Fran García
Tanto en libros como en revistas, los detractores de la Biblia, acusan a ésta de estar llena de contradicciones. Por ejemplo, en cuanto a los evangelistas del Nuevo Testamento, se dice que unos afirmaban que Jesús nació en Belén mientras otros aseguraban que había nacido en Nazareth. Los mismos escépticos defienden que las dos genealogías de Jesús, recogidas por dos evangelistas distintos, no cuadran entre sí. ¿Cómo puede ser esto posible?...
Acusaciones de presuntas contradicciones en la Biblia ya me las había encontrado antes. Pero dado que últimamente me he encontrado ya en varios libros la denuncia acerca de las contradicciones de los evangelistas, me he decidido, incrédulo hacia tanta acusación gratuita, a ver por mí mismo dónde están estas famosas contradicciones, y que a mí no me constan en absoluto.
Abrí la Biblia. Pero muy poco tiempo tuve que tener abierto el sagrado libro para comprobar la falsedad de tales acusaciones. La antigua obra, escrita ya hace mucho tiempo, permanece como siempre, más sincronizada que cualquier reloj de precisión suizo.
¿DÓNDE NACIÓ JESÚS, EN BELÉN O EN NAZARETH?
Nadie dice en la Biblia que Jesús hubiera nacido en Nazareth. Ni en el Viejo Testamento, que es la primera parte de la Biblia, ni en el Nuevo Testamento, la segunda parte de la Biblia.
De los cuatro evangelistas del Nuevo Testamento, Mateo, Marcos, Lucas, y Juan, que son los autores que narran con más amplitud la vida de Jesús, ninguno dice tampoco que Jesús hubiera nacido en Nazareth. Vamos a ver lo que dice cada uno de ellos:
Mateo da testimonio, en varias citas, que Jesús nació en Belén, por ejemplo, en Mateo 2:1 "Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del Rey Herodes, vinieron del Oriente a Jerusalén unos sabios".
"Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazareth, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David; para ser empadronado con María su mujer, desposada con él, la cual estaba en cinta. Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento"
(Lucas 2: 4-6)
Marcos y Juan no detallan el lugar de nacimiento del Maestro, porque empiezan su narración refiriéndose ya a un Jesús adulto, cuando empieza su misión o ministerio, y cuando contaba aproximadamente unos 30 años de edad. Fueron Mateo y Lucas los que se entretuvieron contando detalles de Jesús cuando éste era niño y adolescente, y por eso, ampliando esta primera etapa de su vida, apuntan que Jesús nació concretamente en Belén.
El hecho de que Marcos y Juan no repitan un mismo dato que ofrecen Mateo y Lucas no quiere decir que los dos primeros estén negando lo que dicen los dos últimos.
Ahora vamos al contexto de la narración bíblica para hacernos una idea mejor: María y José vivían en la región de Galilea, en una ciudad llamada Nazareth. Así lo refleja Lucas, en el capítulo 1, versículos 26 y 27: "Al sexto mes el ángel Gabriel fué enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazareth, a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María".
Ahora veamos qué nos cuenta después el mismo evangelista en Lucas 2: 1-3:
"Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César, que todo el mundo fuese empadronado. Este primer censo se hizo siendo Cirenio Gobernador de Siria. E iban todos para ser empadronados, cada uno a su ciudad"
Es decir, que María y José, como decíamos antes, vivían en Nazareth. Al ordenar el César que se hiciera un censo, ambos tuvieron que viajar a su ciudad original, la ciudad de David, Belén, para empadronarse en la ciudad natal de su familia, que provenía de David. Estando ambos allí, en Belén, ocurrió que nació Jesús. Así de sencillo.
Cuando iban a regresar otra vez al lugar donde vivían, Nazareth, un ángel les advirtió que huyeran los tres, María, José, y el hijo, Jesús, hacia Egipto, puesto que el Rey Herodes había ordenado matar a todos los niños menores a 2 años, temeroso de que Jesús le pudiese quitar su trono. Los sabios que habían llegado de Oriente, esto le habían preguntado al Rey Herodes, nada más llegar: ¿Dónde está el Rey de los Judíos que ha nacido?... Y esta simple pregunta al parecer no le había hecho ninguna gracia al sátrapa judío.
Tras el paréntesis de una temporada de refugio en Egipto, Jesús y sus padres volvieron a Israel y se instalaron otra vez en Nazareth. "Y vino y habitó en la ciudad de Nazareth, para que se cumpliese lo que fue dicho por los profetas, que habría de ser llamado nazareno" (Mateo 2:23).
Esto explica que Jesús fuera conocido después en el Israel de la época, como "Jesús de Nazareth", tal como lo registran los evangelistas y otros autores de la Biblia. Pero ninguno de ellos afirma en ningún momento que el Maestro hubiera nacido en la ciudad de Nazareth.
¿Es necesario repetir en todos y cada uno de los 66 libros que componen las Sagradas Escrituras todos los detalles sobre la vida de Jesús? Entonces tendríamos el mismo libro repetido 66 veces. Afortunadamente, todos sus autores, por inspiración de Dios, van relatando y revelando información diferente, complementándose perfectamente lo que se dice en unos libros con lo que se dice en los otros.
Mateo y Lucas especifican que Jesús nació en Belén, pero Marcos y Juan apuntan otras cosas diferentes que Mateo y Lucas no habían escrito. Entre todos completan la historia.
¿Hay alguna contradicción en todo ello? No.
POR QUÉ NO COINCIDEN LAS GENEALOGÍAS QUE PRESENTAN LOS EVANGELISTAS?
Retomando el mismo hilo que seguíamos en el tema anterior, en este apartado tendremos que desatar ahora dos nudos para despejar la incógnita.
Vamos con el primer nudo. Marcos y Juan no nos facilitan ninguna genealogía de Jesús. Sin embargo, Mateo y Lucas nos presentan cada uno de ellos una genealogía de Jesús. Las dos genealogías no son iguales.
De nuevo los detractores de la Biblia, escrutando minuciosamente cualquier posible indicio de error, han puesto el grito en el cielo y se han rasgado las vestiduras denunciando que las dos genealogías de Jesús ¡no coinciden!.. ¿Por qué no coinciden?
¿Cómo van a coincidir si son dos genealogías diferentes? Jesús tiene que provenir de dos líneas de ascendientes, una la de su padre, José, y otra, la de su madre, María. Los dos miembros del matrimonio, padres de Jesús, tendrán que derivar forzosamente cada uno de ellos de una línea de descendencia distinta.
Jesús no puede venir de una única línea, sino como es normal, de dos, la del padre y la de la madre, como todo el mundo y como nosotros mismos. Y aunque José sólo fué el padre adoptivo, puesto que fué Dios quien concibió a Jesús a través de María, la línea de ascendientes de José no podía ser una línea casual o escogida por Dios al azar, sino también escogida.
Mateo nos presenta una genealogía que empieza con Abraham y termina con Jesús.
Sería la genealogía del padre de Jesús, José.
Lucas por su parte nos presenta una genealogía más larga, y distinta, que empieza con Jesús y va hacia atrás en el tiempo, remontándose hasta Adán.
Pasemos ya a desatar el segundo nudo de las supuestas contradicciones en las dos genealogías de Jesús, y que se refiere ahora concretamente a la persona del padre de Jesús, José: Porque resulta que mientras Mateo dice que el padre de Jesús, José, era hijo de Jacob, Lucas por su parte dice que José era hijo de Elí. Entonces, ¿Quién era el padre de José, Jacob o Elí?
Leamos lo que pone el texto bíblico con exactitud: Mateo dice que Jacob "engendró" a José, marido de María, de la cual nació Jesús. Mientras que Lucas no dice que Elí engendrara a José, sino que José era "hijo" de Elí. Lo cual es muy diferente. Lucas quiere decir, hablando en términos de familias, que la familia de María, José y Jesús, eran familia lógicamente del padre de María, Elí. Evidentemente. José era yerno de Elí, y estaba integrado y pertenecía a la familia de Elí, lo cual es correcto.
Jesús y su padre quedaron entroncados y emparentados con la familia de Elí, el padre de María. José era considerado "hijo" o miembro de la familia de Elí porque se había desposado con la hija de Elí. Esta explicación está de acuerdo con el uso de las costumbres judaicas de aquella época.
Vayamos a las pruebas y a los hechos. En el texto griego original del evangelio de Lucas, no aparece aquí en este versículo la palabra "hijo" habiendo sido suplida por los traductores en su sentido cultural más acertado, y más familiar posible. Es decir, que Lucas en su evangelio que escribió en griego, no dice en ningún momento que Elí engendrara a José ni utiliza tampoco en griego la palabra "hijo" en ningún momento, tal como la conocemos nosotros. Simplemente, Lucas emplea un término referido a "pariente" o "familiar".
Dado el peligro que a veces desprenden estos traductores de los textos sagrados a otros idiomas, se hace necesario tener siempre como guía los textos originales, escritos en hebreo, griego, etc... Podemos adquirir un ejemplar de la biblia escrita en sus idiomas originales, en librerías especializadas.
Ambas genealogías son idénticas desde Abraham hasta David. Después, a partir de David, van por 2 vías diferentes. (Ver el gráfico que se acompaña. Este gráfico ha resumido los nombres más importantes para no hacer la cadena demasiado extensa)
¿Qué quiere decir esto? Que del hijo del legendario Rey David, Salomón, desciende la genealogía de José, el padre de Jesús.
Y de otro hijo de David, llamado Natán, desciende la genealogía de Elí y su hija María, la madre de Jesús. Son dos líneas paralelas dentro de la línea davídica.
Las genealogías de estos dos hijos de David, Salomón, del que derivará José; y Natán, del que derivará María, no son exactamente la misma, sino dos líneas paralelas dentro del linaje davídico. La descendencia de Jesús, es pues, davídica pura, y por partida doble, por padre y madre.
Luego ya hemos resuelto el enigma. Las dos genealogías no coinciden porque son dos genealogías diferentes, tal como dice la Biblia y tal como habíamos dicho al principio. ¿Hay entonces alguna contradicción en las dos genealogías? No.
Otra prueba de que las genealogías de Mateo y Lucas son perfectas es que durante la época posterior a Jesús, ningún enemigo de los seguidores cristianos del Maestro se atrevió nunca a decir nada en contra de lo que los evangelistas habían escrito.
Todos los sacerdotes, fariseos, etc...buscaban siempre cualquier posible indicio para acusar de falsedad a los seguidores de Jesús y armar rápidamente un gran revuelo, máxime si tenemos en cuenta que los eruditos y funcionarios de la religión judía eran extremadamente fanáticos.
Sin embargo y según consta, nadie de la época acusó de falsedad a las genealogías de los evangelios. ¿Por qué? Porque, para entendernos, allí, en Israel, todos se conocían. Todos conocían a las personas, a las familias en su más amplio sentido, y era evidente que los textos decían la verdad. A nadie se le ocurría negar la realidad porque hubiera sido una acusación descaradamente falsa. Nadie pudo denunciar aquellas genealogías que habían escrito los evangelistas.
Hay otro punto interesante para resaltar en el tema de las genealogías que aparecen a veces en la Biblia, y es que en algunas ocasiones se citan genealogías abreviadas.
Por ejemplo, cuando en algún pasaje se dice por ejemplo que Jesús era hijo de David, todo el mundo sabe que realmente Jesús no era hijo directo de David, sino su descendiente. Todo el mundo sabe que David no era hijo de Abraham sino su descendiente. Pero se abrevia para no tener que estar citando continuamente los largos árboles genealógicos.
Un último detalle sobre otra absurda acusación que dice que María no era virgen porque Jesús tenía hermanos. María era virgen cuando dio a luz a Jesús, hijo en realidad no de José sino de Dios.
Después, una vez que ya nació Jesús, María y José como cualquier otra familia normal, tuvieron hijos, que fueron hermanos menores todos de Jesús. En realidad eran hermanastros, porque eran hijos de la misma madre pero de distinto padre. Pero hasta antes de nacer Jesús, María era una muchacha joven, y virgen; y estaba prometida con un joven llamado José.
Otra vergonzosa acusación que queda desmontada como un simple embuste que es.
Al final todo coincide. En realidad ni el reloj de precisión más sofisticado del mundo llegará a tener nunca tanta precisión como tiene la Biblia. Y si nó que se lo pregunten a Michael Drosnin...