FRAN GARCIA
Cientos de kilómetros de la misteriosa región de Nazca muestran una infinidad de dibujos y representaciones, algunos de ellos todavía sin descifrar y otros sin descubrir. Es en la zona de Palpa en donde se encuentra una figura conocida popularmente como "El Colibrí ". Hasta ahora se ha creído identificar la forma de una especie de avioneta en su interior, pero podría tratarse de una misteriosa cara....
Las hermosas pampas de Nazca... Palpa, Ingenio, Nasca y Socos. Allí hay unos inmensos grabados de dibujos y líneas geométricas y zoomorfas que impresionan por su complejidad e intrigante significado.
Se calcula que hacia el año 300 a.C se forjó la legendaria cultura nazca. A sus habitantes se les atribuye una ancestral actividad: realizaban hendiduras de unos 30 cms, en el duro y seco suelo desértico, plasmando en éste enormes figuras cuyos bordes eran cubiertos con piedras extraídas de lugares remotos, pues esta zona era un extenso llano desértico. Una costumbre heredada de otros pobladores más antiguos, pues se ha observado que en realidad hay grabados remotos sobre los cuales los nazca siguieron imitando este extraño ritual, construyendo otros dibujos posteriormente. Los temas de las inscripciones se dividen en dos grandes categorías: figuras y líneas.
Oficialmente en 1.927 el arqueólogo peruano Mejía Xespe descubrió el legado. También Julio Tello, en los años veinte, reprodujo los diseños por primera vez. Aunque los españoles durante la conquista de América ya describieron en sus crónicas el curioso fenómeno de las líneas de Nazca.
En 1.939 el científico estadounidense Paul kosek investigó el lugar. La teoría más aceptada ha sido precisamente la de Kosek, según el cual, las líneas y figuras constituyen el mayor libro de Astronomía del Mundo.
Pero los estudios más profundos se realizaron a partir de 1.946 por parte de la doctora alemana María Reiche. Para Reiche, las líneas componen un calendario solar y lunar, usado por los antiguos astrónomos de Nazca. Según la investigadora alemana, los geoglifos predicen la posición de estrellas y constelaciones en varias épocas del año, y servían por tanto para determinar las estaciones de siembra y cosecha, entre otras utilidades. Según se ha comprobado, el pico de algunas de estas aves apunta al amanecer en el solsticio de verano.
Sobre una de las lomas del área de Palpa, aparece con toda nitidez uno de los dibujos más representativos de todo este gran enigma de los geoglifos descubiertos en Perú. Se trata de la figura de un gigantesco "Colibrí", como así se le ha llamado, que recuerda mucho a otras representaciones de la vecina Nazca. Una de esas figuras, conocida como "El pájaro Fragata" representa supuestamente a otro ejemplar de colibrí. Un tercer colibrí presenta un largo y sinuoso cuello que semeja a una serpiente reptando por el desierto. Y aparte de estos dos, hay representados en las pampas de Nazca otros ejemplares de aves, como el condor.
El misterio añadido del Colibrí es que dentro del cuerpo de este colibrí de Palpa siempre se ha creído ver la silueta de un avión, como si permaneciera aterrizado en el centro de la figura. La forma de la supuesta nave aérea parece marcar claramente unas alas, un morro y una cola, al estilo no tanto de un moderno avión actual sino más bien de una gran avioneta, puesto que las alas se muestran no en punta aerodinámica sino con formas anchas y toscamente cuadradas.
"El Colibrí"
Las sospechas de la existencia de naves voladoras surcando las pampas de Nazca nos evocan siempre al investigador suizo Erich Von Däniken, quien creía ver "pistas de aterrizaje" en las líneas geométricas que habían sido trazadas con tanta maestría.
Los dibujos sólo pueden apreciarse desde lo alto. ¿Quiere ello decir necesariamente que en la realidad tenían relación con sistemas de vuelo o naves voladoras? Quizás no, porque ello plantearía algunos interrogantes como estos:
* Si fuera cierto que llegaron unas naves extraterrestres muy sofisticadas capaces de recorrer distancias interestelares, ¿para qué necesitarían unas rudimentarias pistas de aterrizaje? ¿para aterrizar como si fueran avionetas cessnas?...
* ¿Puede una avioneta o un avión, construido con planchas y tornillos, realizar un viaje por el espacio profundo a muchos años luz desde la Tierra?...
* ¿Podría ser la representación de una nave espacial más sofisticada que un avión de tecnología terrestre actual?
Claro que también se puede pensar en la posibilidad de que podrían haber sido artefactos voladores diseñados solamente para recorrer las limitadas distancias de la geografía andina.
El escritor Javier Sierra recoge la leyenda del "Cori Quente" en su libro "En busca de la Edad de Oro", un mito ancestral del que habla Rosa María Alzamora, experta en tradiciones andinas. Cuenta esta leyenda que un colibrí, obsesionado por ver la cara al Sol, se camufló entre las alas de un cóndor para cumplir su sueño. El Sol lo convirtió en pájaro de oro, nombrándole mensajero entre los dioses y los hombres. Alzamora cree que la figura del Colibrí está relacionada con esta mítica leyenda.
Y es que se han barajado muchas teorías por parte de científicos e investigadores acerca del misterio de las líneas en general. Algunos científicos han propuesto como explicación que las líneas de las pampas tenían una utilidad ritual en relación a la lluvia, dado que era un bien tan escaso, pero nadie acepta seriamente esa hipótesis como la solución definitiva.
También se ha especulado en torno a la idea de que junto con las demás figuras animales, esta imagen del colibrí intentaría representar una constelación más entre los grupos de cuerpos celestes venerados por los nazcas. El paisaje de estrellas del firmamento habría quedado reflejado así en el suelo como si fuera un espejo astronómico.
Aunque es desde arriba desde donde los geoglifos pueden ser vistos en su conjunto, no quiere decir ello que los glifos tuvieran relación obligada con artefactos voladores. Yo personalmente, me inclinaría más bien a pensar que serían trazos rituales con sentido religioso, dedicados a los dioses, procedentes del cielo. Los mismos dioses que un día, hace mucho tiempo, tras desatar una rebelión en el Cielo, descendieron a habitar en la Tierra. Y mucho tiempo después, regresaron al abismo. Estas "construcciones" a ras del suelo, al igual que las construcciones de otras civilizaciones antiguas, estarían relacionadas con "La Religión de las Estrellas" (para más información consultar el artículo de ARE@ titulado "La Religión diabólica del culto a las Estrellas")
Todas las hipótesis están abiertas y son respetables. Parece bastante sensato no obstante si nó descartar sí al menos alejar la hipótesis tan llamativa o sensacionalista de la supuesta avioneta, después de que hubiera sido considerada por los investigadores durante mucho tiempo.
¿Entonces el dibujo interior del cuerpo del colibrí podría referirse quizás a un pájaro, el pájaro de oro camuflado del que hablaba la experta Alzamora? Tal vez sí.
Pero tal vez la figura represente una cara. Y ambas interpretaciones puede que en el fondo sean la misma. Quizás hasta ahora la visión del observador, por un efecto óptico, se ha enfocado desde una perspectiva en negativo, es decir, se ha visualizado la imagen como si se tratara de un negativo fotográfico, pero si se invierte el enfoque a modo positivo, como si la imagen se hubiera revelado, entonces desaparece la forma de ave o nave y se asoma de pronto un rostro de aspecto humanoide. ¿Cuál es realmente la imagen positiva?
Siguiendo esta interpretación visual, podría percibirse la forma de una frente, y una nariz que desciende perfectamente para ancharse más abajo. Curiosamente el aspecto del rostro guardaría un parecido físico con las etnias de la civilización local y no parece presentar un aspecto de tipo europeo. La supuesta cabeza muestra también las formas del pelo y la boca. Y lo más sorprendente es que, a pesar de la calidad regular de las tomas fotográficas, se vislumbran aceptablemente unas marcadas cejas, y unos ojos.
Si se tratara, en efecto, de una cara, en ese caso el rostro se correspondería seguramente con alguien importante de esta civilización. Seguramente alguien, que como decía la leyenda, fué elegido como intermediario semidivino entre el dios Sol y los seres humanos...
