Estamos aquí, en este instante de la vida en que evalúas si puedo mejorar lo que hago, más allá del resultado material de nuestras acciones. Si a lo que hacemos no le incluimos un elemento espiritual, a nuestra vida le falta algo. La capacidad de encantar vibra en el aire el día de hoy, y para poder manifestarla y producirla debemos darle presencia en nuestra vida, si estamos receptivos y usamos nuestros instintos naturales, recibiremos los mensajes que nos envía nuestro ser.
Para realizar magia, debemos vencer los obstáculos y dejar el pasado atrás, dejar de cargar lo que nos impide mudar la piel, nos impide crecer y ser realmente quienes somos. Somos magos sanadores, nuestra parte espiritual quiere hacer acto de presencia, pero lo tenemos ocupado con nuestro miedo. Podemos estar viviendo encantamientos en nuestra vida diaria que no nos aportan aquello que necesitamos, que no deseamos… nos engañamos, nos mentimos y es porque en realidad no queremos ver la verdad, insistimos en permanecer fuera de nuestro tiempo real y así nos perdemos lo que está ocurriendo a nuestro alrededor.
No hay nada más que el aquí y ahora, el pasado pasó y el futuro está por llegar. Somos seres espirituales y sin esa parte fundamental de nosotros no hay magia. Realiza tu encantamiento desde tu fuerza vital en al aquí y ahora y producirás la magia para vivir más ligero, con menos cargas y más vitalidad. Recuerda que la humildad es uno de los poderes innatos del mago, es la que nos permite a abrirnos y manifestar la receptividad del aquí y ahora.
Despierta a tu mago interior, recuerda al sanador que hay en ti, conecta con tu espíritu para que te exprese la verdad, presta atención al momento presente y encontrarás el equilibrio y la paz interna para encantar el Tiempo.
Yo manifiesto mi magia,soy el encantador del Tiempo, yo soy otro tú.
