domingo, febrero 12, 2023

Ku-Klux-Klan

Raúl Núñez 

Es difícil definir con certeza lo que significan las siglas de Ku-Klux-Klan, aunque sabemos que el vocablo "kuklos" proviene del griego y se puede interpretar como "circulo" y el vocablo "Klan" seria de origen escocés. 

Otras definiciones o interpretaciones seria la deformación del vocablo "kukulkan" el dios azteca de la luz, y para otros seria solo una onomatopeya de ¡Kill, Kill, Kill! o sea "Mata, Mata, Mata". 

Sus orígenes también son oscuros aunque algunos biógrafos de esta sociedad secreta nos hablan de seis oficiales de las fuerzas sudistas habrían creado las bases de esta sociedad, pero como cabeza visible otros biógrafos denominan al General Nathan Bedford Forrest en el año 1865 en la localidad de Pulaski, Tennesse. Bedford Forrest ya tenía una fama y un curriculum para ser el real creador de la organización, la matanza en el Fuerte Pilow de varios centenares de personas de color lo había encumbrado entre los fervientes deseos racistas de mucha gente de la zona, que veían en este personaje, el resurgir de los ex-esclavos y por consiguiente la amenaza para la raza blanca y sus intereses económicos. 

Entre los años 1868 y a 1872 se calcula que el K.K.K. constaba con un medio millón de adeptos. En esta época resultan incontables los crímenes y todo tipo de vejaciones que realizó la organización del K.K.K. Solo en Carolina del Sur en medio año se supo que 35 linchamientos mortales de personas de color llevaban la firma del K.K.K., y aunque en el año 1870 se aprobaron las leyes de dar libertad a los negros y derecho a voto la verdad es que los negros no notaban mucho los cambios. 

El general Grant que había reemplazado a un débil Andrew Johnnnson creía que con esta medida se acabaría de raíz el problema, pero estaba muy equivocado ya que a pesar que los negros comenzaron a tener mejores condiciones, igualmente fueron considerados persona de segunda categoría, y solo cuando empezaron a llegar al Congreso se materializaron algunos hechos de la ley realizada por el General Grant. 

En 1877 el Congreso se inclinó a favor de retirar los derechos electorales de los negros y que estos "sin ser esclavos" pudieran emplearse como trabajadores a cambio de la participación de los republicanos sureños en el gobierno de su territorio de acuerdo al juego electoral vigente. En estos años es cuando el K.K.K., inicia más que nunca el terror ante la "altanería negra". Hay que hacer notar que en el Congreso muy preocupados ante el problema racial se dieron soluciones de todo tipo, entre algunas se puede mencionar la de los "compresivos" que deseaban "embarcar nuevamente a todas las personas de color de vuelta a su África natal". 

Los lectores de buena memoria recordarán que esta solución fue planteada hace poco por un político italiano ante la gran cantidad de emigrantes llegados recientemente a las costas italianas, lo que nos hace ver que pese al paso del tiempo hay muchas cosas que no cambian, ni en actitudes ni en formas, por esta razón los problemas permanecen enquistados durante generaciones. Entre los últimos años del siglo XIX y los primeros del siglo XX los sureños blancos de dedicaron a recuperar sus riquezas perdidas en la Guerra de Secesión Americana y los negros se mantuvieron realizando toda la obra de mano barata y viviendo en condiciones mínimas. 

En el año 1915 William Joseph Simmons, ex-soldado y clérigo, además de haber realizado varios oficios, algunos tan curioso como vendedor de prendas intimas femeninas logra hacerse con las riendas de la organización dándole definitivamente las señas de identidad con que se conoce en todo el mundo. 

Entre las pautas que hizo Simmons y que sirvieron para captar muchos adeptos para esta "refundación" de la organización estaban los siguientes puntos: 
•Inculcar a los hombres los principios supremos de la caballería. 
•Desarrollar su carácter, a la vez que proteger el hogar y la castidad de la mujer. 
•Adhesión a los principios patriotas que todo americano debe tener. 
•Con letras más pequeña añadían "y mantener la supremacía de la raza blanca". 

Los métodos empleados por la organización es castigar a los que no comulgaban con sus ideas y se pasa a emplumar a personas con alquitrán, marcar con ácido, mutilar, flagelar y desterrar. Todos estos castigos eran según el Estado donde actuaba el Klan, ya que luego del regreso de los ciudadanos de color de la Primera Guerra Mundial se cambio la sociedad americana en nuevas tendencias. Los militares de color que habían servido a la patria se dieron cuenta que en Europa y precisamente en Francia eran tratados por igual y no tenían porque aceptar ciertas vejaciones al volver a su país de origen. Por estas razones el K.K.K. tuvo que cambiar su actuación según el estado y según la relevancia de su participación en la sociedad. 

En aquellos años se calcula que las personas relacionadas con la organización llegan a unas 500.000 personas, pero en el año 1922 se produce una especie de "Toma de poder" por parte de Hiran Wesley Evans, quien coge las riendas del K.K.K. y lógicamente sus finanzas. En este último punto, Evans destituyó inmediatamente a una pareja muy peculiar que formaban Edward Young Clarke y Elizabeth Tyler, ambas personas habían logrado un éxito primordial en la etapa pasada en la captación de adeptos a la secta y sobre todo "captaciones económicas" entre gente muy influyente a lo largo de todo el territorio nacional. Esta pareja trabajaba para el K.K.K., como una moderna empresa de marketing de las que ahora conocemos y sus métodos rápidos y efectivos habían tenido gran aceptación en otras organizaciones como ser el Ejército de Salvación de los EEUU y para organizaciones como Juventudes Cristianas, e incluso algunas organizaciones izquierdistas. 

Se calcula que la aportación de esta pareja de "relaciones públicas" fue grandiosa, ya que el primer año captaron casi 100.000 adeptos más a la secta y lograron que todos los socios pagaran sus cuotas mensuales y crearon un comercio alrededor de las vestimentas del K.K.K., igualmente como ahora lo realizan los equipos de fútbol modernos. Pero, Evans no quería competidores y vio en esta pareja un peligro a su liderazgo y los destituyó apenas llegó al poder. Entre las muchas señas de identidad del K.K.K. existía una serie de rituales y de formulas para reconocerse entre los miembros y también para relacionarse e infundirse confianza entre los adeptos. 

Por ejemplo, cuando dos hombres se encontraban en un sitio público se saludaban con estas palabras: ¿Ayak? (are you a Klansman?) ¿Es usted un hombre del klan? Akia (a klansman I am) Soy un hombre del klan. Luego, apretón de manos, con retorcijón del pulgar. 

LOS NEGROS AMERICANOS 

La llegada de barcos de esclavos a costas americanas y al Caribe tienen su propia historia. Así como en las pequeñas islas caribeñas siguieron sus propios ritos de una forma más secreta e incluso sus costumbres sufrieron una evolución más local de acuerdo al sitio de donde provenían (el vudú en Haití, por ejemplo) en el reciente país que se creaba en aquellos años, Estados Unidos, la inserción de los esclavos fue más diversa y creo sus propios espacios religiosos, y culturales, aunque socialmente fueron totalmente absorbidos. 

Durante muchas décadas crearon una forma de expresión donde sintetizaban todas sus creencias, sus penas, sus alegrías y pasiones. Los cánticos que creaban inconscientemente mientras recolectaban el algodón en las riberas del río Mississipi y los grandes valles que le rodean, siguieron la evolución de cualquier línea histórica o emocional. La música negra nos conduce inevitablemente a la religión, esto es, al culto del espíritu. Una serie de expresiones sensitivas, provenientes del alma misma que hoy en día tienen su propia rango dentro de la música que escuchamos cotidianamente. 

Este nuevo individuo llegado desde lejos, con piel oscura y transplantado de su espacio vital a un mundo nuevo donde el emigrante europeo trataba de salir adelante en una tierra salvaje e inhóspita hace que salgan los recelos propios de nuestro estado humano. 

El negro supersticioso por naturaleza, con dioses fuera del contexto de la cruz conocida en Europa y con las mismas ganas de vivir en esta tierra fértil y con posibilidades, enfrenta a una sociedad dominadora y jerarquizada contra individuos desarraigados con familias dispersas y temerosos de sus propios amos. Lógicamente que este encuentro de dos mundos da paso a situaciones realmente grotescas y descabelladas, el K.K.K. nace como brazo armado para atemorizar y proteger los intereses económicos de una clase de blancos terratenientes y recibe de inmediato el apoyo de otros blancos que veían sus negocios en peligros ante la evolución social del mundo de los ex esclavos. 

El peculiar sentir, de hacer, de vestir, de cantar, de caminar, es la expresión propia de una forma de ser que lleva implícito el culto al espíritu, donde los barcos negreros destruyeron muchas tradiciones de todo tipo, donde se forzó una violación cultural y donde se produjo la descomposición de la tradición cultural negra, donde sus formulas religiosas pasaron a crear unas formulas Afro-cristianas que buscan en la fuerza y en el alma la verdadera síntesis de estas masivas emigraciones forzosas al Continente blanco y dominador por excelencia. 

LA JERARQUIA DEL KU-KLUX-KLAN 

El K.K.K., está fuertemente jerarquizado. En cabeza se halla el Gran Brujo del Imperio Invisible, que ejerce su autoridad sobre todo el territorio de los Estados Unidos. Después, descendiendo en la jerarquía, encontramos un Gran Dragón por Estado, un Gran Titán en cada distrito, un Gran Gerente por Condado, un Gran Cíclope por "Klavern" o "guarida", la célula-base. Los miembros del Klan se dividen en Águilas y en Caballeros, y estos últimos están encargados de las expediciones de castigo. Esos pomposos títulos pueden parecer ridículos y los miembros del Klan están perfectamente de acuerdo en que es así. Todo estaba hecho para asustar e impresionar a los negros, dado que se sabía de su grado de superstición al principio, pero cuando este sistema fallaba no se dudaba en recurrir a otros métodos más violentos. 

En efecto, el K.K.K. no tardó mucho en degenerar en una agrupación de terroristas y sádicos que causó infinidad de atropellos y hechos delictivos. Los hábitos rituales y su ropaje eran un complemento de todo esto, y se dice que los diseña la hermana de uno de sus fundadores: larga túnica blanca, ceñida por una cuerda, capirote puntiagudo a la manera de los penitentes españoles que puede llevarse alzado por encima de la frente, o bien ocultando todo el rostro. 

En los años 50 sube al poder David C. Stephenson quien continua en la línea anterior, pero se da cuenta que una forma de no tener problemas con la justicia es participar en el sistema político americano, es así, como su esfuerzo va encaminado a ocupar puestos políticos con algunos miembros destacados del Klan. Tanto Evans como Stephenson logran introducir a miembros del Klan en el Partido Demócrata y de esta forma logran protección estando dentro del propio Gobierno americano. 

En el año 1964 Robert Shelton, Mago Imperial de los Klans de América recobra en Carolina del Sur algunos detalles rituales del Klan antiguo, y aunque clandestinamente continua existiendo camuflado como otras entidades de tipo para-militar. En los últimos meses del año 1976 el Klan sufrió escisiones generalmente nunca explicadas por sus dirigentes. El tronco matriz que dirige Robert Shelton ha tenido una rama que se llama los "Caballeros del Ku-Klux-Klan" y tienen la base en Nueva Orleans y están dirigidos por David Duke. También Bill Wilkinson ha creado otra ramificación paralela llamada el "Imperio Invisible" con base en Luisiana. Ambas ramas secesionistas dicen tener nexos de unión con organizaciones racistas inglesas. 

Las innumerables divisiones del K.K.K., en estos últimos años, hacen pasar desapercibida la asociación; se calcula en estos momentos que los Estados Unidos tiene localizados más de 440 grupos de índole racistas, los cuales trabajan para atraer a grupos derechistas radicales y gente de ideas religiosas extremas. Incluso existe un Comité de Naciones Arias el cual dirige Neumann Chilton. Estos grupos radicales realizan una mezcla de rituales cristianos y nazis, incluso reuniéndose todos los Domingos en Iglesias donde nos es extraño ver saludar con el clásico brazo en alto. Los dirigentes de estos grupos de esta manera tratan de mostrar a sus partidarios y posibles adeptos que su lucha es religiosa, una especie de Guerra Santa, para instaurar la supremacía blanca. Todos estas fracciones racistas tienen ahora vinculaciones en el ámbito mundial y es difícil diferenciar unas de otras. 

Williams Pierce autor de una controvertida obra Los Diarios de Turner de tendencia racista reconoce que se ha iniciado una Guerra Santa en el año 1993, precisamente en Waco, Texas donde los partidarios de la supremacía blanca, tratan de imponer una vez más sus "cualidades" ante el peligro de otras razas impuras. Las relaciones entre diferentes organizaciones de tipo fascistas y algunos acontecimientos como los ocurridos en Waco en el mes de Febrero del año 1993 hacen pensar que de alguna forma existe un nexo internacional entre todas estas organizaciones. 

Precisamente el ex infante de Marina Timoty Mc Veigh protagonista y autor del atentado al Alfred P. Murrah Federal Building el 19 de Abril de 1995 en Oklahoma City (USA) dijo pertenecer a una agrupación que sé hacia llamar Milicias de Michigan, relacionada años antes con la secta que dirigía David Koresch en un rancho ubicado cerca del Monte Carmelo, Waco, como han podido determinar las investigaciones. Los tribunales no pudieron demostrar la vinculación entre la organización de Mc Veigh y la secta davidiana pero el comportamiento y las declaraciones tanto de Timoty Mc Veigh como de su compañero Terry Nichols nos hacen pensar que existe una guerra declarada y estas acciones que ellos denominan simplemente como "tácticas legitimas" es un acto más de guerra contra lo que consideraban un Gobierno Federal Autoritario, idea arraigada en muchos otros grupúsculos fanáticos europeos que concuerdan en los ideales de una raza pura y sin mezclas o simplemente por defender un nacionalismo fuera de toda racionalidad. Entre este tipo de organizaciones y pequeños grupos de fanáticos es donde se han insertado los nuevos elementos renovados del K.K.K. y donde buscan sus nuevos adeptos a principios del siglo XXI. Las acciones de antaño como K.K.K., de tiempo en tiempo saltan a la prensa, así fue el caso de James Byrd en 1996, ciudadano de raza negra, quien fue arrastrado por los conductores de una camioneta hasta morir. 

La mala suerte hizo que aquel día se cruzara con unos elementos adeptos al K.K.K., como lo confesó uno de los asesinos, Charles Lee, cuando fue localizado por la policía. Hoy en día la mayoría de la población americana observa el K.K.K. casi como una anécdota folklórica. En el año 1999 en la ciudad de Nueva York una ramificación del K.K.K. histórico, pidió permiso a las autoridades de la ciudad para realizar una marcha en el día que ellos denominan del Orgullo Blanco, luego de muchas amenazas vedadas se quedó en un simbólico paseo de 15 integrantes de la organización racista. La población neoyorquina les increparon duramente, mientras 200 policías protegían al pequeño grupo que desfilo con túnicas y capirotes pero con la cara descubierta (existe una ley en el estado de Nueva York que prohíbe concentraciones donde se usen máscaras y disfraces) con máscaras o no, la amenaza de la incomprensión y de convivir con semejantes de diferentes tonos de piel, credos, o costumbres diferentes a nuestro entorno siguen siendo una papeleta pendiente en la sociedad de hoy. La realidad que vivimos cotidianamente nos demuestra que no hemos avanzado mucho y que en muchos aspectos de la vida la historia vuelve a repetirse cada cierto tiempo.
 

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