Bernabé Tierno
1. Pásale factura cada día por sus fallos, defectos y fracasos. Mejor si se los echas en cara delante de otras personas.
2. Cultiva el mal carácter y la aspereza de trato y muéstrate malhumorado, a ser posible sin motivos.
3. No te des nunca por satisfecho con lo que hace, ni con sus atenciones y cuidados. No caigas nunca en la debilidad de reconocerle mérito alguno.
4. Monta un drama por cualquier nimiedad ; magnifica lo más insignificante e intrascendente y no cedas hasta que sienta culpable.
5. No expreses nunca tu dolor o enfado abiertamente, ni digas lo que piensas o sientes. Si guardas bien tu rabia y tu odio, pronto llegarás a la conclusión de que vives con un ser despreciable y hasta ceder en algo y esto es una debilidad que no te puedes permitir.
6. No des jamás el primer paso en las relaciones íntimas; que sea tu pareja quien tome siempre la iniciativa y ya verás tú si te sientes o no con ganas.
7. Impón tu criterio en todo, se dominante ya sea en lo referente a la educación de los hijos o en cualquier otro asunto. No cedas jamás. La delicadeza y el tacto son muestra de debilidad.
8. Ponte siempre en lo peor, muestra desconfianza y recelo y exígele que, como prueba de amor, se adapte a tus gustos, deseos y caprichos.
9. Involucra a los hijos en vuestros conflictos y que desde sus primeros años se familiaricen con vuestros modales groseros, descalificaciones, gritos e insultos.
10. Niégate por sistema a compartir con tu pareja gustos, aficiones, proyectos...cuanto menos tengáis en común, mejor.
11. Flirtea con cualquiera, no desaproveches las ocasiones y provoca celos. Hazle dudar de tu amor y así mantendrás mejor su interés por ti, le tendrás más pendiente y loco de celos.