Por último, opté por el método que nunca falla. Los que no empujan suelen centrar su atención más bien en la copa y repara en la letra una vez es señalada por ésta. Amalia en cambio buscaba y fijaba su vista en la letra que, a continuación, era señalada por la copa, y así sucesivamente. En algunos momentos, la copa marcaba una letra ¡que no estaba en la palabra dicha por Amalia!, y es que coordinar los movimientos del vaso a la vez que inventar e ir diciendo en voz alta las frases es terriblemente complicado...
Permítame el lector un inciso para advertir que aunque las letras estén colocadas desordenadamente, una vez transcurridos unos minutos de sesión es fácil recordar la posición de las mismas, pese a estar salteadas, y ya no es necesario que la copa tenga que desplazarse dando vueltas en círculo hasta parar en la letra correspondiente, sino que los desplazamientos de letra a letra suelen hacerse ya casi en diagonal. Así pues, el método de colocar desordenadamente las letras para eliminar la posibilidad de que alguien mueva la copa intencionadamente, creyendo garantizar de ese modo la autenticidad de la sesión, es pura falacia, por tanto, de nada sirve...
Había momentos en que Amalia apretaba con tanta fuerza su índice sobre el borde de la copa que, cuando tenía que traerla hacia su posición, ésta caía bruscamente sobre el tablero. Otro detalle es que aunque colocaba su dedo en el borde, poco a poco lo llevaba casi al centro de la base de la copa, de forma que los movimientos de ésta hacia cualquier extremo del tablero se realizan con suma facilidad.
...Y captura del impostor
Cuando no tuve la menor duda de que Amalia era quien movía conscientemente la copa, decidí no quedarme de brazos cruzados y - no sé si fue lo más oportuno entonces - desmontar aquella farsa...
Comencé sugiriendo a Amalia que retirase su dedo de la copa. Al hacerlo - eso sí, sin poder disimular su asombro ante mi peculiar deseo - la copa quedó inerte. Por más que los restantes participantes "invocaban" a la "entidad" que hasta ese momento deletreaba con suma destreza largos mensajes, ésta parecía haber sido "engullida" por otra dimensión (nunca mejor dicho...).
Dije a Amalia que volviera a poner su dedo ¡y de nuevo la copa se movió!... Insté a los demás, uno a uno, a que quitasen sus dedos, pero la copa, mientras Amalia seguía teniendo su dedo sobre la misma, continuaba desplazándose... Lo más anecdótico fue cuando dije a todos, menos a Amalia, que retiraran sus dedos: ¡La copa siguió moviéndose, erráticamente por supuesto, sólo con el dedo de Amalia!... ¿Estaríamos ante una "médium"?, se preguntaron, con gran inocencia, algunos de los presentes. La verdad es que, más que el fraude en sí, me sorprendió que algo tan evidente y que averigüé en pocos minutos, no fuese descubierto por los asistentes a esas sesiones durante tanto tiempo que llevaban reuniéndose. "El mundo quiere ser engañado; pues que lo sea", decía Petronio...
No pude contenerme y con voz segura dije a Amalia: "Creo que Ud. mueve el vaso"... Un mutismo invadió el ambiente, pero antes que los que allí presentes me increparan -supongo- la principal "inculpada" me respondió, tras reconocer el "éxito" que adquieren las comunicaciones vasográficas cuando ella participa directamente (¿), que: "Bueno... es que yo primero recibo en mi mente los mensajes y los manifiesto a través de la copa"... Todos los reunidos se miraron un tanto perplejos, y en algunos rostros -entre ellos el de su marido- ya se reflejaban cierta desconfianza. Yo, en un intento de suavizar aquel embarazoso instante, volví a interrogar a Amalia: "Si es así como Ud. dice, y teniendo esa supuesta capacidad mediúmnica ¿qué necesidad tiene de practicar la "oui-ja"? ¿Por qué no comunica directamente lo que le viene a la mente?..."
Su respuesta fue su propia "condena": "Si transmito directamente esos comunicados que vienen a mi mente ¿cómo iban a creerme los demás?...".
Ya todo estaba dicho... No obstante, traté de remediar, como mejor pude, aquella desesperante situación, citando ciertos casos de "paragnostas" que recibían mensajes psíquicos y que los descodificaban a través de la "oui-ja" o la "psicografía". No sé si sirvió esa explicación, pero aún así los ánimos seguían crispados. Tal vez fui muy atrevido, pero creo que actué correctamente e hice lo mejor que podía hacer...
Cuando nos fuimos, el amigo que me invitó a aquella sesión se disculpó ante mí por haberme llevado a aquella farsa que él, obviamente, desconocía. Le dije que no se preocupara, pues casos así suelen ser, por desgracia, frecuentes en estos temas... Él nunca podía sospechar de una mujer como Amalia, una señora seria y honesta donde las haya. Le aclaré que esa tendencia a la simulación mostrada por esa mujer no tiene porqué manifestarla en otros órdenes de la vida, salvo únicamente en ese contexto espiritista. Además, le repetí que posiblemente era verdad lo que decía Amalia de las "voces", al margen de que ella moviese intencionadamente la copa...
Cierto es que nunca sabremos si lo de las "voces mentales" fue una mentira de Amalia para disimular, en cierto modo, su implicación en el fraudulento movimiento de la copa, o si realmente, como ella confesó, "oía" voces en su cerebro dictándole mensajes que luego "revelaba" a los presentes a través de la "oui-ja".
¿Era Amalia una impostora? ¿Se trataba de una mentirosa patológica? ¿Sufría alucinaciones auditivas y trastornos disociativos? ¿O realmente conectaba su mente con otros "niveles de la realidad"?...
Sea lo que fuere, lo cierto es que en el ejemplo que aquí hemos expuesto de supuesta comunicación vasográfica, el epicentro - lejos de ser un "espíritu" - es, por enésima vez, el ser humano, ese gran desconocido...
Como ya advertía hace setenta años el sacerdote jesuita Carlos M. De Heredia, eminente investigador metapsíquico y descubridor de numerosos fraudes espiritistas, "en esta clase de experimentos entra un nuevo factor, el médium, el cual siendo humano y muy humano, hay que andarse con cuidado extraordinario para que dicho elemento no nos engañe". Sus palabras, hoy más que nunca, siguen vigentes. Tengámoslas muy en cuenta...
Notas:
(1) Para el lector interesado en saber más sobre esta clase de fraudes, le recomendamos el libro Los peligros del esoterismo, de Manuel Carballal (Ediciones Constrastes, 1995).
(2) El "mentiroso patológico" es definido como un sujeto que cree en sus fantasías y cuenta sus fábulas como si las creyera, con una tendencia persistente a mentir (Introducción a la psiquiatría, Dr. J. A. Vallejo Nágera, Edit. Científico/Médica, 1981).
(3) Consúltese el demoledor trabajo del psicólogo José Luis Jordán Peña, publicado bajo el título La oui-ja: ¿Cómo desenmascarar este juego? (Revista Psi-Comunicación, nº 33 - 34, Ene-Dic 91).
(4) Para ahondar en el fenómeno de la "canalización", también llamada "channeling", recomendamos la documentada obra Mensajes del más allá, de John Klimo (Edit. Martínez Roca, 1994).
(5) Los interesados pueden saber más sobre la memoria y el talento del inconsciente consultando El rostro oculto de la mente, de Oscar González Quevedo (Edit. Sal Terrae, 1971).
(6) Una obra que toca en profundidad y con rigor el papel que juega las facultades del inconsciente en las sesiones espiritistas es Fraudes espiritistas y fenómenos metapsíquicos, del Padre Carlos M. De Heredia, S. J. (Edit. Acervo, 1993).
(7) Dos interesantes artículos que advierten seriamente del peligro que encierra la práctica del mal llamado "juego del vaso" son Oui-ja: engatusando adolescentes y Atmósfera perversa, ambos de José Manuel Durán Martínez, y publicados en el Boletín Investigación nº 6 (Nov-Dic 1994) y nº 13 (Ene-Feb 1996), respectivamente.
La leyenda de la Ouija
Por J.M. Garcia Bautista y Rafael Cabello
¿Cuántas historias hemos oído o nos han contado acerca del "peligro" y misterios del famoso tablero denominado como Oui-ja? Son muchas las historias sobre los contactos con entidades de otros planos a través de éste famoso tablero y es mucha la leyenda negra que cubre la practica contactista a través del mismo.
Pero comencemos por el principio, la palabra Oui-ja parece venir de una extraña mezcla germano-francesa que nos da el propio término a definir. Oui (sí) y Ja (sí) son dos términos análogos en sus correspondientes idiomas y no es más que una rotunda afirmación...de ahí viene su nombre.
La Oui-ja es un tablero en el que se encuentran grabados y representados todos los caracteres del abecedario, numéricos y en un lugar preferente el SI y el NO. Este sería el tablero básico con el que se suele practicar la Oui-ja en nuestra sociedad y cultura, obviamente todo está sujeto a modificaciones y otros practicantes añaden frases para acortar el tiempo de formación del mensaje y hacer la sesión más rápida. Como guía o master se utiliza un tablilla acabada en punta o flecha ,una arandela o cualquier otro artilugio que pueda cumplir una función señalizadora. Nuestra Oui-ja hispana y casera más popular es aquella que se practica en la sala de casa, en nuestra propia mesa con el abecedario recortado en trocitos de papel y como tabla o gúia se utiliza un vaso, es el denominado "juego del vaso"...
La Ouija la suelen practicar -habitualmente- demasiados practicantes inexpertos, indocumentados y desconocedores de nuestra sociedad. Son muchos los que se adentran en éste enigmático mundo careciendo de un mínimo de conocimientos imprescindibles que puede hacer de la sesión de Oui-ja un auténtico trauma para sus participantes... practicar la Oui-ja puede llegar a ser muy peligroso -psicológicamente- si la sesión no es orientada por un experto y conocedor en la materia que calme los ánimos y la excitación de los concurrentes. Las sesiones de Oui-ja de practican normalmente en lugares muy tranquilos alrededor de una mesa y con un mínimo de cuatro participantes (pero es un poco a gusto del "usuario"). Se elige por norma general el salón del hogar o cualquier otra habitación tranquila, los más osados prefieren practicarla en lugares abandonados, cementerios y otros tétricos lugares que creen ambiente. También se suele practicar en lugares recogidos,recordemos la reciente película de "Los bosques de la Bruja Blair" con no demasiadas buenas consecuencias para sus participantes...
Los participantes deben de concurrir a las sesiones de Oui-ja con un mínimo de seguridad y confianza, no deben acudir con miedo y tomarse la sesión como un pasatiempo más, dejarse dominar por el supuesto contacto puede traer graves consecuencias...El número aconsejable de participantes suele ser de cuatro aunque a estas sesiones se puede acudir en calidad de Observador para aquellos a los que esta práctica contactista no les resulta grata o no desean inmiscuirse en dichos quehaceres.
A partir de este punto todo está libre de conjeturas... hay quien trata de "purificar" el ambiente quemando plantas aromáticas o incienso, hay quien invoca a los ángeles y santos guardianes o quien trata de hacer previamente una "rueda de poder" para cargar la estancia de energía positiva que cubra el lugar de protección con malas influencias y contactos.
El contacto, tras una relajación mental de sus participantes comienza con una pregunta, normalmente: "¿hay alguien ahí?" y si hay respuesta comienza el rondo de preguntas y respuestas entre participantes y entidad contactada. La tablilla se moverá indicando letra a letra el contenido final del mensaje... pero ¡cuidado! En numerosas ocasiones es cualquiera de los participantes el que de forma voluntaria/involuntaria -consciente/inconscientemente mueve la tablilla y desarrolla el mensaje, en este caso el contacto es un FRAUDE.
Conviene confeccionar un diario de incidencias de nuestras sesiones de Oui-ja para recurrir a él en caso de duda o si contactamos con diferentes entidades. Como dato reiterativo comentar expresamente que se debe de realizar las sesiones dirigidas por una persona experta en este tipo de vía contactista. Lo contrario puede resulta peligroso.
Siempre que se habla de la Oui-ja se habla como del tablero maldito, de los mil fraudes y se cuentan historias del mismo a caballo entre el amor y el odio...El caso más espectacular de Oui-ja (por sus nefastas consecuencias) fue el que afectó a una familia de Vallecas (Madrid) que vio como fallecía un miembro de su familia como resultado de una practica contactista con la Oui-ja. La persona fallecida inició la sesión junto a sus acompañantes cuando contactaron con una entidad muy poderosa que afectó a todos sus participantes e incluso creyeron ver extrañas formas...La chica en cuestión fue afectada por algo que se introdujo vaporosamente en ella y acabó tras una "larga" agonía... Tras el fallecimiento la casa quedó poblada por el espectro de la joven con una amargísima experiencia para su familia...
Como el caso anterior tenemos una gran variedad que no hace más que acrecentar la "leyenda negra" del famoso tablero...son ,sin dudas, las historias que más temor han sembrado entre los participantes y más miedos psicológicos han creado, miedos que luego se manifiestan de la forma más insospechada...
Por supuesto ,comercializar el famoso tablero estando el mismo al alcance de los mismos es una absoluta temeridad,del todo punto criticable e injustificable. Afortunadamente los niños parecen más preocupados de lo último de la Play Station que de este tablero... pero los gustos cambian.
Creer en la veracidad de los mensajes recibidos es una cuestión de fe ciega, cierto es que en un número elevado de ocasiones, la entidad contactada parece conocernos bastante bien, pero también puede que la entidad contactada sea en realidad uno de los participantes a la sesión. La Oui-ja no es ningún juego y tampoco debe de tomarse a broma aunque asistamos a ella como un juego, siempre es mejor asistir con esta mentalidad que con una elevada dosis de temor y miedo.En estos casos la propia sugestión hace que la ficción se convierta en dura realidad.
En estas sesiones se suele contactar con diferentes entidades, unas dicen ser espíritus desencarnados que tratan de comunicar algo a sus familiares, otras dicen ser entidades extraterrestres con claro contenido ecologista- pacificadora y en otras el contactado es una entidad de otra dimensión...
Pero en numerosas ocasiones el contacto se debe a un fraude, es decir a que el mensaje de la supuesta entidad es en realidad el mensaje de uno de los participantes o que simplemente la sugestión del mismo hace que psicoquinéticamente se mueva la tablilla...
Menos interesante es la que justifica el movimiento de la tablilla atribuyéndolos a los ángeles o a los demonios...
Nuestro caso comienza una calurosa tarde de un Domingo 27 de Febrero del año 2000. Cuatro jóvenes habían planeado una sesión de Oui-ja la noche antes en una casa de uno de estos chicos. Alguno de ellos había en alguna ocasión asistido a alguna sesión y participado en ella y decidió proponer la idea para practicarlo junto con sus amigos. Roberto, Juan Jesús, Miguel y Manuel decidieron probar esta nueva alternativa de diversión...
Juan Jesús guiaría la sesión dada su calidad de anfitrión (la sesión se practicaba en el domicilio de éste joven en la barriada sevillana de Los Principes) y debido a su "experiencia". El resto de los jóvenes acudía en calidad de participante junto con dos amigas (Mari Ángeles y Ruth) como simples observadoras.
Se comenzó a crear ambiente cerrando la ventana y persiana de la habitación (pese a la excesiva calor que ya hace en Sevilla), quemando incienso (muy típico en ésta ciudad por esta época pre-Semana Santa) y poniendo cuatro velas en los cuatro vértices del tablero. Y comenzó la sesión, tras unos minutos de relajación se comienza a preguntar sobre la presencia de "espíritus" en la habitación, tras dos fallidos intentos la tablilla se comienza a mover e indica la asistencia de una entidad muy poderosa llamada Balnodac, entidad que desde el comienzo del contacto demuestra un claro conocimiento de los participantes a la sesión y se caracteriza por unas fuertes y contundentes respuestas en la que no faltaba una gran dosis de blafemias e insultos. Los chicos entonces deciden concluir la sesión advirtiendo a la entidad que "si no moderaba su lenguaje lo mandaban a hacer puñetas a su lugar de origen" y sin más la entidad advirtió que de hacerlo sufrirían las consecuencias y morirían todos... No dispuestos a continuar con el contacto dan por finalizada la sesión y abandonan el tablero, normalmente se cierra la sesión pero en su caso "cortaron" la misma sin más. Dominado por un pánico terrible y muy sensibilizados por el comunicado deciden no pensar más en ello aunque interiormente el respeto que tenían al respecto era muy profundo.
Pasaron los días y mantuvieron el tema como una anécdota en el recuerdo, pero el día 3 de Marzo, dos de los participantes de dicha sesión sufren un grave accidente de circulación, Roberto y Manuel son atropellados por un automóvil...
El día 5 de Marzo, Miguel Ángel comienza a sufrir unas fortísimas fiebres que no bajan de 40º, la situación es muy peligrosa ya que no se sabe a ciencia cierta lo que le ocurre...
Ángeles y Ruth comienzan a decirle a Juan Jesús que se trata de la venganza de Balnodac y que por su culpa iban a morir todos ya que esto no había hecho más que comenzar... si a todo ello sumamos el pánico interior que todos sentían en su interior tras aquella sesión, la culpabilidad y arrepentimiento que todos sentían, que estaban dominados y afectados psicológicamente, las responsabilidades y culpabilidades que se lanzaban entre amigos, su propio miedo y estos desgraciados incidentes pues tenemos el coctel perfecto para que Juan Jesús cogiera una fuerte depresión y creyera que le estaba tocando el turno a él...
La familia se pone en contacto urgente con éste investigador y comienza a estudiar el caso y sus consecuencias, tras todo ello se dispuso a entrevistar largamente al joven afectado tras lo cual se obtuvo como resultado lo expuesto en el párrafo anterior, y tras un estudio de las desgracias de sus amigos se llegó a la conclusión que lo ocurrido a este grupo de amigos no fue más que producto de la imprudencia y de los efectos víricos que pueblan nuestro planeta azul... tan cargado de miedo como de superstición.
Roberto y Manuel tuvieron un accidente de tráfico como resultado de su propia inexperiencia como conductores y su temeridad. Ambos, en un Vespino, a altas horas de la madrugada y cargaditos de alcohol regresaban a casa a gran velocidad, saltándose todos los semáforos, no respetando ninguna señal, sin casco,dos en un ciclomotor no autorizado para elloy haciendo un circuito urbano de las calles de Sevilla. Cuando se saltaron un peligroso cruce, un vehículo impactó lateralmente contra el ciclomotros, apenas le rozó pero lo desequilibró lo suficiente como para que ambos "corredores" volaran hasta aterrizar en el duro asfalto. Como consecuencias: múltiples magulladuras, una pierna rota, un brazo roto, una mandíbula maltrecha, una clavícula rota, dos costillas rotas, fuertes contusiones y un terrible susto con varios días de hospitalización con observación. Con estos antecedentes y con la exageración de la gente casi describieron el accidente como si sus dos ocupantes estuvieran muertos (que pudieron haberlo estado si el impacto se hubiera producidos un segundo antes...) Ello influenció aún más en los ánimos del resto de los jóvenes.
Miguel Ángel sufría unas fuertes fiebres como consecuencia de una Mononucleosis que al parecer tiene como consecuencia precisamente la aparición de fiebres durante su padecimiento. Una vez hallado el problema y bajo la adecuada medicación el chico se restablece. De nuevo los comentarios exagerados y conociendo los antecedentes de la sesión quisieron apuntar a Balnodac como origen del problema.
Las chicas reconocieron junto a Juan Jesús a este investigador los terribles miedos internos que sufrían y el dominio psicológico que había ejercido el tablero y la sesión sobre ellos... su mente aún no está preparada para esto.
Una vez más, los comentarios exagerados, el tremendismo y negativismo, la "leyenda negra" del tablero y sus mensajes cubrieron de oscuridad su propia historia para sembrar las dudas, temor y crear un falso maleficio sobre estos jóvenes inmaduros que se dejaron arrastrar psicológicamente por el mensaje de la sesión... Se dejaron dominar y cualquier o situación contraria al grupo de amigos era convertido en la venganza de Balnodac.. el pánico se respiraba entre estos jóvenes que llevan marcado en sus caras los días de preocupación vividos.
Hemos podido comprobar como debido a la psicología del grupo y a su inmadurez lo que simplemente debía ser un pasatiempos se convirtió casi en una tragedia creada y relacionada por su propio subconsciente.. No es ni será el único caso parecido o similar a este que nos encontremos en nuestro discurrir y transitar por el mundo de la investigación de lo paranormal, a buen seguro habrá más...
Se puede contactar con entidades negativas; recuerdo ahora cuando mi compañero Rafael Cabello contactó con Technogec y les trajo fuertes dolores de cabeza... En otras ocasiones, como mis amigos del Grupo MAIA de contacto (del barrio sevillano de El Cerro del Águila), se contacta con supuestas entidades extraterrestres, al estilo del GEENOM con mensajes purificadores y pacifistas, cargados de esperanzas... En otras ocasiones contactamos simplemente con entidades que se dedican a contestar sin más...
No soy precisamente muy aficionado o experto al tema de la Oui-ja pero comprendo que como investigador debo de conocer TODOS los aspectos del mismo, de ahí la gran documentación sobre éste o mis muchas asistencia s como observador(casi un centenar) a los contactos de MAIA. Creo que en todo el camino de la investigación es un constante aprender en la que jamás se llega a ser un experto en nada pero a la vez se es alumno aventajado de todo... Como mi buen amigo Ignacio Darnaude dice: "siempre hay algo que aprender".
Como consejos prácticos a los que se inicien en las artes de la Oui-ja decirles que:
-Comenzar las sesiones guíados por un amplio conocedor del tablero Oui-ja.
-No permitir practicar a menores.
-Utilizar un vaso antes que materiales plásticos.
-Tranquilidad mental.
-No dejarse llevar por los mensajes de lo que debería ser un "juego".
Tal vez, acrecentando nuestros conocimientos sobre este polémico tablero que llamamos Oui-ja algún día podremos eliminar su "leyenda negra" y servirnos de él como una hipotética vía de contacto con otras entidades y dimensiones.
Han pasado muchos años desde que las hermanas Fox comenzaron con sus conocidas sesiones espiritistas, desde aquellos años (1847) mucho se ha evolucionado en las prácticas contactistas y mucho se ha descubierto en toda la trama del fraude y el engaño. El factor testigo , sus circunstancias y la psicología del participante hacen e incorporan nuevos elementos de estudio a la actividad y desarrollo paranormal del investigador. Las fuerzas del bajo astral, las fuerzas elementales, los desencarnados o los espíritus son entidades que moran entre los tableros de la Oui-ja pero quizás el verdadero peligro está -aún- dentro de nuestras propias mentes.