Daniel Jacob
(Publicado en la Revista Virtual Planet Lightworker de enero 2004)
ESTUVE CULTIVANDO AMISTADES recientemente con varias personas jóvenes que tienen muchas de las características descriptas en mi serie “Los Niños de las Estrellas”. El Espíritu simplemente los pone en mi camino y yo me conmino a prestar atención. Los dejo decidir por sí mismos qué “sabor” de MetaHumano desean ser (Cristal, Índigo, Místico, Niño de las Estrellas o lo que sea), o siquiera si desean que se los llame de otro modo que por sus propios nombres. Los Chicos de las Estrellas generalmente tienen una apariencia bastante normal, pero sus vidas interiores pueden ser una historia completamente diferente. Es por eso que tienen que estar muy pendientes para descubrirlos. Muchos son solitarios y no tratan de sobresalir en una muchedumbre. Una vez que se hace el contacto, necesitamos ganar su confianza para que se sinceren y nos digan más sobre esa rica realidad interna que poseen.
Los Chicos de las Estrellas están hechos de aquellos cuyo ADN fue “alterado” a través de conexiones conscientes y patrones genéticos que se originan fuera de nuestra “caja” tridimensional normal. Cuando están totalmente despiertos, los Niños de las Estrellas tienen la capacidad de “conectarse”con una especie de conciencia colectiva – similar a lo que se observa en las ballenas y los delfines.
ACTITUDES HACIA LOS ADULTOS
Jake es un joven que recientemente me habló apasionadamente acerca del día en que comenzó a entender algunos hechos perturbadores respecto al mundo de los adultos. Dijo:...
“¡Finalmente comprendí que la mayoría de los adultos son sólo niños grandes! Muchos de ellos no saben lo que hacen más de lo que sabemos nosotros. Sólo tienen formas más elaboradas de pretenderlo y más recursos para crear sus ilusiones de control.”
Cuando lo escuché, en mi mente apareció de inmediato “El
Mago de Oz”, y esa escena en el salón del trono, donde los cuatro amigos se
hallan ante El Gran y Poderoso Oz. Aunque del trono se alzan lenguas de fuego y
nubes de humo, el perro Toto las atraviesa y corre una pesada cortina,
revelando a un viejecito que está hablando por un micrófono y manejando sus
artilugios para hacer que el salón del trono sea tan asombroso.
Pronto se hace muy claro que “El Gran y Poderoso Oz” en
realidad es un pequeño viejo que está asustado y lejos de su hogar. No puede
recordar cómo escapar del sueño... así que alza esa fachada para mantenerse a
salvo, incluso mientras de paso se gana unos cuantos pesos para poder pagar el
alquiler. Las Industrias, los Gobiernos, los Tiranos y las Autoridades Locales
nos demuestran, de muchas formas, cuán perplejos están por lo que está
ocurriendo en este momento en la Tierra. ¿Por qué no lo dicen, simplemente,
para que todos podamos acometer la tarea de resolver las cosas?
La nueva y excepcional película, “Jinete de Ballenas” habla sobre los crecientes dolores, pruebas y tribulaciones de las Tribus Maoríes de Nueva Zelanda. La historia se centra en las luchas que hay entre la generación más vieja, las antiguas tradiciones, y las personas más sabias, más jóvenes, que están entrando en escena en este tiempo. Explora la discriminación sexual, la discriminación de edad y pone de relieve cuál es realmente la voluntad de los “antiguos”. Ya no debemos proteger más el status quo. Las cosas están en movimiento y no debemos resistirnos a la marea. A los que les encanten las historias acerca de los Niños de la Nueva Tierra les gustará ver qué tal es esta película.
SISTEMAS EDUCATIVOS
Otro recién graduado de la secundaria me contó una
divertida historia sobre un muchacho en su escuela que se las arregló para
persuadir a todos sus compañeros para que organizasen una protesta contra el
(diabólico) examen W.A.S.L.*, aquí en el Estado de Washington (incluso la
mayoría de los maestros lo odian)... al estimular a cualquiera que tuviese que
dar esa prueba a hacer dibujos en sus hojas de examen en lugar de escribir las
respuestas a las preguntas. Sugirió que dibujasen las cosas que les gustaban
hacer, quiénes eran ellos realmente y qué estaban sintiendo internamente. Me
dicen que ese chico fue la comidilla del colegio. El Principal estaba tan
enojado que puso en escena un simulacro de inquisición para descubrir quién había
sido el instigador de la broma. El Gobernador de Washington, Gary Locke, fue al
colegio y habló duramente a los estudiantes sobre el asunto, diciendo: “¿Saben
lo que han hecho aquí?” (Estoy contando esta historia exactamente como me la
relataron, desde la perspectiva de un estudiante).
Sí, Gobernador Locke, pienso que ellos lo saben. ¡Estos
chicos estaban tomando su ultra-sofisticación y sugiriendo un modo mejor! Una
vez más, están rechazando la idea de ser comparados y clasificados como trozos de
carne. Así como hizo ese viaje a la escuela, tal vez querría tomarse tiempo
para examinar (de un modo interesado, amistoso), el modo de pensar de ese
jovencito que tuvo la capacidad de darles un giro a las actitudes de toda una
escuela. Usted hubiese ganado un valioso aliado en su búsqueda por abrir líneas
de comunicación más firmes.
En definitiva… el estudiante “líder” permaneció anónimo
hasta después de la graduación, cuando tenía el diploma en la mano. Entonces, y
sólo entonces, se reveló su identidad.
Nos maravilla como algunos estudiantes de secundaria se
pasan el tiempo inventando virus que detienen a la industria y dejan sin
trabajar por días y días a cientos de miles de empleados. Será que están
tratando de decirnos: “¡Eh! ¡Están pasando por alto enormes recursos aquí,
mientras corren por las ruedas de hámster de su vida!” Sin duda alguna, crear virus en computación
NO es la forma de producir cambios. Ni lo es detener el tráfico en un puente
durante las horas pico para protestar porque el Presidente Bush envía tropas a
Irak. Pero esos chicos encontrarán la forma de que se los escuche. Podemos
esperar que intenten casi todo hasta que se les dé un foro propio adecuado.
Necesitan una audiencia para sus interesantes puntos de vista.
Mientras contemplaba el rostro de este chico de 19 años que me contó la historia sobre el W.A.S.L., me resultó claro que este instigador se había vuelto algo así como el príncipe de esa escuela. Se lo describió como un ratón de biblioteca (pero brillante), y se enfatizó que él no quería imponer su inteligencia sobre otros chicos. Por el contrario, era bastante sociable. Tenía un carisma increíble y siempre hacía lo que estaba en sus manos para ayudar a alguien si podía.
CAPAS DE PROTECCIÓN
Teniendo en cuenta que estoy enfrentándome a seres muy
alertas e inteligentes, le pregunté a un joven sobre su propia experiencia de
“despertar” al espíritu mientras todavía residía con su familia de origen.
Cualquiera que haya considerado el material “Vagando en el Desierto” de los
artículos de “Los Niños de las Estrellas” sabe que nosotros, los Baby Boomers,
tuvimos que vérnoslas con montones de ridiculización y negación en nuestra
época, respecto a todo ese “conocimiento secreto” que poseemos. Finalmente, se
nos hizo obvio que si íbamos a sobrevivir en este mundo, tendríamos que olvidar
algunas de esas cosas profundas que sabíamos.
Los Niños de las Estrellas están aquí para recordar. Para
ellos, olvidar ya no es más una opción. La energía en el planeta está demasiado
alta para eso. Y aún así, hay muchas áreas de conciencia tiernas que pueden ser
dañadas permanentemente si se las expone a la intolerancia por demasiado
tiempo. Jake simplemente aprendió a camuflarse a sí mismo (lo llama “cambio de
forma”) para no tener que enfrentarse demasiado personalmente con “los de
afuera”, aquellos amenazados por quién o
qué es él.
“No me atrevo a mostrar debilidad muy a menudo”, dice. “Si
lo hago, las personas que me rodean tienen a explotarla y usarla como un medio
para involucrarme en sus juegos”.
Envolverse en un manto de caos funciona muy bien en lo que
hace a esto. Jake dice que toda vida es realmente sólo un mar de caos. Aunque
está en la naturaleza humana encontrar significado en las cosas, esas
definiciones realmente son constructos propios de cada persona.
Jake dice: “Todo lo que nos rodea son energías al azar,
haciendo lo que sea que tienen que hacer. Es natural que las personas le
asignen un “orden” a lo que ven, pero esas estructuras también son bastante
variables. Es su creencia en ellas las que las hace parecer más “reales”que
todo lo demás. Parece que hoy en día las personas necesitan tener una razón
para sentir las cosas. Han creado un conjunto de condiciones que deben cumplir
antes de poder experimentar alegría, enojo, o antes de poder tener paz. Pero en
realidad, las experiencias siempre están disponibles si simplemente elegimos
dejar que ocurran. No necesitamos una razón para ser lo que queremos ser.
Podemos simplemente elegir serlo.”
Como de costumbre, esta clase de conversaciones me deja
mucho en qué pensar. Por favor, siéntanse en libertad de contactarme con
cualquier reacción, refutación, a estas ideas. ¡Todos estamos aquí para
compartir, aprender y crecer! Habrá más conversaciones.
* ¡El
"Washington Assessment of Student Learning" (W.A.S.L.) sólo les gusta a los administradores!
Es como un examen para la mente. Los maestros nos dicen que pasan más tiempo
preparando a sus estudiantes para el WASL que el que le dedican a la enseñanza.
Lo aborrecen quienes se preocupan por los chicos. (DJ)
UNO DE MIS JÓVENES AMIGOS DE LAS ESTRELLAS me
dijo recientemente que hoy en día las personas de más edad parecen estar
buscando algún tipo de Repartidor (Deliverer).
En las conversaciones digitales, en las carteleras de anuncios, en pequeños
grupos o en las conversaciones personales,
hay un enorme culto al héroe, como si alguna Figura Crística fuese a
surgir en cualquier momento para conducir a la gente a la tierra prometida.
Muchos de los Baby Boomers enterraron sus dones internos en épocas
tempranas, suprimiendo e ignorando la necesidad de desarrollar el genio
personal que llevan en su interior. Muchos eligieron la seguridad y la
“normalidad” en lugar del crecimiento personal y la individualidad.
Hoy en día los chicos no desean hacer este compromiso. Y si
creemos que estas nuevas oleadas de Meta-Humanos van a permanecer al margen
para siempre, esperando que les entreguemos las riendas de la sociedad, estamos
equivocados. Los que están despiertos saben que el único “Repartidor” que
necesitamos todos está localizado justo dentro de nuestros propios corazones. Y
es así que ellos están firmemente enfocados ahí. Una Jovencita de las Estrellas
de la selva peruana terminó la carta que me dirigiera con lo que parecía un
error en su inglés. Me enviaba mucho amor, y luego agregaba: "From my
hearth to yours!" (“¡De mi hogar (chimenea) al tuyo!” en vez de “¡De mi corazón al
tuyo!”) Me detuve un minuto y luego comprendí que ella simplemente estaba
aludiendo al fuego interior que estos chicos llevan dentro de sí.
¿CREES QUE ESTOY LOCO?
Muchas personas jóvenes que leen estos artículos me envían
cartas largas y sabrosas sobre la riqueza de su vida interior. Eso me encanta.
Al final de algunas de esas cartas hay una pregunta que me es familiar. Me
preguntan: “¿Crees que estoy loco?” Eso me parece estupendo, aunque ellos
parecen ser bastante serios.
Una jovencita de la Costa Este escribió: “Nací el 1 de
enero de 1974. Mis padres nacieron los dos en 1953, ambos son sumamente
intelectuales y espirituales. Mi Papá cree que todos los de 53 años son Niños
de las Estrellas (todavía tengo que explicarle respecto a los Mayores de las
Estrellas) y Mamá piensa que es una extraterrestre. No tuvo náuseas ni mareos
durante el embarazo, ni estrías ni dolores de parto y en realidad estaba
durmiendo cuando nací. Soy su única hija y la mayor de mi Papá. Ellos sólo
permanecieron juntos el tiempo suficiente para engendrarme.
Ninguno de mis padres habla mucho de lo que saben, así que
mi vida ha sido realmente una búsqueda solitaria de mi identidad. Siempre fui
única, pero no tanto como para no ser una persona popular. Últimamente, me
dijeron que hablo con las personas más como Consejera que como amiga. Tengo la
apariencia de saberlo todo y personalidad, así que las personas generalmente
vienen a mí por apoyo, pero en realidad yo no sé nada. A los 19, me apareció un
gran lunar en la frente justo entre las cejas. La gente lo llama mi tercer ojo.
A los 15, mientras caminaba con algunas amigas, una mujer
de cara adusta que nunca había visto antes vino a mí y me dijo: “No sigas a tus
amigas. Me gusta hablar con Dios y tú eres la elegida.” Por supuesto, creí que
ella estaba loca. Basándome en esto y en otras experiencias de vida, creo que
es posible que Dios me haya elegido para servir un propósito específico, pero
también siento que puedo estar clínicamente insana y que ésa puede ser la causa
de mis ilusiones de grandeza. Voy a cumplir los 30 en unas pocas semanas y
nunca estuve en un estado de mayor confusión. Pasé momentos difíciles
enfrentando mis emociones e incluso lo básico de expresarme a mí misma.”
No sé, amigos míos. ¿Tiene problemas para expresarse esta jovencita? Yo no puedo ver ninguno. Según mis oídos, canta como un pájaro. Pero tengo bien en cuenta que está hablando de cosas que generalmente no tienen lugar en nuestro mundo cotidiano “normal”. Ésa es la parte que la hace sentir que está loca. A mí me parece que un diagnóstico de “locura” simplemente significa: “No comprendo qué te está pasando”. Tiene más que ver con la sociedad que con la persona involucrada.
Ser distinto no es una enfermedad
¿No sería más fácil decir solamente eso en lugar de querer
dar un diagnóstico o encasillarlos para describir lo que pensamos que está
sucediendo? Generalmente, los médicos no entienden a estos chicos y les echan
la culpa. Proclaman: “No puedo
comprenderte, así que debes estar loco”. (En realidad, el término que se
utiliza es “con trastornos de conducta”.
Cuando nos tomamos tiempo para otorgarle autoridad y respeto al estado mental de cada persona, les abrimos algunas puertas a ellos y a nosotros mismos. Comenzamos a reconocer que el Velo que separa nuestro mundo tridimensional de otras formas de realidad ahora se está afinando, lo que permite acceder a estados del ser y sentimientos que son bastante distintos de los que conocíamos hasta ahora. Quienes se vuelven conscientes de estos estados no necesariamente están enfermos. Muchos de ellos en realidad son bastante talentosos.
Hay algo en esos ojos
Uno de los elementos que más categóricos acerca de muchos
Niños de las Estrellas es la apariencia poco común de sus ojos. Es como si
pudiesen ver a través de uno. Esto es especialmente llamativo cuando se observa
a un bebé o a una criatura. Algunos Chicos de las Estrellas nacen “despiertos”.
Ellos ya recuerdan de dónde vinieron y están claramente en contacto con lo que
vinieron a hacer. Para que esto suceda es necesario que su entorno continúe apoyándolos
en sus necesidades y poderes, y que sus padres aprecien y honren la
sensibilidad que conlleva estar plenamente despierto durante este momento de la
historia de la Tierra.
Hablé con una Chica de las Estrellas que había soportado
muchas golpizas en su vida debido a ese “asombroso saber” que reflejan sus
increíbles ojos. Cuando las personas creen que uno puede leerles los
pensamientos, uno no siempre les cae bien.
Ella también tuvo que soportar en su vida “los viajes interiores” y
lapsos de tiempo perdido. Una investigación más exhaustiva de esas experiencias
hizo que descubriese recuerdos de haber sido “manipulada” por Seres que venían
de otros mundos y/o dimensiones. Y aún así, con todo el trabajo interior que
hizo, todavía hay muchos aspectos de ella misma que aún no comprende.
El año pasado, Steven Spielberg le regaló al mundo una
miniserie en diez capítulos llamada “Taken” (Poseída). Encara el tema de la
intervención extraterrestre en los asuntos terrenales, especialmente esos
experimentos que involucran la cruza de Visitantes Estelares y Humanos. En los
últimos segmentos de esa serie nos presentan a una niñita mágica llamada
“Allie” (caracterizada maravillosamente por Dakota Fanning). ¡Cuando la vi, el
Alma Grupal de los Chicos de las Estrellas con la que estoy en contacto desde
1997, literalmente saltó de alegría! Los que estén interesados en este tema se
sentirán muy estimulados si la ven.
Este año pasé mucho tiempo estudiando el Factor
Extraterrestre en la Conciencia Humana. Ahora estoy convencido de que mucha
gente sufre bajo el peso de una mitología definida que creció en torno a este
tema. Cuando veo las películas de ciencia-ficción que se produjeron, así como
los relatos históricos que brindan las personas, afirmando la existencia de
OVNIS y Visitantes Estelares, puedo comprender por qué hay tantas personas que
preferirían no tocar ese tema.
Y sin embargo, creo que ahora la humanidad está siendo
cambiada por energías y seres que tienen su origen fuera de nuestro universo
conocido.
¡Definitivamente, se está haciendo “Contacto”! Cómo se lo
percibe y la forma que toma depende en gran medida de las personas
involucradas. En otras palabras, las personas tienen la tendencia de ver
aquello que quieren o necesitan ver. Yo no soy quién para cuestionarlo, ni es
mi obligación creérmelo todo tampoco. Es un viaje personal.
A través de la historia, la gente se refirió a estos
visitantes como Dioses, Ángeles, Devas, Duendes, Hadas, Hombres del Espacio
Exterior y un montón de términos más. Algunos quieren rendirles culto y algunos
desearían verlos muertos. Los Niños de las Estrellas vienen ahora como
intermediarios, como una Conciencia Puente, para armonizar y estabilizar la
intensidad de este contacto que llega. Pero primero, necesitan tiempo y espacio
para despertar.
En tanto los Niños Cristal resuenan fuertemente con la
energía de la Madre Tierra, los Niños de las Estrellas expanden su conciencia
naturalmente para abarcar la perspectiva del Padre Cielo. Ambos subconjuntos de
los Nuevos Chicos traen en sí muchas de las características de la misma
familia. Las Estrellas son simplemente Cristales que centellean en el cielo.
Los Cristales son simplemente Estrellas que fueron plantadas profundamente en
la Tierra. Cada uno tiene un trabajo específico que hacer.
Estoy encantado de seguir esta investigación y entregarles
algunas de estas historias a ustedes. Si alguno de ustedes halla información
que le parezca útil, o si tiene puntos de vista adicionales para contribuir a
este estudio, por favor, pónganse en contacto conmigo. Apenas hemos comenzado a
arañar la superficie de este vasto almacén de poder y sabiduría humanos. No
puedo esperar a ver adónde irá eventualmente todo esto.
EDUCANDO A LOS EDUCADORES
Últimamente estuve leyendo bastante sobre el Trastorno de
Déficit de Atención y otras condiciones comunes que pueden aparecer en la vida
de nuestros queridos Niños de la Nueva Tierra. Mientras los psicólogos y
directores de escuela siguen ayudando a nuestros chicos a “socializar” en el
entorno educativo actual, observo con gran interés (y divirtiéndome bastante).
Es como si un lienzo vacío tratase de agarrar el pincel para enseñarle a un
eximio artista cómo pintar. Sin embargo, estamos en tiempos de transición y estoy
en favor de celebrar la excelencia cuando la veo. Y sí, amigos, hay excelencia
en nuestras escuelas y en los grupos de transición para la Nueva Generación.
Mientras escribo, mi mente retrocede a esa escena en la
película “Powder” (Polvo) donde un jovencito increíblemente talentoso se
encuentra ante un grupo de consejeros escolares y administradores que acaban de
revisar el puntaje estandarizado de sus exámenes.
El Director de la escuela lidera la discusión y ciertamente
parece ser un tipo bastante pomposo. Le dice a Powder (un apodo que le dieron
al chico debido a su piel increíblemente blanca): “Del puntaje de sus exámenes
aquí, hemos llegado a la conclusión de que usted debe ser el intelecto más
desarrollado que haya caminado alguna vez sobre la Tierra.” El chico se queda
ahí, silencioso. El Director lo mira de arriba abajo y dice: “¿Usted entiende
lo que le estoy diciendo?”
Powder no vacila. Contesta: “Si usted pensase realmente que el puntaje de esos exámenes le habla de mí, cree que necesitaría hacerme esa pregunta?” Entonces descalabra la fachada puesta por el grupo. Les dice: “Ustedes están hoy aquí para descubrir cómo hice para copiarme en el examen.” Y empieza el juego. Es una película maravillosa. Es una de esas películas que “no tienen que dejar de ver” los que aman a los chicos, y especialmente a nuestros Chicos de las Estrellas.
Sustancia, no Apariencia
Una de las características primarias de nuestros niños de la Nueva Tierra es su total falta de atención a esas grandes zanahorias que los adultos siguen sacudiendo ante ellos, mientras intentan que nuestros chicos se comprometan con la sociedad. Los sobornamos con buenas notas, juguetes caros, premios e insignias por mérito, y un montón de otras cosas superficiales. El director en la historia de arriba se quedó mudo cuando Powder no se impresionó porque lo llamase “el intelecto más desarrollado de la Tierra.” Se preguntó si el chico lo había escuchado apropiadamente o no. Todo lo que Powder pudo decir fue: “¿Y qué?”.
Nuestros Nuevos Chicos se preocupan más por su interior y
se interesan menos en lo externo. Ellos valoran mucho más cómo se sienten, qué
piensan, y qué creen (personalmente) de lo que valoran cómo los ven los demás –
cuán “importantes” son a los ojos del mundo. Por supuesto, todavía hay muchos
Chicos de las Estrellas que tienen adormecida la percepción. Se comportan como
perros de Pavlov en este medio ambiente porque todavía no se conectaron con su
esencia. Y para ser justo, algunos de nuestros hijos son sólo niños. Están aquí
sólo para trabajar en el sistema tal como es actualmente. Yo no me hago
problema por eso, pero tengo un gran interés en los que no se adaptaron tan
fácilmente.
El tema de “sustancia, no apariencia” es explorado de una
forma bastante bien lograda en la película “Good Will Hunting”, que cuenta la
historia de un brillante jovencito criado en un orfanato de los barrios bajos
de Boston Sur.
Will Hunting (protagonizado por Matt Damon) es un genio de
la matemática y puede solucionar teoremas matemáticos increíblemente avanzados
en un abrir y cerrar de ojos, escribiendo en el dorso de su mano. Es
descubierto por un Profesor del Instituto de Tecnología de Massachussets
trabajando como conserje para la escuela. . El maestro también es brillante y
se toma muchísimo tiempo para examinar los dones y la perspectiva expandida de
este jovencito perturbado.
Para ser justos, el Profesor Gerald Lambeau (protagonizado
por Stellan Skarsgaard), parece preocuparse realmente por lo que le suceda al
muchacho. En lugar de dejar que lo encierren por cargos de asalto (Will parece
haberse convertido en un buscapleitos en su momento), el maestro trata de
hacerse cargo de Will personalmente, viendo que encuentre trabajo, un lugar
cómodo para expandir sus habilidades y para encontrar formas de que se
reconozca su genio. El chico se rebela. ¿Qué le importa ser conocido o
respetado en la Comunidad Matemática Mundial?
Es capaz de resolver problemas de matemática que sólo cinco personas en
el mundo pueden comprender. Pero interiormente, Will todavía está aterrorizado
por el abuso infantil en los hogares sustitutos en los que creció. Es brillante
y desdichado.
El proceso de exploración finalmente hace que encuentre un
Consejero que pueda manejar a un potrillo agudo, inteligente y sabihondo como
Will. Ahí es donde entra en escena Robin Williams – haciendo del Psicoterapeuta
Sean McGuire- quien hace una caracterización que hizo que lo quiera la gente en
todo el mundo. Lenta, seguramente, Sean consigue atravesar las defensas de
Will, usando un comportamiento sencillo, amistoso y con buena onda. A medida
que su relación crece en la película, comenzamos a tener la nítida sensación de
qué es lo que se necesita para llegar también al corazón a nuestros Chicos de
las Estrellas que están viniendo.
El conflicto continuo entre el Profesor Lambeau y Sean
McGuire es un choque de intereses que está apareciendo hoy en día en todo el
mundo. Sólo empeorará a medida que el resto de nuestros Niños de las Estrellas
comience a despertar. El Profesor reconoce el genio de Will y trata
desesperadamente de conseguir promoverlo en el mundo profesional, en tanto el
personaje de Robin Williams lucha duro para volver a conectar al chico con su
alma dañada. Ambos tienen un genuino interés en ayudar al muchacho. Pero el
Profesor parece estar tratando de colocar el carro delante del caballo. De
muchas formas, eso también ocurre hoy en día en nuestras instituciones
educativas.
Vemos “valores” en nuestros chicos y queremos explotarlos.
¿No tendrían que estar contentos de que tengamos ganas de tomarnos tiempo para
hacerlos ricos, famosos e influyentes? ¿No tienen ellos un nombre para eso? Sí,
creo que sí. Se llama el “Síndrome McCauley Culkin”.
De muchas formas, todavía no hemos recibido el mensaje que
nos diera un amado y antiguo poeta, Kahlil Gibran.
“Tus hijos no son tus hijos. Son los hijos e hijas del ansia de la Vida
por sí misma. Vienen a través de ti, pero no de ti. Y aunque estén contigo, sin
embargo, no te pertenecen. Puedes darles tu amor, pero no tus pensamientos.
Porque ellos tienen sus propios pensamientos. Puedes albergar sus cuerpos, pero
no sus almas. Porque sus almas moran en la casa del mañana, la que tú no puedes
visitar ni siquiera en sueños.”
Muchos padres tratan a sus chicos como a posesiones... y en
esta cultura, es lo que son. Los juzgados lo ven así, en primer lugar para
asegurarse de que los que dan a luz a humanos sean responsables de su cuidado
una vez que estén aquí. Nuestros líderes no quieren que nuestro gobierno se
tenga que hacer cargo de miles, incluso millones de chicos abandonados por sus
padres. Y por eso tenemos leyes. Y esas leyes colocan la responsabilidad del
cuidado de los niños directamente en las personas que los trajeron al mundo.
Tiene sentido, ¿correcto?
El problema es que donde reside la responsabilidad, también reside la autoridad. No se puede demandar responsabilidad por el cuidado de algo (o alguien) y no hacer que la autoridad vaya con ella. Y así, por todo el mundo civilizado, hay niños que literalmente están esclavizados por los deseos/caprichos de sus padres naturales. Muchos de ellos son tratados como “pertenencias”. Es lo que eran técnicamente durante la época del Renacimiento. La palabra se escribe igual que “ganado”, con una letra de diferencia (chattel, cattle), y eso es exactamente lo que parecen ser en la actualidad al pasar por nuestro sistema educativo. ¿Es de sorprender si al final parece que algunos de los chicos más brillantes tienen “el mal de la vaca loca”?
El Chico de las Estrellas Abuelo
Tengo un querido amigo, al que me referiré llamándolo
“Abuelo” Su nombre es Carl. Tiene 85
años, parece de 60 y actúa como si tuviese mucho menos que eso. Fue
Quiropráctico por más de 50 años, lapso en el que desarrolló una técnica de
sanación asombrosa que es una síntesis de Masaje, Quiropráctica y algo que
nadie escuchó o vio antes. Las manos del Abuelo Carl se expanden y extienden como cangrejos gigantes aunque se
las sienta suaves y protectoras. Cuando las coloca sobre uno, ellas buscan a
través de cuerpo y alma, trayendo consigo la sabiduría y poder de muchos años
de cuidados y entrenamiento en la sanación, así como siglos de preparación para
hacer de él la persona en la que se
convertirá.
En meditación, al Abuelo le dijeron que comenzaría a hacer
su mejor trabajo a los 80 años. Él espera vivir hasta los 112. Es fuerte y está
lleno de energía, sin embargo puede domesticar a los pájaros y hacer que dejen
el árbol y vayan hacia él. Creció en una granja y se le impidió ir a la escuela
pública hasta los 9 años. El padre de Carl solía estarle encima con la palmeta
o un cinturón y le pegaba si no resolvía correctamente sus ejercicios de
álgebra. ¡Era una escuela hogareña infernal!
Su madre solía chillarle al padre:
“No le enseñaste lo básico. ¿Cómo esperas que sea capaz de hacer
ejercicios de álgebra?” Al padre no le importaba. Escuchar esta historia me
recordó el slogan chistoso que alguien puso una vez en el comedor de la
oficina. Decía: “Aviso de la
Gerencia: Las golpizas continuarán hasta
que mejore la moral.”
A los 9 años, Carl finalmente llegó a la escuela pública.
No tenía ni idea de cómo se suponía que actuase alguien en ese medio. Él era
grande y un poco torpe y se sentía extremadamente tímido. Estaba atrofiado
académicamente, pero sin embargo sus maestros seguían empujándolo a través del
sistema, esperando que las cosas mejorasen.
Lo que finalmente ocurrió fue que Carl comenzó a pelearse
todos los días luego de clases. Tanto así, que los chicos lo esperaban y luego
lo seguían a su casa buscando camorra. El Director lo hacía responsable a Carl
por el problema porque tenía más edad y era más grande que los otros chicos. Le
ordenó al muchacho que se fuese de la escuela a su casa tomando un camino
distinto al de los demás. Carl accedió. Pero a los cuantos días, los demás
chicos cambiaron de calle para ir a casa y así poder seguir a Carl hasta su
casa y continuar provocándolo. Las cosas
fueron de mal en peor.
Finalmente, un día, una maestra inteligente (en una nueva
escuela) estaba en el proceso de escoger monitores. Conocía la historia de Carl
y decidió intentar algo nuevo. Lo eligió como monitor del patio de juegos, a
cargo de asegurarse de que los demás chicos estuviesen a salvo. Le enseñó cómo
hacerlo y le dio un banderín que proclamaba su autoridad limitada en el patio
de la escuela. Entonces lo atrajo a su lado y dijo: “Carl, tú eres más grande e
inteligente que los demás chicos. Me di cuenta de eso y me gustaría ayudarte a
desarrollarlo. Quiero que hagas todo lo que puedas para mantener a salvo a
estos chicos y que te asegures que haya armonía en el patio de la escuela.”
Esta nueva “promoción” transformó absolutamente al muchacho. Finalmente tenía
un “lugar apropiado” definido y, sin embargo, totalmente suyo.
El Abuelo y yo estábamos hablando recientemente de los
sentimientos y actitudes que traía desde los días de su educación. Le di el CD
de los Niños de las Estrellas para que lo examinase y me dijo que se
identificaba con una buena parte de lo que escuchó ahí. De hecho, llegó a decir
que no estaba de acuerdo para nada con la idea de declararse un “Mayor de las
Estrellas” Dijo que “la edad” y “la cronología” no siempre son el tema
principal detrás de la clasificación de las personas mientras desarrollan su
espíritu. Yo sonreí, porque eso es justamente lo que dicen Las Reconexiones en
su transmisión “Los Niños de la Unidad”.
Durante años, Carl se sintió degradado por esos años que
fue a la escuela pública. Luchó por estar a la par de la franja de su edad y
apenas logró pasar por la Universidad de Quiropráctica. Pero su fe y
determinación hicieron que todo sucediese.
Hubo épocas en que lamentó no haber podido ir a la escuela
pública hasta la edad de 9 años. Le recordé que todas
las cosas son perfectas y que somos creadores de todo lo que nos sucede.
Repentinamente, mientras hablábamos, vi que penetraba una gran luz en los ojos
del viejo. Me dijo: “¿Crees que es posible que yo haya creado no ingresar a la
escuela pública a tan temprana edad para poder protegerme?” Algo en mí asintió,
aunque yo quería que él elaborase más lo que estaba pensando.
El Abuelo continuó: “A todos esos chicos les enseñaban cómo
pensar, actuar y relacionarse entre sí a esa temprana edad. A mí no me enseñaron
nada de eso. Pasé el tiempo en la granja. Y hasta ahora, tengo mi propia forma
de pensar, actuar y relacionarme, la que me sirvió bien toda mi vida.” Mientras
hablaba, pude ver que se sacaba un gran peso de encima de esos hombros de 85
años. Lo que una vez consideró era una de las cosas que más lamentaba, ahora
Carl lo veía como un milagro encubierto.
Sus formas establecidas le servían de veras. Y todavía les
sirven a un montón de personas en el planeta en este momento. Cuando pienso en
esta historia y la reformulación de esa forma de pensar, me alegro
interiormente. También agradezco a esa maestra inteligente que en el momento
oportuno de la vida de este muchacho, se las arregló para convertir un déficit
potencial en una gran ventaja. El adagio todavía sostiene: “Si tu hijo es un
fuera de la ley, trata de darle una insignia.” Como tan bien dijesen en uno de
nuestros foros últimamente: “Las personas que atemorizan o se rebelan, muchas
veces sólo están frustradas. Están solas y están buscando maneras de conectarse
con los demás. Sencillamente, no saben cómo.”
Creo que este
artículo viene a equilibrar un poco algunos de los otros que escribí.
Veo que ahí afuera hay un montón de muy buenos profesionales que están haciendo
mucho bien, son el “equipo de transición” para nuestros Chicos
de
las Estrellas
que despiertan.
Todavía están atrapados en
”el aprendizaje de una sola vía”, pero algunos de ellos
están haciendo que sea menos doloroso y ayudan todo lo que pueden. Hablaré más
al respecto próximamente.
Ahora veo que la educación es una vía de dos manos. A
veces, es difícil decir quién es el maestro y quién es el estudiante.
Ciertamente, yo no abogo para que desechemos lo que tenemos. Sería un desastre
y ya hemos tenido suficientes. Más bien, veo un ejército de grupos de ayuda
para-profesional surgiendo por todo el mundo. Estamos comenzando a construir
nuestras “Familias del Corazón”. Poco a
poco, la humanidad está comenzando a convertirse en una Nave Colectiva que va
en un sentido nuevo e interesante. Esta vez, incluso parece que podremos evitar
chocar contra ese iceberg, después de todo. Esperemos y veamos.
Es bienvenida toda retroalimentación o instrucción que
cualquiera de ustedes quiera brindarme a esta altura. Cuando me escriban, por
favor háganme saber si tienen objeciones a que imprima toda o parte de su
carta, y si es así, si les gustaría que la convirtiese en anónima. Hasta
entonces, mantengamos ardiendo ese aceite de medianoche... y la luz en la
ventana de nuestra mente.
© Daniel Jacob, febrero 2004. daniel@reconnections.net
(escribir en inglés) Reservados todos los derechos. Puede ser copiado y
compartido para crecimiento espiritual y/o investigación. Toda reproducción con
fines de lucro, por cualquier medio, requiere del permiso escrito de
Reconnections, Inc.
Traducción: Susana Peralta
Daniel Jacob en español: www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm