martes, junio 28, 2022

Profecías Absurdas

Pedro Callegari

El 11 de septiembre del 2001, comenzó la cuenta regresiva para los habitantes del planeta. 

El 7 de octubre del 2001, los países más poderosos inician el ataque contra aquellos que consideran terroristas. Pero esta parte de la historia comenzó mucho antes, quizás cientos de años atrás, sin América descubierta por España. 

Una permanente recurrencia de acción y reacción es la existencia del hombre, pero más allá de esto existe algo poderoso que lo motiva a entrar permanentemente en conflictos y guerras. Es un designio o una falla de construcción de sus emociones que lo motiva a desarrollar el ejercicio del poder en todas las formas posibles. Ambas causas son las responsables de la existencia de sociedades en donde la tragedia el sufrimiento y el horror son moneda de cambio. La Era de diez mil años que transitamos se halla marcada por el dramatismo más exacerbado, que abarca las miserias, los dolores, las agonía y las muertes de los hombres luchando contra los hombres. 

El siglo XX es el más terrorífico de todos, dos guerras mundiales, otras tantas guerras y luchas menores y seguramente todas en nombre de alguna justificación, pero dejando la consecuencia del terror. Los últimos veinte años aceleran un proceso hacia el fin. El avance tecnológico nos lleva a la destrucción sin remedio. La radiofrecuencia, el electromagnetismo, los gases de combustión, la radiación, y la electricidad en general, contribuyen enormemente a la alteración de las conductas. Tienen incidencia sobre las estructuras celulares del cuerpo y de la Psiquis. Nunca como hoy se despreció tanto la vida, nunca hubo tanta confusión, ni posibilidad de evasión a través de los diferentes medios de entretenimiento y diversión... 

El hombre está fuera de si, ha perdido la brújula para encontrar lo verdaderamente importante y eso lo conduce inexorablemente a la destrucción. La situación iniciada el 11 de septiembre es una campana de alerta para que modifique su actitud, es una prueba y una oportunidad para que oriente el pensamiento y el corazón piadosamente. Pero aquellos que detentan el poder poseen el pequeño campo de la visión ordinaria. Se hallan encerrados dentro de un sistema que regula las conductas de los dirigentes y los obliga a una actuación consecuente. Es la gran trampa del poder, los que llegan son absorbidos, deben adaptarse, ceder a las presiones de otros más enfermos en el ejercicio del mando. La historia se repite, siempre fue igual, pero hoy la humanidad posee elementos más destructivos e inhumanos, bombas atómicas, misiles, bacterias contaminantes, rayos laser, bombardeo neutrónico son parte del arsenal para matar. 

Con este poderío y con la calidad de individuos de este planeta, ¿Cuál puede ser el resultado empleando sólo la lógica? Internamente una gran mayoría sabe que la vida no va a continuar de esta forma, algo desde muy adentro les está anunciando que el futuro es incierto ante la gravedad de lo que ha comenzado a ocurrir. El miedo está latente y se está esparciendo en todos los continentes. Va a surgir la desesperación y una gran crisis emocional se producirá en millones de personas que modificarán su pensamiento y actitudes radicalmente. La fuerza de esos ciento de millones formará un escudo mental basado en la idea regente: PAZ PARA EL MUNDO 

Aquellos que continúen empecinados perecerán. Nadie pregunte cómo, pero así ocurrirá. Luego de la oscuridad llega la luz y es hora de que en la Tierra reine la LUZ. No estamos solos en el Universo la vida se halla esparcida por doquier pero hemos aprendido mal las lecciones. Existen otras realidades que no han sido enseñadas para mantener la ignorancia de las sucesivas generaciones pero la hora ha llegado y la verdad trascenderá las fronteras del oscurantismo. No hay retorno: Dios no juega a los dados, el destino tampoco. Todo aquello que atente contra la LIBERTAD INTERIOR será humo. El fanático de cualquier causa sucumbirá. El que no quiere ver será ausente. La gloria espiritual será de los que cultivaron su propio jardín. La Tierra también ha sufrido las consecuencias de la acción irrespetuosa del hombre para con Ella. El hombre no se ha dado cuenta que ha vivido gracias a este SER que es su planeta, y en estos últimos cincuenta años le infirió más daño que en cinco mil años, por la así llamada civilización. 

La Tierra ha dado su voz de advertencia pero no la han escuchado, pronto va a bramar y ahí sí va a ser tenida en cuenta. Benjamín Solari Parravicini nació el 8 de agosto de 1898 en Buenos Aires, República Argentina y murió en el mes de diciembre de 1974. En el libro CONO SUR "Faro de Luz" en el Mundo, del escritor Argentino Pedro Romaniuk, el autor presenta 131 psicografías de Solari Parravicini. Estos dibujos son proféticos y abarcan diversos temas, desde lo político hasta lo científico. Infinidad de ellos en el presente pueden ser comprobados. Cuando fueron realizados no existía, en muchos casos, ni siquiera la idea y sin embargo con el correr de los años, fueron sucediendo los acontecimientos canalizados por Solari Parravicini. Pero los dibujos 70 y 71 son de una actualidad absolutamente sorprendente si bien fueron "psicografiados" en el año 1939. 

Las ilustraciones son mas que elocuentes y alejan toda posibilidad de duda. La leyenda no admite réplica: "LA LIBERTAD DE NORTEAMÉRICA PERDERÁ SU LUZ, SU ANTORCHA NO ALUMBRARÁ COMO AYER, Y EL MONUMENTO SERÁ ATACADO DOS VECES" 

La estatua de la libertad fue regalada por Francia en el año 1886 al conmemorarse los 100 años de la independencia de los Estados Unidos. Este fue el símbolo de la Libertad para Estados Unidos por casi 100 años. Las Torres gemelas fueron transformándose en el símbolo del poder económico y el orgullo de un país en el que predomina la importancia del materialismo. En el dibujo de la página 71 se ve la estatua partida en dos longitudinalmente y con formas rectangulares, semejando a las dos torres. ¿Solari Parravicini vio premonitoriamente las torres? Evidentemente la respuesta es afirmativa. Él tuvo un proceso de integración con el ETERNO PRESENTE que le permitía vislumbrar los acontecimientos sin secuencia ni correlatividad. 

Veía las circunstancias despegadas del pasado y del futuro, comprendiendo otra realidad. Allí se hallan las causas de las premoniciones, de las clarividencias y de lo paranormal. Esta evidencia es la demostración cabal de la existencia de otras realidades o que vivimos una ilusión al creer que los hechos se suceden. Estamos ubicados en la pantalla, proyectados en la sucesión de circunstancias de una película sin fin, pero siempre recurrente. La vida es esa película con un argumento repetitivo: Nacer, crecer, reproducir, morir, alegría, dolor, amor, odio, yin y yan. Que cada uno haga el balance de su propio papel y podrá apreciar que no discrepa mucho de la representación de los otros. Cada individuo se cree único en su dolor y en su alegría porque es incapaz de ver la película desde la butaca. Fuimos concebidos de este modo pero se nos otorgó la posibilidad de salir, aunque sea esporádicamente, y vernos en la pantalla, como espectadores, y en algunos momentos ver el proyector. 

Si la mayoría de la población mundial comprendiera que la vida posee otras posibilidades más allá de lo material, y la razón valedera de la existencia es orientarse hacia el mundo trascendente: HOY NO HABRÍA GUERRA. Y NUNCA MÁS. El haber vaticinado una acción tan insospechada como la destrucción de las dos torres 62 años antes, es un cachetazo a los que sólo creen en lo que ven. No se dan cuenta que desde la misma ciencia se comprueba que el campo visual humano es sumamente restringido. Ignoran que están ciegos de la vista y del alma. La historia muestra que cada época alcanzó una cúspide y luego se desplomó. Las sociedades más avanzadas están en la cumbre, por ende son las más importantes y si la historia se repite es inevitable que se desmoronen. Quien alcanza lo atemporal encuentra otras dimensiones y tiene la ventura de aproximarse un poco a la Verdad y a Dios. Transitar el año 2002 va a requerir de una gran entereza y riqueza espiritual, muchos son los que deberán desarrollar un estado de conciencia profunda, primer escalón para encontrarse con su esencia. Cada uno tiene un destino sólo se puede modificar en parte si surge la coherencia entre LA IDEA, LA ACCIÓN Y LA PALABRA. 

Desde los lideres hasta los más humildes se hallan involucrados y son los responsables de la hora. 4 Quienes no afronten el cambio sucumbirán irremediablemente. Luego del caos surgirá un estado distinto al actual y muchos son los que intuyen que será mejor que éste. Están en lo cierto. La Absurda Realidad Humanos: Alto, detengan su andar. Basta de lastimar. de herir, de matar en el nombre de DIOS. Los pueblos enfermos engendran dirigentes que atentan contra la vida Las mentes absurdas reiteran cíclicamente los procesos destructivos. 

La Tierra es regada con sangre, impregnada con angustias, miedos y odios, entre chispazos de amor. Nadie escapa de las circunstancias porque EN TODOS ESTAN TODOS como una gran masa atomizada. La ilusión y la ensoñación diluyen la posibilidad de atravesar la frontera que nos separa de la tangente del horizonte verdadero. Estamos en un mismo lugar interrelacionados por las coordenadas emocionales que reverberan e interactúan, creando situaciones múltiples de apariencia exclusiva que buscan la razón ante la vana existencia. Transportados en un diminuto planeta, girando sobre nosotros mismos, dando vueltas y más vueltas alrededor del gran SOL, circundando la GALAXIA y viajando en ella, recorrer la ETERNIDAD. 

Pero estamos aquí, en la misérrima existencia, sin poder despegar hacia las alturas de la CONTEMPLACIÓN, retenidos por los lazos convulsivos emocionales que como una gigantesca red nos entrecruzan en forma permanente, creando realidades en un mundo de sueños. Predominio del Yo, aislamiento, títulos, jerarquías, honores, poder, dinero, encierran al hombre; carceleros de su espíritu, impiden que atisbe otros Universos, retrasando su evolución. Desde el fondo de la historia surge el bramido impotente que impregna los siglos de existencia, es el 5 designio de la recurrencia de un destino impiadoso. Pese a su pasado, es posible que el HOMBRE se yergue sobre su impotencia, elevando su mirada al cielo, buscando un encuentro primordial con su esencia. Sólo hallando su perdida conciencia producirá el milagro de poder alcanzar el amor, la paz interior y la sabiduría. Cuando perciba su luz, cuando alcance el éxtasis, cuando desarrolle su clarividencia se habrá dado cuenta de la existencia de su alma inmortal. En ese tiempo convertido en SER irradiará con AMOR a todo lo CREADO.